TsukkixYamaguchi

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- Tsukki!- gritó un peliverde corriendo hacia el rubio.- Hoy no tenemos práctica porque están inspeccionado el gimnasio - dijo deteniéndose frente al farol con piernas.

- Oh , bien - especuló con su tono serio. Y volviendo a caminar ignorando al pecas .

-esto...- jugueteó con sus dedos nervioso- me estaba preguntando ¿si podía ir a tu casa hoy?-agachó su rojizo rostro para que el no lo viera.

El rubio se dio vuelta hacia la dirección del peliverde y ve lo nervioso de su actuar, sonrió ante lo tierno que se veía.

-No, tengo que estudiar- soltó otra vez con su tono indiferente.

Giro sobre sus talones y comenzó a caminar, tengo que aprovechar mi Día libre de esos maniáticos de kageyama y hinata. Se detuvo al sentir como alguien jalo de su chaqueta.

-eto...-se escuchaba una voz temblorosa- Solo será un rato, es que hoy mi madre no estará en casa y no quiero estar solo en ella.

Su corazón dio un vuelco, él sabía que a yamaguchi le daba miedo estar solo en casa desde la última vez. Soltó un suspiro y dejó caer sus hombros en señal de rendimiento.

-Solo un rato¿entendido?

-Si!- levanto su rostro junto con sus manos emocionado- Gracias...kei- dijo tímido 

al escuchar como lo llamaba por  su nombre trago en seco y sintió sus mejillas arder, emitió un chasquido con su lengua y se fue del lugar, rascando nerviosamente su nuca. Su rostro ardía al igual que su pecho.

- de verdad quería estar hoy solo- chasqueó otra vez su lengua- tal vez no recuerda que día es hoy-levantó sus hombros.

Siguió caminando hasta llegar a el salón de clases y se sentó en su pupitre y acto seguido tomó sus audífonos y se dispuso a escuchar música ignorando al resto de las personas que estaban presente. Miró por la ventana y vio como los idiotas que tenía de compañeros de equipo estaban compitiendo por quien llegaba antes a la máquina dispensadora. Rodó los ojos  al ver como el pelinaranja celebraba saltando de un lado a otro mientras que el pelinegro bufaba y oprimía a la misma vez el botón de leche y yogurt.

Decidió ignorarlos. se hecho en el pupitre y se dispuso a dormir una siesta hasta que la clase volviera a comenzar.

Por otro lado el pecoso fue al salón de yachi para que le explicara algo acerca de su tarea inglés, ella era demasiado buena en el.

Le pediría ayuda a Tsukishima pero sentía que de algún otro modo sería pedirle mucho. El ya había aceptado que fuera a su casa por su miedo a estar solo en la suya. Y estaba grandemente agradecido.

-disculpa- se acercó a una chica que estaba en él puerta del salón- ¿Esta Hitoka Yachi aquí?- preguntó rascándose la mejilla nervioso

-Si, deja que la llamo- le dio una mirada de arriba hacia abajo y sonrió pícaramente y entro en busca de la rubia.

Se quedó parado golpeteando la portada de su libreta mientras que esperaba la llegada de su nueva manager.

-¿Gucci?

El peliverde se da vuelta hacia la voz que lo llamaba y ahí ve a su compañero.

-Hinata- dice con entusiasmo- ¿también vienes a preguntarle a Yachi-san sobre inglés?-preguntó al ver la libreta que también llevaba en sus manos. El pelinaranja asiente energéticamente y se quedan esperando a la chica juntos

- Hinata, Yamaguchi-salió la rubia de su salón-¿necesitan de mi ayuda?

-Yachi-san- grita emocionado shoyo- ¿nos podrías ayudar con nuestra tarea por favor?- inclina la mitad de su cuerpo hacia adelante en una reverencia.

Fuera de la cancha Donde viven las historias. Descúbrelo ahora