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───ㅤ𝗩𝗜𝗢𝗟𝗔𝗘ㅤᘝㅤ𝘁𝗲𝗿𝗰𝗲𝗿 𝗹𝗶𝗯𝗿𝗼ㅤ. . .
Interrogatorios, policías de aquí hasta allá, miles de miradas acusatorias cuando eres llevado o llamado..., eso y muchas otras cosas más es lo que definen a nuestra escuela ahora mismo: un espacio...
5 de noviembre. 10:10 a.m. cinco días después de halloween.
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— ¿Un campamento? —Inquiere Jihoon, todavía jugueteando con la comida apenas caliente que su madre le ha preparado, en su mirada se encuentra la nula intención que tiene de meterse un bocado de aquello a la boca—. ¿Les parece que es momento de irnos de campamento? —Regresa las iris a la pequeña porción de fideos con una salsa rojiza que escasea en humear.
— Sé que el que te enteraras de las cosas que hicimos a escondidas no debe haberte regalado los mejores ánimos..., menos el tema de lo que sea que haya ocurrido con Jun luego de que te fuiste corriendo. —Mientras Seungkwan continúa hablando, logro percibir como el semblante de la persona frente a nosotros empieza a endurecerse, creando diversas arrugas en su frente gracias a sus cejas y nariz apenas levantándose.
Si no va directo al punto, es bastante probable que Hoon termine aventándonos al rostro lo que no quiere comer.
— Queremos averiguar quién fue el encargado de lo referente a Seungcheol, Chan cree que esa persona es la misma que le envió las...
— Las cartas, lo sé. Yo fui el que le dio esa idea. —Corta con una cantidad bastante inexistente de interés. Boo asiente, recordando las semanas anteriores en donde les había explicado la visita del primer apellidado Lee a mi casa—. Pero..., ¿están seguros de ir a las cabañas de tus padres con gente a la que ni siquiera les hemos hablado más de una vez, sólo porque quieren saciar su sed de curiosidad? Es decir, ya se ha comenzado una investigación policial.
Seungkwan agranda el silencio, apretando apenas los labios puesto que no tiene alguna respuesta rápida para su pregunta. Coloca la mano izquierda sobre el hombro del más bajo, para así palmearlo unas cuentas veces. Debe estar ganando tiempo para conseguir más segundos y utilizarlos en buscar alguna cosa que expresar.
— Sabemos eso. —Aprieta apenas la prenda de nuestro amigo, para así continuar con su idea—. Y también tenemos muy en claro la forma en que se resuelven las cosas en este pueblo.
— Sí, bueno, no son la mejor policía o justicia..., pero qué puedes esperar, vivimos en un pueblo que es básicamente el cero a la izquierda de este país. Eso no quita el hecho de que no deban meterse en estas situaciones, si cualquier cosa les ocurre es poco probable que se resuelva rápido, puesto que quisieron hacer el trabajo que le pertenece a las autoridades, ¿pueden sólo no hacer tonterías por una vez? —Casi se puede divisar en sus iris un claro cansancio, pero no del que está relacionado al físico, es diferente, como si la simple idea de intentar entablar conversación con nosotros comenzará a bajar sus ánimos nuevamente.
Boo ha de haberlo notado también, pues gira por uno efímeros segundos el cuello, intentando buscar soluciones de mi parte, pero, ante la forma en que elevo los hombros, dejando en claro que no tengo idea sobre aquello, regresa la atención hacia adelante.
