Una noche ; luzurex

02

Tienes que salir

Tener que superar una ruptura amorosa siempre ha sido un trabajo muy difícil cuando verdaderamente quisiste a esa persona, incluso hay veces que pareciera ser una tarea prácticamente imposible de realizar, parece ser un pozo sin fondo en el que te hundes cada vez que intentas escapar.

Alexby lo sabía mejor que nadie.

Sin embargo había algo que el moreno no lograba entender del todo y eso era porque su mejor amigo se había deprimido tanto por su "ruptura amorosa" con Lana, si es que se le podía llamar de esa forma a lo que sea que le había ocurrido a Borja.

Porque hay que ser realistas, Lana y él no habían tenido ningún tipo de relación amorosa, solamente habían tenido una amistad. Nunca llegaron a algo romántico, cuando mucho habían tenido pequeños bobeitos entre sí sin embargo, eso no era algo único de ellos pues Lana siempre jugaba así con sus amigos.

Por eso Alexby no entendía cómo podía estar tan dolido por algo que prácticamente nunca existió.

El jura haber intentado comprender a su amigo porque vamos, todos necesitamos un tiempo para asimilar que quien te gusta no te corresponde los sentimientos. Pero su compresión se fue cuando el castaño se encerró en su habitación durante días y dejó de responderle los mensajes, prácticamente había desaparecido.

Así que confundido el menor fue en busca de Borja a su hogar solamente para encontrarlo en su cama envuelto entre sus sábanas como un burrito.

– Luzu chingadamadre contigo, ¡Sal de ahí que ya apestas! – refunfuñó enojado el moreno mientras daba pequeños golpecitos en las sábanas donde se encontraba su amigo.

Claro que Borja hizo caso omiso a la petición de su amigo, solamente se enredó aún más entre las sábanas mientras dejaba escapar pequeños bufidos casi inaudibles.

– Prefiero quedarme acá por el resto de mi vida a salir y ver cómo ella está feliz con alguien más – soltó algo dolido el castaño. Por un momento el moreno sintió algo de compasión por su amigo, solo por un segundo.

– Eso sonó muy emo de tu parte – se burló el menor. Claro, la poca compasión que sintió por su amigo se vio opacada por su "sentido del humor".

Con una sonrisa volteó a ver a su amigo para esperar que este también se riera junto a él sin embargo, no fue hasta que no recibió ninguna respuesta de Borja cuando supo que algo estaba verdaderamente mal con su amigo.

Normalmente Luzu se reiría de sus chistes por muy malos que fueran o aún si se reía de las cosas que les pasaban a ambos, era una forma de ver el lado bueno de las cosas, pero ahora no podía hacerlo: no podía reírse de lo que le pasaba porque en serio dolía.

– Oye ¿qué pasa? – murmuró preocupado el moreno acercándose aún más a la bola de tela que era Borja.

Pudo hacer un lado algunas de las sábanas que estaban enrolladas en el castaño solo para ver su rostro y notar que en verdad estaba mal: los ojos rojos, las ojeras, el cansancio en su mirada y la mueca de su rostro lo dejaba muy en claro.

– Hey hey, a ver, mírame ¿si? – dijo serio el menor mientras que con sus manos tomaban sus mejillas para obligarlo a prestarle atención – se que te duele pero no puedes quedarte todo el día acá y deprimirte aún más, tienes que salir y superar esto ¿okay? No puedes quedarte estancado por una persona.

La seriedad del momento se podía sentir en el aire, Alexby no hablaba con ironía como solía hacerlo ahora estaba serio y hasta preocupado con las cejas algo fruncidas. Para Luzu verlo así era importante porque aquella seriedad demostraba que su amigo en verdad se preocupaba por él y lo que le pasaba, parecía que-

– Además, culos más que estrellas honey – habló con una sonrisa cortando por completo aquel momento.

Retiraba lo antes mencionado, Alexby no podía tomarse nada con seriedad ¡Que alguien le devolviera los cinco segundos que quiso a Alex!

– ¡Alexby! Tómate esto en serio por favor – se quejó el mayor entre pequeñas risitas mientras salía de la bola de sábanas para recriminarle a su amigo de no tomarse nada en serio.

– Ya sé ya sé, pero ¡hey! Te hice reír – respondió sonriente mientras se tiraba junto a su amigo al colchón.

Después de unos segundos las risas cesaron dejando un pequeño silencio entre ambos chicos que se encontraban acostados sobre el colchón con una sonrisa pintada sobre sus labios. El silencio no era incómodo, todo lo contrario era cómodo y reconfortante para ambos después de no haber hablado en días.

– Es extraño – el primero en romper el silencio fue Borja recibiendo como respuesta la atenta mirada de su contrario – duele saber que no fuí igual de importante para ella como ella lo fue para mí pero estoy feliz, se miraba feliz cuando me habló de esa chica, Kris no sé que, y eso me alegra aunque me avergüenzo de ser tan tonto e iluso. Es raro.

Alex se tomó unos par de segundos para pensar qué decir, su fuerte nunca fue las palabras así que no sabía que debía decir ahora.

– Tranquilo es normal, creo. Ya sabes, cada persona se toma las cosas de manera diferente ¿no? – joder si que era muy malo tratando de animar a los demás – así que está bien que te sientas así.

– Si bueno, eso supongo –

De nuevo un silencio inundó el lugar, ahora era un silencio un poco incómodo para Alex, aunque seguía siendo reconfortante para Borja después de haber dicho lo que sentía al respecto.

– En vez de estar acá llorando por ella deberías de estar allá afuera despejando tu mente mientras te diviertes –

El no era bueno para ayudar a los demás pero al menos intentaba animar a su mejor amigo, aunque fuera a su manera pero al menos lo intentaba.

Y cuando Borja estaba por responder le interrumpió rápidamente – No te estoy preguntando, te estoy diciendo lo que debes de hacer. Así que ahora mueve tu trasero de tu pobre cama que te tuvo que soportar todos estos días –

– ¡Ay, pero-! –

– Silencio, creo que hay una pequeña fiesta acá cerca en la casa de un amigo podemos ir a distraernos un poco – propuso sonriente el menor – o podemos ir a otra parte pero de qué vas a salir, vas a salir.

– ¿Un amigo? No sabía que tenías más amigos aparte de mi – dijo burlón el castaño viendo el rostro lleno de indignación del contrario.

– Soy muy popular ¿sabes? Tienes suerte de tenerme como amigo –

– Clarooo – se burló una vez más del menor.

Y una nueva, pequeña, pelea entre ambos amigos comenzó, no era una pelea de verdad si no eran pequeñas peleas amistosas que siempre tenían. Era su forma de divertirse, una rara pero linda forma de divertirse.

Wattpad no me quites los guiones largos o lloro, primer aviso.