Después de esa noche llena de pasión y un poco de pena por las paredes "transparentes", Victoria y César, no podían dormir, ya que se pensaban uno al otro, y estar lejos de si mismos; en algún momento de la madrugada, cuando todos dormían, en sus casas Victoria se levantó a ver la luna que estaba en todo tu esplendor. Por otro lado César también se había parado de su cama a ver la luna, ya que le recordaba a Vicky, y en especial un día...
- Ay, si tan solo estuvieras conmigo Victoria, como me gustaría un beso tuyo en estos momentos, pero no importa muy pronto tú y yo seremos marido y mujer.- lo decía César, recargado en una varilla del balcón, suspirando por el amor de su vida.
Por otro lado Victoria tenía muchos pensamientos encontrados, ya que se repetía una y otra vez la idea de casarse con César.
- Ay,Dios mío, será lo correcto?, Podremos ser felices César y yo?, Cómo lo tomarán mis hijos... Los suyos?- decía Victoria con remordimiento
- Y en especial... Qué pasará con Omar, el ha sido muy bueno conmigo, me ayudó en un momento difícil, me apoyo, me dió su cariño- Pensó Victoria mientras miraba la luna.
Victoria tenía que ser feliz, pero si esa felicidad era a costa de que otros sufrieran nunca se lo perdonaría, pero también tenía que pensar por ella, mil pensamientos giraban en su mente, tal parecía que un corto circuito le iban a causar...
En eso, cada quién en su balcón, con la mirada puesta en la luna, dijeron :
- Lo amo-
- La amo-
☆ﾟ.*･｡ﾟRecordare por siempre tu mirada, de la primera vez en que nos vimos, entre millones de estrellas brillaste, cambio la vida para mí ☆ﾟ.*･｡ﾟ
Una vez entradas las 10:00 am, a Victoria le llegó un mensaje, era de César, le pedía que se reunieran en un lugar para desayunar juntos , Victoria acepto encantada, y le dijo un lugar para el desayuno.
Victoria se arreglaba lo mejor que podía, aún que no lo necesitará ya que ella era hermosa tal y como estuviera, pero ella quería verse bonita para el amor de su vida y tal vez futuro esposo.
Eran la 10:55, César ya había llegado al lugar, decidió entrar y esperar.Antes de que llegara Victoria, César le pidió un favor al dueño , le quería dar una sorpresa a su querida Victoria, así que había hecho que vaciarán en lugar, y que no hubiera nadie, aparte del personal.
Dos minutos después llegó Victoria, se acercó hasta la mesa donde se encontraba César y lo saludo amablemente, pero había algo raro, no había gente, y ese lugar siempre estaba lleno.
- Hola Vicky- dijo César dándole un beso en la boca
- Estás loco?, aquí nos pueden ver con facilidad, qué te pasa?-
- No nos va a ver nadie mi amor, reserve el lugar solo para nosotros, y...-
-Y?-
- Te tengo una sorpresa-
- Y qué es?-
- Vicky, si te lo digo ya no va a ser sorpresa-
- Ush- decía Victoria mientras hacía puchero
Ya habían ordenado, estaban muy callados...
- Te pasa algo?- Pregunto César para romper el hielo
- Si, yo quiero ver mi sorpresa- decía Victoria mientras le hacía ojitos tiernos
- Entonces quieres ya tu sorpresa?-
-Sí, awiwis-
- Me da risa tu frasecita - decía César mientras se reía
- Entonces... Ya me la das?-
- Ya te doy qué?- pregunto César con un poco de albur en su pregunta
- Si, también quiero que me des como te imaginas, pero primero quiero mi sorpresa-
- Está bien, pero para eso tenemos que comer el postre-
- El postre?, Para qué?-
- Allí está oculta tu sorpresa-
- Okey, entonces que nos traigan el postre-
- Si que eres desesperada mi vida...- decía César en tono burlón
Al llegar el postre Victoria lo miro con incredulidad, que se podría esconder en un postre?...
-Bueno , abrelo-
- Qué?-
- Pare ver tu sorpresa tienes que abrir el postre-
Victoria lo abrió lentamente, y podía ver algo pequeño, pero que brillaba mucho, al sacarlo quería llorar, era un anillo de compromiso, Victoria estaba que no se lo creía
- Es en serio esto?- decía con lágrimas Victoria
En ese momento César se arrodillo y le hizo la pregunta "-Sra. Ruffo, ¿quiere ser mi esposa?-"
Victoria estaba que se moría, pero al mismo tiempo esos pensamientos la seguían atormentando, sus hijos y... Omar.
- Qué dices Victoria, aceptas casarte conmigo?- decía César suspirando
- Yo...-
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Jaque Mate.
RandomQue pasaría si descubres que toda tu vida es una mentira, y que llevas años con el hombre equivocado, tal parece como si el destino estuviera por hacer un jaque mate.
