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───ㅤ𝗩𝗜𝗢𝗟𝗔𝗘ㅤᘝㅤ𝘁𝗲𝗿𝗰𝗲𝗿 𝗹𝗶𝗯𝗿𝗼ㅤ. . .
Interrogatorios, policías de aquí hasta allá, miles de miradas acusatorias cuando eres llevado o llamado..., eso y muchas otras cosas más es lo que definen a nuestra escuela ahora mismo: un espacio...
4 de noviembre. 09:00 a.m. cuatro días después de halloween.
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Lo único que me alegra el día es saber que no fui el único que soltó todo lo referido a la fiesta secundaria que hubo en Halloween, puesto que Soon y Kwan también hablaron de ella con los oficiales. ¿Los demás? No tengo idea, luego del encuentro intenso que tuvimos con Yoon y Hong ayer, no los he visto en todas estas horas, ni siquiera en los recreos. Tampoco es que deba buscarlos, ellos no parecían muy animados mientras se iban, así que toquetear la herida todavía fresca no se ve como algo inteligente. Los del club de fútbol tampoco nos han hablado, tal y como si no hubieramos estado compartiendo la noche hace algunos días atrás. Lo agradezco, ¿cómo le explicaríamos a los demás que repentinamente los deportistas quisieron soltar palabras no hirientes contra nosotros? Además, Jihoon está pegado a nuestra presencia como si se acabará de convertir en un chicle recién mascado. En general los que salimos de nuestros salones somos tres: Seungkwan, Soonyoung y yo, Lee prefiere quedarse dentro, mensajeándose con su pareja.
Hoy no parece que eso vaya a ocurrir.
Tiene su lado bueno, desde que los dos restantes no se escupen nada el uno al otro, puesto que parece que su pelea sólo se incrementa con el paso del tiempo, al menos puedo charlar con él y no hundirme en un silencio incómodo.
— ¿Has hablado con Jun? Él no parecía muy animado luego de...
— No, no he hablado. —Me corta con una gran velocidad. Mantiene la mirada todavía clavada en el cielo apenas iluminado por la brillante estrella dorada que cuelga de allí—. Cuando algo como eso sucede, es mejor dejarlo solo. Que lo atosiguen y pregunten mucho sobre sus cosas lo irrita. No quiero pelear con él.
— No pensé que ustedes llegarán a tener conflictos por..., bueno, por nada, siempre se ven bastante tranquilos. —El tono de voz perteneciente al apellidado Boo, quien gira el rostro hasta encararnos, con los ojos bastante agrandados gracias a la sorpresa de oír aquello. Soonyoung también actua de esa misma manera, clavando las iris hasta la persona que acababa de narrar lo relacionado a Junhui.
Si bien es cierto que ellos nunca se han presentado frente a nosotros como si acabarán de casi matarse el uno al otro, eso no quita que hay seguridad de que existen altibajos en su relación. En más de una ocasión he percibido como ellos parecen no querer mirarse, no tomarse de las manos o soltar comentarios hacia el otro con una agresividad tapada en normalidad, como si todo estuviera perfectamente bien. De cualquier forma, siempre fue algo pasajero de un día, en cambio, es notable la diferencia luego de que decidiera salir para no contestar o no hablar con Wen.
— Hemos tenido nuestros momentos. Nunca fueron la gran cosa, eran situaciones pequeñas que se resolvían en menos de unas horas. —Mientras sus palabras tiñen por completo a nuestro cuarteto, continuamos caminando hasta una de las tiendas que existen no muy alejado de la entrada, para conseguir algo pequeño hasta que fuera la hora de ir a la cafetería—. Pero este último tiempo..., no voy a mentir, él estuvo raro. Quise preguntarle si le pasaba algo o qué lo hacia ponerse así, pero lo único que logré fue las frases: "nada", "no deberías preocuparte" o "deja de preguntarme cada cosa que hago", la última fue lo que me escupió ayer cuando fui a visitarlo en la tarde. Decidí irme para no explotar frente a su presencia y la de su madre en la casa, sólo empeoraría todo.
