Capítulo 4

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A los ojos de Jimin, Jeongguk era el ser más hermoso y tierno que existía. El pequeño híbrido se quedaba asombrado con todo, las más mínimas cosas, ya sea el bonito auto de Jimin, o todos los botones que había por dentro o la comodidad de este.

Jimin lo había echo entrar en el asiento de copiloto y le colocó el cinturón para luego rodear el auto y entrar en él. Jeongguk veía todo con ojos brillosos, moviendo sus manos tímidamente como si quisiera tocar algo pero deteniéndose antes de llegar a tocar algo "Adorable" pensó Jimin.

Necesitaban ir a comprar cosas que el menor utilizaría en su día a día, tendrían que comprar ropa, un celular y algunos productos para el cuidado del menor. Podrían ir al shopping en este momento pero no le parecía buena idea considerando la fobia social que Namjoon le había dicho que tenía el menor.

ㅡ Iremos a casa ahora y mañana saldremos a hacer compras para lo que necesites ¿está bien?

Jeongguk solo asintió ante sus palabras, más ocupado viendo por la ventana y apuntando a todo lo que veía y finalmente se distrajo con la música del auto. No tardaron mucho en llegar a su destino.

La casa de Jimin era bastante moderna pero no muy grande, después de todo Jimin siempre fue una persona bastante simple, aunque eso no significaba que no se había cumplido un par de caprichos al diseñar su casa.

Jimin le dió un recorrido por toda la casa, habían muchas cosas que Jeongguk jamás había visto en su vida, pero lo que más había llamado la atención de Jimin es que Jeongguk se interesaba especialmente en las cosas más simples y cotidianas que tenía en su casa y no parecía darle mucha atención a los objetos caros y lujosos.

Fueron al estudio de Jimin, su parte favorita de la casa y ahora la parte favorita de Jeongguk también. Había una mesa de diseño en el centro, un escritorio normal en el lado derecho, pero lo que llamó más la atención de Jeongguk en el lugar fue la pared llena de estantes con lápices de todos tipos y algunas herramientas de diseño. Claro, sin contar el hermoso ventanal con vista al patio y la piscina.

Después Jimin lo llevó a la que sería su habitación. Por el momento era solo un cuarto para invitados pero pronto hablaría con Jeongguk para remodelar la habitación a su gusto.

—¿Esta habitación es para mí solito?

Jeongguk estaba muy sorprendido. No cualquier híbrido tenía una habitación propia, puesto a que comúnmente duermen con sus dueños comparten la habitación. Él nunca había tenido una habitación sola para él, tenía que compartir el espacio con otros híbridos en el refugio. Jimin le dijo que la irían cambiando de a poco para hacerla más agradable para Jeongguk.

Jimin estaba dispuesto a ir lento con Jeongguk, era algo tímido y no quería ir muy rápido para no asustarlo. Irían al tiempo que planteara Jeongguk, si bien muchos maestros acostumbran dormir con sus híbridos desde que los adoptan debido a la buena relación que tuvieron, no estaba en sus planes hacerlo hasta que el menor quisiera. Esperaría a que su pequeño se fuera acercando a él.

—Así es, pequeño, luego veremos como quieres decorar todo pero este será tu espacio. Hablaré con unos amigos también para luego ir a comprar ropa y cosas que necesites, tal vez puedan darnos un paso a algunas tiendas más temprano para que no haya gente.

Jeongguk se acercó a Jimin con los ojos algo llorosos y lo abrazó, escondiendo su cara en su pecho. Tantas emociones lo estaban abrumando y con una buena razón, toda su vida se la pasó siendo menospreciado y rodeado de insultos o miradas que solo hacían que se quisiera tirar de un edificio.

Pero ahora, aparece el sujeto más hermoso que había visto en su vida quien lo llenó de halagos y amor desde que lo vió. No le molestó nada de él, ni su actuar, ni su personalidad o su físico. Incluso le dió su propio espacio y busca formas para no incomodarlo, Jeongguk no sabía qué hizo para merecer a Jimin.

Wabi Sabi ⸙.ં  ❝ jιĸooĸ ❞  ‧₊˚ .Donde viven las historias. Descúbrelo ahora