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"¡Lan Zhan, Lan Zhan!"

Hay una mano sobre su hombro que lo sacude y hay algo que le hace cosquillas en la cara. Lan Zhan parpadea con cansancio mientras la cara de Wei Ying se enfoca en lo alto, iluminada por la luz del sol.

Su cabello está recogido en un moño desordenado, con flecos derramándose por toda su cara, los mechones más largos rozando la mejilla de Lan Zhan.  Su piel es pálida y sus ojos están inyectados en sangre, hematomas oscuros debajo de ellos como si no hubiera dormido en días.

Pero su sonrisa es cegadora en su intensidad.

"Lo hice", dice Wei Ying en un susurro, como si fuera un secreto.  Efectivamente, cuando la mirada de Lan Zhan se dirige hacia un lado, encuentra la vela, su llama se apagó.

Su corazón se acelera y se acelera, capturando los labios de Wei Ying y saboreando el calor de su risa vertiginosa.

Se besan y besan y besan hasta que se quedan sin aliento y Lan Zhan les da la vuelta para que Wei Ying se presione contra la cama, su cabello se despliegue a su alrededor. Los ojos de Wei Ying están bailando y no ha dejado de reírse.  El cabello de Lan Zhan se derrama sobre sus hombros, cubriéndolos, y es como si fueran las únicas dos personas en el mundo.

Wei Ying levanta la mano, sus dedos rozan sus labios.  Lan Zhan presiona un beso en su palma.

"No tenemos que apurarnos", dice Wei Ying, como si también se diera cuenta recién de esto. "Tenemos todo el tiempo del mundo."

"Mn", dice Lan Zhan, sus labios se inclinan hacia arriba, y presiona su rara sonrisa contra los labios de Wei Ying porque siempre es para él.

Se toman su tiempo, besándose lenta y dulcemente, mientras sus días se extienden ante ellos, sin fin.~♡

NADA MÁS QUE TIEMPODonde viven las historias. Descúbrelo ahora