Heridas del pasado (Yunoasta)

Capítulo Dos

  Un grupo de jóvenes se encontraban corriendo por las calles un tanto apurados. Llevaban el uniforme de la escuela más conocida de todo Japón, la escuela Clover. Para los que observaba a los jóvenes sabían perfectamente que estaban llegando más tarde de lo normal, y eso no era lo correcto en aquella prestigiosa escuela.

— ¡Está ya es la quinta vez que pasa! ¡¿Cómo puedes dormir tanto?! — gritó la peli rosa.

— ¡Lo siento mucho! — gritó el rubio ceniza con esa característica suya de siempre ser casi irritante.

— ¡Vaya par de idiotas que tengo por compañeros! — se quejó un peli castaño.

— ¡Vamos, vamos! No pierdan la cabeza ahora ¿Si? — pidió el castaño tratando de tranquilizar a sus compañeros— ¡Y ustedes dos déjense de peleas en plena calle! ¡Asustan a la gente!

   Mientras esté par de estudiantes corrían, otros dos se peleaban asustando o tomando a la gente por sorpresa, también estaba el pelirrojo que solo suspiraba, no le importaba llegar tarde a la escuela, pero le incomodaba todas las miradas que tenían sobre ellos, seguramente pensando que son unos raritos, o seguramente pensando que son unos idiotas que no merecían tener la beca y convivir con la gente de grado rico o multimillonario en la escuela Clovyer. Ya que este escuela originalmente es para la gente rica, noble o lo que fuera. Pero claro, esa temática se fue después de que asumiera el nuevo director, Novachrono Julius. Quién hizo de la escuela un lugar mucho mejor dándole la oportunidad a jóvenes talentosos de mejorar su futuro. Así es como Asta, Magna, Luck, Vanessa, Gauche, Zora y Finral terminaron participando de la beca, cabe aclarar que si bien la mejor amiga de Asta, Silva Noelle pertenece a la familia más millonaria del mundo, nunca se interesaron en Noelle y por eso terminó entrando a la escuela debido a su esfuerzo por mejorar. Y esta claro que después de eso, sus hermanos empezaron a llevarla a la escuela consigo.

   El grupo de estudiantes se detuvo una vez que subieron las escaleras de la entrada de la escuela, mirándose unos a otros. Puesto que en la entrada se encontraba el director con una sonrisa amable.

   Finral fue el primero en suspirar, y Zora fue el que hablo esta vez.

—Bueno, seguramente ya se lo esperaban— dijo soltando una pequeña carcajada.

—Estamos jodidos y todo por tu culpa, maldito dormilón— dijo Gauche con claras intenciones de golpear a Asta.

—Bueno bueno— llamó su atención el director— Como algunos de ustedes son buenos alumnos, y otros no tanto, permitiré que pasen esta vez, pero será la última. A cambio de esto, Asta, Magna y Luck deben esforzarse para pasar los últimos exámenes. Y obtendrán la ayuda del presidente del consejo estudiantil, ya que es hasta ahora uno de los estudiantes de honor y más aplicado que tiene la escuela.

   Asta hizo un mueca, no le gustaba estar cerca del presidente, se le hacía una persona seria y con mucho pero mucho sentido del deber, siempre que quería hacer alguna travesura era  atrapado por el, y castigado y regañado por sus profesores. Y eso había pasado ya varias veces, ¿Ahora debía estudiar con él? No, ni de broma aceptaría algo como eso. Pero era evidente que si no lo hacía reprobaría todas las materias y terminaría siendo la burla de todos otra vez, sinceramente ya había tenido suficiente de las burlas de todos ese nobles que solo buscaban hacerlo sentir mal. Eso no funcionaba, pero cuando insultaban a sus amigos el se enojaba de tal forma que terminaba golpeando la cara de aquellos jóvenes ricos.

—Bien, como no están en posición de negarse, vengan a mi oficina después de clases. Los estaré esperando con el presidente.

    Asta suspiró y junto a sus amigos siguieron su camino hacia sus respectivos salones. Si bien no era muy amigo del presidente, ni mucho menos su enemigo, si había cierta rivalidad en ellos, y eso le causaba un sentimiento nostálgico a Asta, aunque no recordaba porque, sin embargo el siempre decía que el presidente era una persona un poco desagradable porque siempre pensaba en el deber, siempre estaba atento a todo lo que pasará, y por si fuera poco, era una estrella en el ámbito deportivo, eso sí que le causaba más molestia al rubio ceniza, ya que su beca fue justamente por el deporte no por sus notas, aunque se mantenía un poco estable, no era exactamente la clase de persona que aprobaría los exámenes finales.

— ¿Otra vez te metiste en problemas? — preguntó su mejor amiga mirándolo seriamente.

—Se quedó dormido otra vez, es un idiota, y eso que yo sé lo advertí— se quejó Finral.

—Ya sabes cómo es, además bastante tiene con que ahora debe estudiar con el presidente— suspiró Noelle— Bueno, en caso de que sientas que es muy estricto, puedes pedirle ayuda a Mimosa, o a Klaus-san. Aunque en mi opinión, Yuno es la clase de persona con la que aprobarías todo sin importar tu nivel de inteligencia.

— ¡Pero yo no quiero estar ni cerca de él! — gritó Asta desplomándose en su asiento— ¡Es aburrido y siempre está diciendo que cosas están bien y que cosas no! ¿Por qué el director quiere que estudie con Yuno y no con alguien más?

— ¿Prefieres a Nozel? — se burló el pelirrojo—. Ya sabes cómo son todos aquí, bien aplicados e inteligentes. Además, Yuno parece ser la clase de persona que no le importa el estatus en el que se encuentra, en cambio Nozel, parece ser de la clase de persona que siempre estaría apunto de golpearte o decir cosas ofensivas.

    Un escalofrío le recorrió el cuerpo, era totalmente cierto, Nozel, el hermano mayor de Noelle, daba esa sensación de siempre estar enojado y de qué no importa cuanto intentes nunca iba a estar feliz de verte. Pero él jamás admitiría que prefería a Yuno en ese ámbito.

—Como sea. Pienso que podría haber sido con alguien más "divertido" — dijo sonrió.

—Estás aquí para aprender, no para divertirte.  Si tienes algún problema, puedes hablarlo con el director— aquella voz que sonó a sus espaldas lo dejo prácticamente helado— No es mi responsabilidad enseñarle a alguien tan idiota como tú.

  ¡Ahg! Cuanto odiaba a Yuno. Siempre aparecía en los peores momentos posibles. Tanto Magna como Finral pusieron su mano en su hombro susurrando un "Buena suerte" antes de dirigirse a sus asientos. Este día sería terrible.