Entrar a la clínica de Deaton parecía una buena idea, después de todo solo iban por algo de ceniza de montaña.
¿Que podría salir mal?
Liam y Scott buscaban entre los frascos de la repisa mientras Lydia y Stiles lo hacían en los cajones de los gabinetes y Theo junto a Malia y Mason lo hacían en la parte trasera de la clínica.
Todo iba bien hasta que Theo fue avisar que ya la habían encontrado.
Scott se sobresalto al tiempo que lanzaba un frasco por el susto hacia los pies de Theo.
El polvo blanco que estaba ahí comenzó a subir hasta cubrirlo.
Cuando por fin el polvo se fue pudieron ver a Theo o más bien lo que quedaba de Theo.
Theo de pronto sintió que todos lo miraban como si una segunda o incluso tercera cabeza le hubiera crecido.
Luego miro a su alrededor y a las fotos de animales.
— Yo que sepa no tengo ningún perrito.
Dijo y se giro para buscar a sus papás que supuso estarían por ahí.
El Theo de unos siete u ocho años al llegar al lugar donde Mason y Malia lo esperaban junto a los demás se quedaron con la boca abierta al verlo.
— ¿Tengo algo en la cara?
Pregunto y al verlos asentir se acerco a un pequeño espejo de pared, poniéndose de puntitas.
— Yo no veo nada, ¿y mis papás?
Todos tragaron en seco.
— ¿Tus papás?, tus papás están de, mm, de viaje.
Dijo Stiles y Theo frunció el ceño.
— ¿Y Tara?
Pregunto comenzando a buscarla por el lugar.
— ¿Tu hermana?
Pregunto Scott y Theo le asintió.
— Si, ¿donde está?, ¿se escondió?
Todos se miraron entre sí.
— Prometo no decirle que ustedes me dijeron.
Lydia se acercó hasta Theo y lo miro a los ojos.
— Theo, Tara, ella, ella no.
Los ojos de Theo comenzaron a picar y a cristalizarse.
— ¿Ella está bien?
Lydia negó y Theo se comenzó alejar.
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Mi Niño || Thiam [Terminada]
Fanfiction- Se que puede sonar egoísta, pero te quiero solo para mi. Theo Raeken, la persona más detestable del mundo. Incluso a Peter lo aprecian más que a él. Pero en fin. Y si resulta que Theo no es tan MALO.