CAPITULO 5

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Después de aquella agradable salida, Stephen decidió pasar la noche en el penthouse del castaño ya que este le había insistido, como negarse después ver que este le hiciera su famosa cara de perrito. Al llegar al Penthouse todo parecía estar en total tranquilidad. Ambos hombre pidieron comida china y mientras esperaban que está llegará decidieron buscar una película para después hacer su maratón. Pocos minutos después la comida llegó y Stephen y Tony gozaron su velada, cuando ambos notaron que ya era muy tarde optaron por ir a dormir, Stephen se dirigió a la habitación de huéspedes y Tony se fue a la suya. Al llegar se puso el pijama y se dispuso a dormir. De la nada Tony abrió sus ojos de golpe e inmediatamente noto que no podía moverse, trató de gritar, pero fue en vano, nada funcionaba, trato de calmarse y cerró sus ojos y respiro profundo cuando de repente sintió como si alguien lo estuviera observando, abrió sus ojos y recorrió su habitación con la mirada lo más que pudo hasta que sus ojos se dirigieron a un rincón oscuro, al principio no vio nada hasta que un destello apareció, unos ojos rojos brillantes se hicieron notar entre la oscuridad haciendo entrar en pánico al castaño y que tratara de gritar o moverse.

Tony observó como aquella sombra se movían y comenzaba a caminar hacia el, trato de gritar, pero nada salía de sus labios, de pronto sintió como la cama se hundía por su alrededor e inmediatamente cerró los ojos tan fuerte como pudo y giró su cabeza un poco, luego sintió como una mano con largas uñas tomaba su mentón y movía su cabeza un poco, Tony hizo un gran esfuerzo por mantener sus ojos cerrados, pero los abrió de golpe cuando sintió una extraña sensación en sus labios, como si alguien lo estuviera besando, al principio el beso fue lento, pero poco a poco se hacía más intenso a tal punto que puso sentir como una lengua se deslizaba por sus labios y entrar a su cavidad bucal y comenzar a moverse de una manera muy deliciosa acuerdo gemir al castaño, un gruñido de escuchó y Tony reaccionó y por mirar vez miro en dónde se suponía que había una persona, pero solo una sombra y está abrió sus ojos dejando ver aquel color escarlata, la sombra se separó de los labios de Tony para después acercarse a su oído y lamer su lóbulo.

———Tony——— gimió aquella sombra de una forma seductora, pero a la escalofriante.

Para después volver a sentir la sensación de ser besado con mucha pasión y desesperación, Tony gimió por la nueva intromisión de la lengua a su boca, estuvo gimiendo sin control alguno, ya que por alguna razón la salida de su atacante era muy dulce, muy adictiva y estimulante, sin que Tony lo sintiera sus pantalones estaban  hasta abajo de sus rodillas hasta que sintió como su erecto miembro se movía con libertad y como una mano lo envolvía masajeando lo, Tony volvió a gemir muy sonoramente, si no hubiera sido porque su boca estuviera ocupada con aquella deliciosa lengua hubiera grita de placer y otra vez un gruñido se escuchó. A pesar de las manos tuviera las uñas largas estás no evitaban que el castaño sintiera la mejor sensación del mundo, Tony estaba completamente nublado por la lujuria que sentía en esos momentos, que si no fuera porque no pudiera hablar le hubiera pedido a quien sea que fuese que lo tomará de una buena vez, y el simple hecho de imaginarse ser tomado lo hizo llegar al organismo, su atacante se separó de los labios del castaño y este comenzó a gemir ruidosamente ya que todavía sentía los espasmos de su recién orgasmo, Tony miró a la sombra y sus ojos cafés se conectaron con los ojos rojos por un momento, este se inclinó en el castaño.

———Dulces sueños——— le dijo una voz ronca y malvada.

Cuando Tony menos lo espero la sombra desapareció y este ya se podía mover con normalidad, miró a su alrededor y todo parecía intacto, excepción por su abdomen, que era un completo desastre por su corrida. Con algo de temor se levantó de la cama y se dirigió al baño para poder asearse y tomar una ducha, al finalizar se puso un nuevo pijama, se acostó en su cama y comenzó a cuestionarse si lo que había pasado había sido solo un sueño, mientras más pensaba en eso más se convencía a sí mismo que se había tratado de un estúpido sueño húmedo, y con esa idea en la mente se volvió a quedar dormido…

Sueños HúmedosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora