Capítulo 6

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Al día siguiente...

Blanca: Buenos días mi reina, llegaste muy tarde anoche?

Alma: No mucho (sirviendose café).

Blanca: Estas bien?

Alma: Si porque?

Blanca: Te veo rara, seria..

Alma: No nada.

Cristina: Tu papá de nuevo tratando de buscarte marido, cierto?

Alma: Eso siempre Cristina pero pude salir de eso.

Daniel: El coche está listo señora.

Amanda: Dani buenos dias, mira quieres unas galletas (le dio una bolsa) las hice yo para ti.

Daniel: Gracias (sonrió).

Cristina: A trabajar Amanda.

Amanda: Nos vemos luego galán (le hizo un guiño).

Alma: Ya me voy (se levantó de la silla).

Blanca: No comiste nada.

Alma: Se me hace tarde, ya vámonos Daniel.

Blanca: Ay está niña.

Llegó la tarde y Alma y Daniel venían en el coche sin decirse una sola palabra, de repente Alma noto que cambio de rumbo...

Alma: Que haces? A donde vamos?

Daniel no dijo nada...

Alma: Daniel!!

Daniel paró el coche y la bajó...

Alma: Que haces? Eres un bruto.

Daniel: Si lo soy (la acorraló contra el auto) .

Alma: Que haces?

Daniel: Ya basta de juegos Alma.

Alma: No te entiendo y te recuerdo que tu ayer te pusiste celoso y no tienes porque estarlo.

Daniel: Si pero tu también me celas y si no sientes nada porque te preocupa que Amanda me regale galletas?

Alma: Porque...por...yo no te celé.

Daniel: A no?

Alma: Sueltame!!

Daniel: No te voy a soltar (se fue acercando a sus labios).

Alma: No Daniel...

Daniel la beso suavemente, rozando sus labios y mordiendo despacio...

Alma: Daniel no, por favor, no puedo.

Daniel: Porque? Porque soy un simple empleado para ti o por ese hombre que te hizo daño? Que te dejo abandonada, no tiene porque pasar lo mismo Alma, date una oportunidad.

Alma: Como sabes? Quien te lo dijo? Ya se mi mamá, o Cristina.

Daniel: No te voy a decir, y ya basta de esto de la amistad, se que lo prometí pero no puedo Alma, te veo y me matas de amor, siento que necesito besar esos labios (acariciandole la mejilla) sentir tu olor (rozandole los labios con los suyos).

Daniel ya no aguanto y la volvió a besar pero esta vez Alma le correspondió ella ya no podía resistirse, ya no podía negarse así misma que lo amaba con locura...
El beso se volvió intenso y sus respiraciones aceleradas, sus lenguas jugaban sin parar y Daniel bajo su mano acariciandole la cintura, se separaron por falta de aire juntando sus frentes...

Daniel: Te prometo que yo jamas te dejaré mi amor, date una oportunidad .

Alma: Te amo (con los ojos cerrados).

Amarte AsiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora