FALL IN LOVE|| "Todos queremos amar y ser amados como la mayoría de los libros, pero... ¿siempre hay final feliz?"
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El entrenamiento de quidditch había terminado. Hailey se encontraba camino a la Sala Común. Estaba pensando en las tácticas que podía aplicar para el siguiente partido, hasta que alguien grito su nombre.
-¡Hailey! –gritó Hermione.
-Hola, ¿pasó algo? –preguntó Hailey confundida, puesto que, Hermione la había estado evitando desde la vez que durmieron juntas.
-No, nada. Solo quería hablar.
-Oh, claro. Iba a la Sala Común, pero podemos ir a otro lado, si quieres. –contestó Hailey.
-Podemos ir al lago.
-Está bien.
Ambas iban camino al lago en silencio, el ambiente no era tenso pero se notaba cierta incomodidad respecto a Hermione.
-Y, ¿Qué tal el entrenamiento? –preguntó Hermione tratando de que terminara el incómodo silencio.
-No muy bien, Oliver esta frustrado porque perdimos contra Hufflepuff y ahora tenemos menos posibilidades de ganar la copa. El entrenamiento se vuelve una tortura, ya no es solo hacer estrategias y armar jugadas, ahora estamos haciendo trabajos físicos. Es una pesadilla, me dueles los brazos y la parte abdominal. Oliver dice que tenemos que tener mejor resistencia si queremos ganar, creo que se está volviendo loco. El otro día me dolían todos los músculos, no me podía sentar, si me acostaba, no me podía levantar. Con las chicas tuvimos que ir a la enfermería... -Hailey iba a seguir pero se dio cuenta de que estaba divagando mucho en el tema. –Lo siento, a veces no me doy cuenta cuando me voy fuera de tema. –dijo Hailey rascándose la nuca.
-No importa, supongo que querías desquitarte. Además es divertido ver las muecas que haces cuando no estás de acuerdo con algo, o cuando hablas de algo que te molesta. –respondió Hermione.
Hailey se sorprendió, nunca pensó que alguien le prestara atención a sus gestos.
-Wow, es la primera vez que alguien me especifica que gestos hago.
Hermione sonrió sin mostrar los dientes y bajó la mirada.
-¿Cómo estás? –preguntó Hailey.
-Bien, Ron sigue enojado conmigo por Scabbers y ya no hablamos tanto, pero paso más tiempo en la biblioteca. –dijo Hermione con una mueca. Hailey la abrazó por los hombros y le dio un apretón. –El otro día encontré un libro interesante, era sobre las veintiocho familias de sangre pura. –Hailey se tensó. –Estaban los Malfoy, los Black, los Avery, y también estaban los Weasley.
-Bueno, si cuenta, los Weasley's somos la decepción de todos los puristas, somos traidores de sangre y, si te soy sincera, prefiero ser traidora que ser purista. –dijo Hailey sentándose bajo un árbol.
