Crónicas de una familia no tan primeriza [#3] ψJohnilψ

❝ 004 ; pañales sucios ✩ ❞

Chaeyoung jugaba con su hermanito en el pequeño corralito que mantenía al niño encerrado en una limitada zona de la sala. Desde que la pequeña aceptó la llegada de un nuevo bebé, ella había querido peinarlo y jugar mucho con él.

Ahora le hacía unas lindas coletas con el cabello castaño claro que tenía su hermanito, eran muy delgadas y chiquitas debido al corto cabello que tenía el menor.

—Ya veras que quedarás divino, Jinho— dijo Chae tomando una de sus ligas de su gran estuche, el nombrado sólo se limitó a reír y aplaudir sin entender lo que su hermana le hacía o decía.

Mientras pasaban los minutos, la de cabellos cortos le hacía miles de coletas a su hermano menor y tarareaba una canción infantil para que el pequeño se quedará quieto. De pronto, cuando iba a terminar una de las últimas coletas, un olor desagradable se insertó en sus fosas nasales, haciéndola fruncir la nariz por la constante molestia.

—¿Qué huele así de feo?— preguntó para sí misma Chaeyoung, levantó su brazo y se olió; bueno, los dos días sin querer bañarse no eran el resultado de aquel olor pero sin dudas algo cerca de ella lo era.

Se acercó a su hermanito como última opción de sospecha, el olor se sintió más fuerte cuando aspiró el aire cercano a el de cabellos claros; rápidamente se alejó haciendo una considerable mueca.

—Fuchi, eres tú, Jinho. Te hiciste del baño— se alejó un poco del bebé para respirar tranquilamente, dio una bocada de aire y gritó —¡Papi!

Taeil no tardó en aparecer en la sala con un rostro algo preocupado, su pequeña no solía llamarle con ese tono sino era algo importante o malo.

—¿Está todo bien, ChaeChae?

—Nop, Jinho se hizo popis— exclamó poniéndose de pie con sus dedos oprimiendo su nariz para alejarse de ese horrible olor.

—Ah, sólo es eso— suspiró tranquilo el pelinegro yendo hacia donde estaba su bebé. Cargó al pequeño y dirigió su nariz al pañal de su hijo, rápidamente el olor se hizo presente en sus fosas nasales —Chae, puedes traerme los pañales que están en mi cuarto, por favor.

—Sí, papi— respondió la pequeña corriendo a las escaleras.

Moon dejó recostado a Jinho sobre el sofá, empezando a quitarle sus pantaloncitos de algodón y desabrochando su pañal sucio; Chaeyoung bajó rápido con un pañal en sus manos y se lo entregó a su papi.

—Ay cariño, olvidaste bajar las toallitas húmedas— la menor suspiró y volvió a subir las escaleras —¡No corras en las escaleras Chae, te puede pasar algo!

La pequeña volvió a bajar ahora con el paquete de toallas húmedas y un bote de talco, a pesar de que su papi no se lo había pedido, ella lo veía usar cuando le cambiaba el pañal a su hermano.

—Que inteligente, cariño. Olvide decirte el talco e igual lo trajiste— le halago el mayor tomando las cosas y revolviendo sus cabellos castaños con amor.

Taeil comenzó a cambiarle el pañal a Jinho frente a Chaeyoung que miraba curiosa cada movimiento que su papi hacía; le parecía curioso como él lo cambiaba con tanta velocidad sin hacer un gesto de desagrado por el olor, cuando veía a su papá Johnny hacerlo era lo contrario.

—Papi, ¿Por qué no te quejas del olor como papá Johnny? Él cuando cambia a Jinho se queja y es muy lento, pero tú ya acabaste— dijo curiosa, el tono de su voz era gracioso pues sonaba congestionado debido a sus dedos que apretaban los orificios de su nariz.

—Chae, ¿Sabes cuántos pañales sucios cambie cuando eras una bebé? Esto ya se acostumbro a este tipo de olores— dijo risueño, apuntando su nariz; la menor abrió su boca soltando un ruidito de asombro —Es cuestión de práctica.

—Entonces papá Johnny no practicaba conmigo— contestó la castaña, Moon rió por el comentario y negó mientras le volvía a subir sus pantaloncitos al bebé.

—Claro que lo hacía, pero no mucho. Decía que no soportaba el olor— tomó al pequeño entre sus brazos y lo recostó sobre su pecho —Era un debilucho en ese sentido, aunque tu papá es muy fuerte en otras cosas.

—¡Sí! Sus músculos son gigantes— dijo Chaeyoung exagerando un poco.

—Las pocas veces que él cambió un pañal fue debido a que yo no estaba en casa cuando te hacías popis— comentó Moon nostálgico al recordar años atrás cuando su pequeña Chaeyoung aún era una bebé que lo necesitaba 24/7 —Una vez corriste por toda la casa sin pañal porque estabas escapando de tu papá Johnny, él te seguía y al final cuando logro agarrarte... se llenaron de talco por completo porque eras una traviesa— dijo entre risas el pelinegro, comenzando a caminar a la cocina.

—¿En serio?— Chaeyoung no podía creer lo que le decía su papi, ¿En verdad era más traviesa que ahora?; Taeil no tardó en asentir —Mientes, papi. Es imposible que yo haya echo eso— habló segura siguiéndole los pasos al mayor.

—Pues tu papá Johnny tiene pruebas, cuando llegue le pides que te muestre las fotos— dijo divertido y a la menor sólo le quedó esperar a la llegada de su papá para demostrar que le estaba mintiendo.

[...]

—¡Ya llegué!— en cuanto Young Ho cruzó la puerta de su hogar, una Chaeyoung emocionada corrió hacia él gritando.

—¡Papá!— la pequeña castaña se lanzó a los brazos de su papá que la esperaban abiertos; Seo la cargó, dándole muchos besitos por su rostro.

Su bebé Jinho salió de la cocina, yendo a pasos lentos y torpes a donde estaba su papá gigante; John se acercó más a él para no hacerle más difícil y largo el camino a su hijito.

Con un brazo cargó a su pequeña y con el otro a su pequeño, dándole la misma bienvenida que a Chaeyoung, llenando su rostro diminuto de besos sonoros. Taeil no tardó en aparecer con un delantal de cocina, se acercó a su esposo y se puso de puntillas para darle un besito de bienvenida.

—Ya nisiquiera me dejan ser el primero en darte la bienvenida— dijo con un puchero el bajito, ganándose un piquito en sus labios abultados.

Young Ho iba a contestar lo dicho por su hyung pero Chaeyoung se le adelantó y habló —Papá, ¿Es cierto que tú y yo nos llenamos de talco cuando era una bebé?

Seo soltó una escandalosa risa al recordar ese momento, había olvidado lo mucho que se divirtió con su hija aquel día.

—Sí, ChaeChae.

—¿Tienes fotos? Papi dijo que tenías, pero yo no le creo que haya sido capaz de hacer eso— el más alto asintió con una sonrisa burlona. Fue al sofá y se tiró a él aún con sus niños en brazos, a lado se sentó su tierna pareja.

Johnny sacó su teléfono de su bolsillo trasero y buscó entre sus álbumes de fotos aquellas evidencias de ese día; cuando las encontró, se las mostró a su pequeña hija que miraba asombrada la pantalla.

—¿Ahora ves que no te mentí, Chae? De bebé eras más traviesa que ahora— dijo burlón el pelinegro.

—Ahora te creo, papi— pausó un momento y siguió —¡De ahora en adelante le haré honor a mi yo bebé! ¡Volveré a ser traviesa!— exclamó con una sonrisa y voz determinada.

—Chae... no es necesario hacer eso— dijo nervioso el estadounidense, Taeil estaba igual que él o peor; no podrían calmar a una Chaeyoung traviesa y cuidar al mismo tiempo a su bebé.

—¡Sí lo es!

Bueno, parecía que si tendrían que calmar a su hija y asegurarse que nadie saliera lastimado, mientras a la vez estaban al pendiente de su hijo más pequeño; él podría ser el principal objetivo de su ahora traviesa Chaeyoung.

Ambos padres soltaron un largo suspiro y se vieron a los ojos algo preocupados por lo que podría pasar ahora... y eso que los verdaderos años agotadores aún no daban comienzo como se debía.

꒰🐯🐰꒱

Hola ʕっ^ᴥ^ʔっ♡

Lamento la tardanza, olvidé actualizar y no tuve internet por tres días unu en recompensa por mi ausencia, les daré doble capítulo.

Espero les haya gustado uwu💖

¡Gracias por leer!🐰❤