𝗣𝗔𝗥𝗧-𝗧𝗜𝗠𝗘 𝗕𝗢𝗬𝗙𝗥𝗜𝗘𝗡𝗗 ✧ lee know

≫ 17 ; dejar ir ≪

Era muy de noche cuando tocaron el timbre de la casa. Minho se levantó bufando y rascando su nuca en el camino.

Había sido una tarde difícil, sin duda el silencio era algo a lo que no estaba acostumbrado.

—¿Quién es? —preguntó con voz ronca y tratando de acostumbrarse a la luz de los faroles en la calle —. ¿Jisung?

Se sorprendió por ver a su amigo apretando los puños y con los labios formando una fina línea. ¿Estaba enojado?

—¿Están las niñas en casa? —preguntó en voz baja.

—No, están en una pijamada —suspiró —. Por lo general no les gusta, pero supongo que hallaron una buena excusa para estar lejos de mí.

El enfado de Jisung flaqueó unos segundos y quiso preguntar por eso último, hasta que el llanto de Mirae vino a su mente y se le pasó.

—Bien. Porque quiero hablar contigo.

Minho ladeó la cabeza sin comprender, cuando en eso recordó las noticias en el periódico. Una sonrisa retorcida adornó su rostro.

—¿Qué? ¿Vienes a disculparte por enamorarte de Mirae? —rió —. No es necesario, tú siempre fuiste mejor opción.

—¿De verdad crees que yo te haría eso? —se acercó más al alto —. Sé que cuando alguien se enamora es sin que uno lo planee, pero incluso si a mí me gustase Mirae, no estaría con ella sabiendo que a mi mejor amigo también le gusta. Y menos aún si es correspondido.

Minho negó riendo secamente.

—Yo no le gusto a Mirae, ya ves que prefirió comprometerse contigo

—Sabes que mi padre lleva tiempo queriendo comprometerme, Mirae no tiene nada que ver. Fueron sus padres y el mío quiénes decidieron esto.

—¿Y por qué Mirae me ignoró entonces? —empujó a Jisung —. Si ella no lo quisiera no se hubiera alejado de mí.

—¡Tenía miedo! —empujó a Minho de vuelta —. Estoy seguro de que eres consciente de la situación con sus padres y lo mucho que quieren ellos que ella se comprometa con alguien rico, pero no es lo que ella desea.

—Nadie la obligó a alejarse. Además, ahora estoy con Yeji.

—¡No la amas, le vas a hacer daño!

—Puedo hacerlo, Yeji y yo encajamos muy bien. Lo único que falta es el sentimiento, pero de que la quiero, la quiero. Solo necesito tiempo.

—¿Pero y qué hay de Mirae? —Jisung estaba frustrándose —. ¿La dejarás llorando?

¿Está llorando...?

—Mirae... —Minho bajó la cabeza y con una sonrisa triste, suspiró —. Ella estará mejor contigo.

Esperó una pronta respuesta de su menor, por lo que le extrañó el repentino silencio. Sin embargo, apenas pudo levantar el rostro cuando un puño se estrelló contra su mejilla izquierda haciéndolo caer al suelo.

—No sé qué diablos te pasa —se agachó y tomó a Minho por el cuello de su camisa —, no sabes lo que te estás perdiendo. Tú amas a Mirae y ella te corresponde, ¿qué importa lo demás? Y si lo que te preocupa es Yeji, menos daño le harás si la dejas ahora antes de que se ilusione más y sea demasiado tarde —lo soltó y una vez de pie, espetó —. Una persona que se da por vencida así de fácil después de haber pasado por tanto... este no eres tú. Este no es mi mejor amigo.

Han dio media vuelta dispuesto a marcharse cuando se encontró con la mirada neutral de Yeji. Jisung cerró los ojos y suspiró pasando por su costado; no tenía nada que decirle, estaba seguro de que ella había escuchado todo.