Wabi Sabi ⸙.ં ❝ jιĸooĸ ❞ ‧₊˚ .

Capítulo 1

Era un viernes en la tarde, Jimin salía de su oficina, saliendo un poco más temprano que de costumbre. Avisó a su secretaria que se iría temprano y que cancele su agenda de esta noche ya que saldría con unos amigos.

Jimin se dirigió a la casa de uno de sus mejores amigos, Seokjin, quien fue un amigo desde la secundaria junto a Hoseok. Los tres siempre fueron muy unidos, incluso ahora cuando ya terminaron sus estudios y comenzaron a trabajar.

Al llegar a casa de Seokjin tocó el timbre esperando que le abran la puerta, la casa no era muy grande pero tampoco era pequeña, tenía una gran iluminación en el jardín con luces con paneles solares y también se podían apreciar paneles solares en el techo de la misma.

La puerta se abrió con suma rapidez y no tuvo tiempo ni de saludar a su amigo cuando apareció un híbrido de corgi quien lo jaló hasta la sala de estar.

—¡Jimin hyung! Hace mucho que no nos visita ¡juguemos algo en la consola!— habló energético Taehyung, el híbrido de Seokjin. Jimin tenía una muy buena relación con Taehyung puesto que este era de su misma edad y antes Jimin se quedaba en las tardes jugando con Taehyung mientras Seokjin trabajaba.

Jimin le brindó una cálida sonrisa a Taehyung, decidido a aceptar la oferta que le hizo el híbrido hasta que escuchó una tercera voz viniendo desde la puerta de la sala.

—Por lo menos deja que salude a todos, no seas tan impaciente Taehyung— dijo Hoseok, entrando en la sala con una sonrisa sosteniendo dos vasos de jugo pasándole uno a Jimin.—Ve a jugar con yoongi, está en tu habitación y dile que venga a saludar a Jimin.

El híbrido solo asintió para luego salir corriendo hacia su habitación. Jimin siguió por el pasillo a Hoseok hasta entrar en la cocina en donde se encontraba Jin.

—Perdón por que Taehyung te haya jalado de tal forma Jimin. El estaba muy ansioso de verte, te extraña mucho—le dijo con una sonrisa Jin mientras el tomaba asiento en la barra al lado de Hoseok.

—No te preocupes, Taehyung siempre ha sido un chico muy energético y es parte mi culpa también por no venir más seguido— dijo mientras tomaba un trago al jugo de naranja que había en su vaso y prosiguió —Me alegra que tengas más tiempo para quedarte con él, cuando lo cuidaba en las tardes siempre te extrañaba.

La puerta de la cocina fue abierta por Yoongi, el híbrido gato de Hoseok. Saludó a Jimin y luego de pedirle algo de tomar a su maestro se fue corriendo diciendo que Taehyung lo esperaba en su cuarto y no quería que hiciese trampa en el juego.

Jimin solo pudo reír ante la actitud de los híbridos. A Jimin le encantaría tener un híbrido pero no ha encontrado un híbrido para él, el no quería un híbrido común como un híbrido perro, gato o conejo ya que según él estos eran animales domésticos que podría conseguir con facilidad y quisiera que su híbrido fuera especial, alguno que logre cautivar a Jimin por completo.

La noche pasó rápidamente, los tres amigos quienes no se habían juntado hace bastante hablaron de todo lo que se les venía a la mente. Desde el trabajo hasta sus híbridos, quienes luego de cenar estaban cabeceando de sueño así que con un poco de ayuda de Jimin lograron hacerlos dormir en el cuarto de Taehyung, aunque realmente el no dormía ahí, para esta ocasión fue de gran ayuda la cama de dos plazas que disponía la habitación del híbrido.

Ahora Jin y Hoseok se encontraban contando anécdotas sobre sus híbridos a lo que Jimin reía divertido. Realmente tener un híbrido era un motivo de felicidad, nunca sabes qué hay dentro de sus cabezas y cada día te dan más sorpresas con sus ocurrencias.

—Jimin, tu siempre has querido un híbrido y además eres muy bueno tratando con ellos ¿Porqué no adoptas uno?— Preguntó Hoseok, alzando una ceja con curiosidad. Jimin tenía todas las posibilidades de tener un híbrido y más de una vez había expresado su deseo de adoptar uno, entonces ¿qué se lo impedía?

Sus dos amigos se quedaron pensando un poco más. No todos los refugios aceptaban híbridos de especies extrañas, normalmente sólo aceptaban animales domésticos y descendientes felinos y tal vez a uno que otra especie de oso. Aunque claro, si existían refugios que aceptaban cualquier híbrido, aunque en menor cantidad. Se quedaron en silencio por un momento hasta que a Hoseok se le ocurrió una idea.

—Bueno... Creo que es porque aún no encontré a ningún híbrido que me cautive por completo. Quiero decir, me gustaría un híbrido más especial, que sienta como si estuviera echo para mí. No me mal entiendan, los de perros o gatos son geniales pero creo que también son animales que puedes conseguir con facilidad. Quisiera algo más único, un compañero que se gane mi corazón así como sus híbridos se ganaron el corazón de ustedes— soltó Jimin algo pensativo, suspirando luego de lo dicho manteniendo la mirada fija en su vaso con soju.

—Tal vez deberías ir al refugio donde adopté a
Yoongi, había híbridos de todo tipo y me hice amigo del dueño. Namjoon es un buen tipo, intenta salvar y ayudar a todos los híbridos que se encuentra esperando buscarles un buen hogar. Te daré su número y le avisaré que irás a dar una mirada, quien te dice, tal vez encuentres a ese híbrido que tanto ansías—le soltó con una sonrisa su amigo, para luego buscar en su teléfono el número del tal Namjoon.

Jimin lo pensó un poco. En realidad no tenía nada que perder y mañana era su día libre, tal vez debería pasarse a dar un vistazo al refugio. En su casa tenía una habitación libre en la que podía quedarse el híbrido si decidía adoptarlo ese día. Aceptó la propuesta de su amigo con la esperanza de encontrar a su tan ansiado compañero híbrido, uno al que si encontraba se encargaría de brindarle todo lo que necesitaba, cumplirle todos sus caprichos y sobre todo llenarlo de amor.