O3

2.2K 236 23
                                    


..............Golem.............

—Tienes que creerme.- El muchacho me quita mi bolso y abre la puerta- Y ayudarme.

Suspire para contener mis ganas de golpearlo.

—Jack, que haya dicho que me agrades no quiere decir que te quiero tener todo el día pegado a mi.- hablo dejándome caer en el asiento- Y mucho menos que me quiero juntar con Raquel.

El moreno levanta sus ojos de su libreta y sonríe.

—Vas a creer que estoy loco.- dice empujándome con su cadera para tomar lugar junto a mi.

—Ya lo creo.- responde burlón- Hola, nena.

—Raquel.- sonrío y después viro mis ojos

—Es Randall.- deja su bolígrafo- Y lo sabes.

—Si tú no usas mi nombre, yo no uso el tuyo.- levanto mis hombros

—Creo que sé que está matando a todos.- interrumpe nuestra conversación

—¿No quieres decir quien?- indaga levantando sus cejas

—No creo que deberíamos involucrarlo.- murmuro y jalo sin fuerza su cabello- Ya es demasiado con involucrarme a mi.

—Ahora quiero saber.- se inclina sobre la mesa- Vamos, suéltenlo.

—Un hombre lobo.

—Una criatura mitológica.- el sarcasmo brota de su boca, él usaba bastante este.

—Los hombres lobo no existen.- exclamo y junto mis manos- Deberíamos irnos, Jack.

—Si, según tengo entendido tampoco las brujas.- su respuesta me descoloca y finjo no entender, sus ojos miran fijos los míos por lo que parece una eternidad- Y nuestro amigo cree que si.

—Créeme, lo vi y me persiguió.- continua Jack- Y yo lo perseguí y creo que debo volver a hacerlo.

—Sea lo que sea, si lo encuentras te matará.- respondo aún tensa

—¿Me estás invitando a perseguir un hombre lobo?- interroga con gracia- Y de plus, pasar tiempo con esta preciosura.

Su coqueteo empezaba a agradarme, era gracioso y no vulgar como la mayoría de los chicos.

—¿Eso es un si?

—¡Es un por supuesto que si!- tamborilea la mesa- Andando.

Esto era una completa locura, si mi madre se enteraba de mi "aventura" con el neófito que claramente recuerda todo, estaría castigada de por vida, pero había muerto el tercer neófito y más que hacerlo por ellos, lo hacía por mi, ¿qué tal si quiere subir de nivel e ir a por los Medicum? Ellos eran bastante necesarios cuando enfermábamos.

—¿Qué con la carne de hamburguesa?- cuestiona confundido y cierra la mochila de su amigo

—No lo sé.

—Tal vez él quiera tomar el té.- me burlo- Después de preparar unas hamburguesas en su hornito de hombre lobo.

—Vamos.- Morton señala a la morena

Gabrielle Dupre, la nueva acólita y posiblemente la próxima víctima.

—Muy mal, chicos.- Randall coloca su brazo en mis hombros- Usar compañeros como carnada.

—Fue idea de Jack.- excuso sonriendo

—No es lo que estamos haciendo.- niega rápidamente

—¿No seguiremos a las promesas esperando que se presente un hombre lobo para matarlas?

The daughter of the order || Randall Carpio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora