『 two ghosts ; larry 』

Capítulo 1.

Su frustración había alcanzado el límite. Tomó el manojo de hojas que tenía junto a la máquina de escribir y las arrugó, todas de un golpe, y las tiró al basurero.

"Hey, Harry, ¿todo en orden?" Zayn entró al estudio al escuchar los ruidos, y vio a Harry de pie en medio del estudio con las manos en las caderas. Su mirada se dirigió al bote de basura, y antes de que pudiera hacer algo, Harry lo jaló por la sudadera. "¡Estás loco! ¡Era una historia increíble!" dijo su mejor amigo, apartándose de él.

"Era basura." Dijo, negando con la cabeza. Se cruzó de brazos. "Necesito escribir algo bueno, Zayn. La editorial quiere libros nuevos."

"Ese iba a ser un libro nuevo."

"Un libro nuevo que no fuera basura."

Zayn rodó los ojos, y se quejó un largo rato mientras estaban en la cocina, preparando dos tazas de té.

"Yo sólo digo que deberías salir de aquí. A lo mejor tu absurdo 'bloqueo de escritor'" imitó su voz, lo que hizo que Harry riera. "Es porque tienes más de un mes sin salir de aquí. Ven conmigo al bar."

"No iré al bar si estás trabajando." Se encogió de hombros, y tomó de su taza de té. "Además, estoy hasta el culo de trabajo. No puedo ir."

"Hoy es mi día libre." Dijo, como si fuese algo obvio. "Y no puedes seguir trabajando si no sabes qué escribir. Salgamos, te llenas de cosas nuevas, y vuelves a encerrarte aquí un mes y medio." Propuso, tomando de su té. Harry frunció los labios. "Podrías liarte con alguien. No en mal plan, ojo. Pero podrías coquetear con alguien. Eso puede ayudar."

Harry se quedó pensando, mientras terminaba su taza de té.

"Está bien."

Louis estaba en la sala, sentado en el sofá con el rostro entre las manos. Eleanor salió de la cocina con dos tazas de té, y le dejó la suya sobre la mesa que tenía enfrente.

"Anda, dime, ¿Qué pasó?" le dijo, con la taza de té en las manos. Louis tomó la suya y le dio un sorbo pequeño, quemándose la lengua, y haciéndola reír inevitablemente. "¡Louis, está hirviendo!" dijo, entre risas.

"¡Pudiste decírmelo antes!" Dejó la taza de té nuevamente sobre la mesa, y suspiró. "Dios, mi vida es una broma pesada."

"Nuestra vida es una broma pesada. Recuerda que tú me metiste en esto." Recalcó, señalándolo con la taza que tenía en la mano. "Ahora, ¿qué quieren que hagamos?"

Louis tomó una bocanada de aire antes de decírselo, sabía cuál sería su reacción.

"Quieren que pida tu mano." Tartamudeó. Eleanor soltó una carcajada.

"Ay sí, me imagino." Dijo, recuperando el aliento. "Ya, dime."

"El, no estoy bromeando." Dijo, en un hilo de voz. "Le venderán la exclusiva a una revista de estados unidos."

"¡Tienes que estar bromeando, Louis!" Eleanor empezaba a alterarse. Él negó con la cabeza. "¿No bromeas?" preguntó, ya nerviosa. Él calló. "Louis."

"Te juro que me encantaría estar bromeando."

"Esto tiene que parar, Lou. Hablo en serio. No pueden seguir haciéndote esto. No pueden seguir haciéndonos esto." Ya estaba frustrada. Se pasó las manos por el rostro, y por el cabello.