Eijirou Kirishima y el Cáliz de Fuego

Capítulo 6

El momento de la primera prueba se acercaba y nadie sabía en qué podía consistir. Kirishima practicaba pero muchos hechizos no le salían. Bakugo le ayudaba como podía, pero sin saber de qué iría la prueba no podían hacer mucho por prepararse.

Una tarde mientras repasaban vieron a Sero y Kaminari correr hacia ellos. El rubio llevaba como tres libros súper gordos y nos tiró a los brazos de Katsuki.

-¡Tenemos algo de la primera prueba! Estaba leyendo un libro de Tsuki en la biblioteca pero no podía concentrarme porque Shinsou estaba allí rodeado de chicas, así que me salí y en un pasillo escuché a Jirou decirle a una compañera suya que un chico de Slytherin le dijo a Tetsu que había escuchado a dos Hufflepuff hablar de que algo no estaba bien en el bosque.

-¿Qué?-Ninguno de los dos se enteró de lo que el chico estaba diciendo, así que Hanta se lo tradujo.

-Al parecer es algo vivo, lo tienen en el bosque prohibido. Hemos ido a ver a Taishiro y hemos conseguido convencerle para que te lo enseñe Kirishima. Así que vamos, tenemos que darnos prisa.

-¡Eso, eso!

Kirishima miró agradecido a sus dos amigos y se levantó seguido de Bakugo, yendo rápidamente a la cabaña donde vivía el guardabosques. Allí los esperaba Taishiro, que los saludó al verlos llegar.

-Vamos chicos, os va a sorprender lo que tenemos planeado.

A ninguno le gustó la emoción con la que hablaba Taishiro, mucho menos cuando se adentraron en el bosque y vieron pasar a Fuyumi de lejos con un traje especial al parecer a prueba de fuego. Se escuchaban rugidos y algunas llamas se podían ver desde esa distancia.

Los cuatro chicos se ocultaron tras unos matorrales y vieron jaulas enormes en las que había dragones. A Kirishima casi se le sale el alma en ese momento, ¿así es como querían protegerles? Esos dragones iban a matarle seguro.

-Joder... Creo que sí que quieren mataros.

Estuvieron allí unos minutos más antes de tener que irse a clase. Kirishima iba pensando en cómo podía enfrentarse a ese animal descomunal mientras llegaban a DCAO, pero no se le ocurría absolutamente nada.

-Hoy seguiremos con las maldiciones imperdonables. La más fácil de realizar es la maldición imperius, así que trabajaremos con ella. No os pediré que torturéis ni matéis nada... Por ahora. ¿Quiénes quieren ser los primeros?

Nadie levantó la mano, así que Kind sacó a dos "voluntarios" que resultaron ser Sero y Monoma. El rubio estaba convencido de que iba a ganar y en cuanto el profesor dio la señal fue a decir el hechizo, pero su contrincante fue más rápido.

-¡Imperio!-Sero apuntó a Neito y éste quedó totalmente quieto.

-Muy bien... No está nada mal, el niñato debe ser insufrible como para que te salga a la primera el conjuro. Los siguientes.

Cuando llegó el turno de Kirishima le tocó contra Uraraka. No supo por qué pero al igual que Sero logró hacerlo a la primera, ganando el duelo. Pero él no odiaba a Ochako; le parecía una chica muy simpática y agradable, y no entendía por qué pudo controlarla sin esfuerzo.

Siguieron de esa forma, combatiendo unos con otros, pero no muchas personas lograron conjurar la maldición. Kirishima contó a los que pudieron hacerlo. Estaba Sero, Bakugo lo consiguió contra Haneyama, Kaminari, Yaoyorozu y TetsuTetsu.

Pronto tocó el timbre y todos salieron del aula. Eijirou seguía pensando en cómo podía derrotar al dragón cuando sintió que alguien le llamaba.

-Oye, Kirishima.-La voz de Kind le hizo detenerse, y vio como el hombre se acercaba a él con su expresión seria de siempre.-Quiero hablar contigo.