—Ve más despacio... —pidió el pelinegro —¡Jaehyun!
—Lo siento amor, ¿has dicho algo?— el nombrado rió haciéndose el desentendido. Había escuchado a la perfección, pero no estaba nada mal hacer enojar un poco a su novio.
Recibió por parte de Doyoung una grosería acompañada de un fuerte bufido y algunos gemidos saliendo de su boca de forma continúa. El ritmo de sus embestidas eran profundas, duras y bastante rápidas a comparación de lo que estaban acostumbrados pero precisas a la hora de tocar su próstata.
Jungwoo miraba la escena con recelo, su miembro pedía un mínimo de atención: dolía. Su mirada se perdía entre la expresión del pelinegro quien se aferraba a las sábanas como si su orgullo dependiera de ello y el completo disfrute de su compañero de piso que sostenía la cadera de Doyoung de una manera posesiva.
No quería desviar sus ojos de aquel acto visualmente impactante, húmedo y exquisito. Jaehyun se enterraba en aquella intimidad bruscamente provocando estímulos electrizantes en el mayor que Jungwoo ansiaba con recibir de lo mismo.
Alta era la tentación para desistir.
—Woo, ¿has escuchado lo que dijo el conejito? —habló Jaehyun.
Él sabía que no podía dejar afuera a Jungwoo de aquel juego de a tres, le preguntó con audacia esperando que le respondiera de la misma manera.
—Sí —atento y rápido para contestar el pelirrojo sonrió— dijo que lo folles más duro porque se está durmiendo. ¿No es así Dodo?
La estrategia fue perfectamente lanzada: el mayor recibiría de parte de Jaehyun la follada probablemente de su vida, dejándolo sin caminar al día siguiente y se acordaría sí de lo que había acontecido; su por qué, pero también maldeciría tanto el nombre de Jungwoo que iba a ser divertido contemplarlo.
El calor de la habitación era sofocante, el pelinegro sentía correr por su espalda y piernas gotas de sudor al igual que su frente que la había apoyado contra las suaves sábanas ocultando un poco su rostro de la mirada atenta del otro Kim. No era vergüenza o algo por el estilo, solo que no quería darle aquel placer de observarlo mientras disfrutaba de aquella penetrada bestial.
—¡No seas tan brusco Jung!—. Doyoung volvió a quejarse, pero fue ignorado.
—Jaehyunnie —llamó el pelirrojo cansado de la abstinencia. Si no podía tocarse a sí mismo, que alguien lo haga por él, pero rápido porque andaba necesitado. Muy necesitado.
—Jaehyun está ocupado ¿no lo ves acaso? —dijo el mayor con su repentino ataque de celos. Otro más que quería toda la atención para él solo. Estos dos no sabían compartir, nunca aprendieron a hacerlo.
—Cállate no te estaba hablando a ti —chistó para luego decir:— deberías recoger tu saliva del colchón, baboso.
Jungwoo recibió un gruñido como respuesta, seguramente se la cobraría más tarde, Jaehyun en cambio se rió y miró al pelirrojo acercarse con la intención de besarlo, se veía extremadamente hermoso y adorable.
—¿Qué pasa cachorrito? ¿quieres jugar también? —preguntó aún sabiendo la respuesta, con su mano izquierda tomó su miembro: estaba húmedo y preparado para un orgasmo si seguía tocándolo más de la cuenta.
—He sido un buen niño, déjame estar adentro de nuestro Hyung.
—No creo que aguantes mucho —se burló por la situación de su entrepierna.
—Oh... Jaehyunnie —divertido— tú no me conoces, solo déjame y verás —negó con la cabeza sonriendo.
Claro que no lo hacía, no conocía a Jungwoo más allá de un terreno amistoso o de trabajo pero con lo poco que había visto ese rato Jaehyun había quedado fascinado. Se separó del cuerpo del mayor provocando que éste suspirara aliviado y se alejó unos centímetros de ellos dos; no iba a perderse la oportunidad de deleitar tremenda obra de arte.
—Date vuelta Dodo, te mostraré algo.
Sin rechistar obedeció el pelinegro. Sus piernas que temblaban fueron abiertas violentamente por las manos de Jungwoo quien se acomodó entre ellas y alineando su erección entró en Doyoung de una forma suave. Fue extraño, se sentía y se veía extraño; nunca había sido el activo. Pero se sentía tan malditamente bien que era verdad que probable descargara todo su semen con el primer movimiento; pero si eso acontecía la diversión se acababa y eso no quería el pelirrojo. Él quería seguir toda la noche y todos los días que siguen porque: si tuviera la oportunidad... lo volvería a hacer una y mil veces más con la pareja.
—Vaya —se sorprendió— se siente bien estrecho. No lo esperaba de una perrita como tú.
—¿Qué dices Woo? —ofendido— Mi trasero solo está disponible para ese tonto —miró hacia donde estaba Jaehyun.
—Qué aburrido Dodo, déjame enseñarte cómo lo hace un hombre de verdad.
Jungwoo dejó caer su torso con la intención de acercarse al cuello del mayor y besarlo en aquella zona tan sensible. Mientras éste se movía, Doyoung aprovechó para enredar sus dedos en aquel cabello rojizo haciendo más íntimo y más pasional el sexo que compartían.
Cualquiera que los observara por menos de diez segundos pensaría que entre ellos dos hay algo más que una relación de amistad. ¿Debería sentirse celoso Jaehyun? Jungwoo estaba tratando a su conejo como a éste le gustaba que lo traten: con amor pero en forma dominante.
—Jaehyun, amor... ¿te gusta lo que ves? —gimió el pelinegro entregándose completamente a Jungwoo.
—Es demasiado para mi. Soñaré con esta imagen lo que resta del año.
No lo pudo evitar, Jaehyun se masturbó con intensidad observando, ¿cómo podía denominarlo aquello? ¿Dos ángeles? ¿dos demonios? ¿un ángel y un demonio? si fuera lo que fuera era extremadamente caliente. Extremadamente irreal a lo que alguna vez imaginó incluso.
—Vamos Woo, córrete adentro mío.
—Oh Dodo... quieres que te llene de mi leche ¿verdad? ¿por qué no mejor acabamos dentro de Jaehyunnie? Los dos juntos.

ESTÁS LEYENDO
Solo Por Esta Vez - JaeDoWoo
Fiksi PenggemarJaehyun y Doyoung son pareja; se aman, se cuidan, se miman pero... ¡rayos! Jaehyun está caliente con Jungwoo. ¿Doyoung aceptará compartir a su novio aunque sea por única vez? ~Jaehyun×Doyoung×Jungwoo ~Trío ~+18 ~Fluff, Lenguaje vulgar, Lemon. ~NCT...