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Misión: salvar a la profesora Benson
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—¡Bea!-suspira con pesadez, deteniendo mis pasos- ¿no me escuchaste? Llevó gritando tu nombre hace más de cinco minutos.

Jack luce agitado, antes de que pueda hablar, me estira del brazo caminando con prisa.

—Tal vez te estaba ignorando, intentando alejarme de problemas de lobo en los que TÚ me metiste.- hablo y cierro los ojos con fuerza al distinguir el lugar- O tal vez no escuche, cree lo que quieras.

—¿Es por qué te deje sola con los caballeros?- posa sus ojos culpables en mi- Lo siento, estaba demasiado enojado.

—Pudieron haberme matado.- hablo entre dientes, ajustando el agarre en mi bolso- Y si eso hubiera pasado, en mi último aliento te hubiera maldecido, atando mi fantasma a ti para molestarte por el resto de tu vida.

—¿Pue..puedes hacer eso?- balbucea algo asustado, sonrío con maldad

—Puedo hacer muchas cosas, Jackie.- murmuro viendo la hogareña casa-¿Ahora qué?

—Alguien está haciendo magia.- suspira y me suelta

—No, ¿aquí?- suelto con gracia- ¿En la universidad que se construyó para ocultar una academia de magia? Que raro.

— Esto es serio.-reprende y vira sus ojos- Intentaré convencerlos de no matarlos, creo que son Gabrielle y Brandon.

—Carajo, ya hablé con Gabrielle.- maldigo- Dijo que lo dejaría de hacer.

—Te mintió.- aprieta sus labios- Entrare, intentaré convencerlos y si no funciona, entras.

—¿Soy algún tipo de salvoconducto?- levanto mis cejas

—Les agradas más que yo.- ve la puerta y suspira- Deséame suerte.

El castaño entra y decido sentarme en las escaleras de la entrada, sostengo mi móvil y entro en la primera red social que encuentro. Pasan los minutos y escucho los cuchicheos de los "caballeros de san Cristobal", maldigo a mi amigo y me levanto, sacudiendo mi falda.

—Déjenme hablar con ellos.- escucho y entro- Si no funciona, me matan.

—Wow, no.- exclamo- Tenemos un trato, no matan a nadie inocente y no hago que miles de magos vengan a matarlos.

—Éramos muchos y parió la abuela.- bufa Lilith- Ellos no son inocentes, ninguno de ustedes.

—¿A qué viene tanto odio?- cuestiono y cruzo mis brazos-Nos conocemos, ¿cierto?

—No.- Pasa por mi lado, chocando nuestros hombros con fuerza- Andando.

—Auch.- murmuro soñando la parte afectada- Creo que necesita sexo.

—No es personal.- Hamish sonríe- ¿Cuál es el plan?

Morton explica con rapidez mientras caminamos hacia el campus, los lobos se alejan de nosotros al divisar a los dos acólitos. Ellos aceleran su caminata.

—¡Hey, Gabrielle!- exclamo y ella para sonriendo con inocencia- Pensé que había quedado claro lo de hacer hechizos sin consentimiento.

—¡Jack Morton, nos acusaste!- se hace la ofendida- Lo siento tanto, Bea, pero en serio era necesario.

—Entiendo, yo también fue como ustedes, fue divertido.- exclamo intentando lucir empatica- Pero tarde o temprano la magia vuelve por su pago, nada es gratis.

—Si, chicos, es malo.

—Solo díganme que hicieron.- codeo a Jack, para que me dejara el diálogo a mi- Y prometan no hacerlo mas o tendré que hablarlo con mi madre.

The daughter of the order || Randall Carpio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora