Enamorado parte 2

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Para todos aquellos que estaban allí presentes, el motivo de encuentro eran las palabras de los dioses las cuales siempre eran escuchadas como guía para sus vidas. Pero para él era solo eso, palabras... Y nunca esas palabras le hicieron sentir lo que con su voz, Julieta, hizo esa noche de verano.

Su corazón latía más que el de ella, pensaba en el regalo y en el valor que tenían que juntar para entregárselo. Cuando la vio venir se sintió pequeño, o ella muy grande. Su mirada... No iba a ningún lado o muy lejos y cuando ya estaba en posición para entregar su canto, se olvidó de todo.

Muchos años después fue llamado este canto como "Lo que da Comienzo"

Uno ha de entender

Que nacemos del mismo lugar

Solo vos sabrás que hacer con lo que te dan.

No olvido que de la tierra yo soy,

Como tú, como vos, como todo a mí alrededor.

Ella nos creó y a cada uno algo nos dio

Nada más triste que perderse en el porque

Solo tú podrás entender.

En círculos él siempre de movió

Sin ver y sin saber su lugar nunca encontró.

Siento que el fondo conocerás

Y desde allí como el sol brillaras.

¡Escuchadme!, el tiempo es una rueda que viene y se va

Por eso muere día a día

Y vuelve a rodar.

Desconozco si mi canto esta noche entenderán

Pero sé que algo mágico sucederá

¿Lo podrán ver ustedes más allá de su soledad?

Juan quedo inmóvil y solo cuando ella se da la vuelta entiende que había terminado. Tenían que elegir entre quedarse pensando en sus palabras o ir a su encuentro para concretar su objetivo. Al final, hizo las dos cosas al mismo tiempo, mientras la buscaba por detrás del escenario, sus palabras resonaban en su interior... ¿Qué estaba haciendo con el tiempo que se le dio? Apretó fuerte su regalo mientras la buscaba pero al final nunca apareció.

Resignado decidió ir con su familia que sabía que se encontraban por allí. Habrá sido por su cara que ninguno le pregunto que había pasado. Se sentó un poco alejado en la tierra y con sus brazos abrazo sus rodillas tristemente deseando que termine la noche. Cuando mira a su costado vio al ciervo de madera que se había salido de su envoltura. Nunca se había fijado en el de otra forma que no fuera solo un regalo para Julieta, pero en ese momento algo cambió, y vio un ciervo de madera hermoso, de él, hecho por sus propias manos con la ayuda de su padre.

Lo alzó y lo puso frente a sus ojos.

- Quieres una familia ¿verdad?- Dijo susurrando, y desde esa noche nunca más se preguntó que hacía con su tiempo.

A lo lejos, un hombre sentía la canción. No la escuchaba, porque salía de adentro suyo y con ella ,volvía a nacer. 

Vida y MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora