001. ¿Pizza?

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Desde que Hyunjin llegó a mi departamento cuando apenas salió el sol, no ha dejado de llorar como si fuera un niño pequeño al que le han quitado su dulce. Y si sigue así, lo más probable es que me va a tocar sacar sus moquillos y babas del sofá que me acaba de regalar mi madre.

ㅡF-Félix, ¿e-es que rea-alment-t-te yo soy-y f-feo?

Puse los ojos en blanco por milésima ocasión en la noche.

Hyunjin tocó a mi puerta desesperado porque hace un par de horas su novia Jeon Somi le pidió un tiempo entre ambos.

Claramente me imaginé a mi amigo al borde del colapso, mientras embarraba sus mocos en ella (en lugar de en mi sofá) y le suplicaba porque no le deje.

Y por lo que me cuenta, mi idea no está muy alejada de la realidad.

Le expliqué que yo realmente compadezco a la pobre Somi, y no solo porque sea mi amiga

ㅡHermano, ¿te das cuenta de que la tratas como mierda frente a todos?

ㅡE-eso n-no es v-verd-dad, y-y-yo la a-amo ㅡsus hipidos se entre cruzaban con sus pretextos, así que básicamente lo ignoré para seguir con mi sermón.

ㅡ¿Recuerdas cuando le pediste que fuera tu novia? Eras realmente diferente a como eres ahora; te preocupabas por ella y por tus estudios, y ahora solo te preocupas por ser popular y verte bien. ¡Incluso te le declaraste en una feria de ciencias súper ñoña!

ㅡP-pero ㅡsuspiró y pudo articular con calmaㅡ, ¿a qué te refieres? Yo he tratado de cambiar para gustarle, para estar a su nivel, y ella... ㅡy se soltó a llorar de nuevo. Excelente.

ㅡEse es el punto... ㅡiba a continuar regañándolo cuando el timbre sonó.ㅡ Seguro que es la pizza que ordenamos para desayunar, en lo que la recojo ㅡlo apunté con mi índiceㅡ reflexiona sobre tus actos, Hwang Hyunjin.

Abrí la puerta pensando en la situación de mi mejor amigo, pero al mirar al frente puedo asegurar que me olvidé de todo a mí alrededor.

No estaba seguro de que fuera real. Podría jurar que cada centímetro cuadrado del rostro de aquel individuo había sido esculpido por las manos de Dios mismo.

Caracoles.

ㅡ¿Pizza? ㅡarticuló con su voz profunda. Eso solo me dejó más paralizado.

Mi mente lo analizó automáticamente; usaba unos jeans negros con algunos cortes que le hacían lucir muy rudo. Portaba además la chaqueta verde con mangas blancas de Pizza's Club, pero debajo de esta usaba un polo negro con cuello redondo. No llevaba la característica gorra amarilla del lugar; en vez de esta, su cabeza era cubierta por una gorra negra con un par de arillos plateados. ¿Por qué vestía todo de negro? ¿Acaso es uno de esos chicos dark que odian a todos?

Él se hallaba ahí; mirándome fijamente, mientras en su mano derecha sostenía la pizza que hace unas decenas de minutos encargué, y la mano izquierda la mantenía extendida hacia mí. ¿Acaso quiere que la tome para que nos vayamos juntos a cabalgar sobre el arcoíris en una piñata con forma de llama morada hasta el fin del mundo?

ㅡSi tienes efectivo para pagarla, ¿verdad?

Oh, de acuerdo. Entonces la mano era para que le pagara la pizza. Ya decía yo.

ㅡAunque, si quieres; aceptamos tarjetas, solo tengo que bajar por la terminal. Quizá tarde un poco, por los tres pisos que hay que subir...

Enmudecido, busqué mi billetera entre mis bolsillos e inconscientemente saqué el dinero necesario junto a una considerable propina. Eso probablemente me costaría irme caminando al colegio mañana, pero en este instante cualquier centavo del mundo valía por ver aquella obra de arte a unos pasos míos.

Pizza and Darkness || changlix, ongniel, hyunmiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora