Cap: 6 - Temp 2: Shin'ainaru "Nikki"

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Día de limpieza. Cada mes por obligación debes limpiar la enorme casa en la que te encuentras sin excepciones, sala, cocina, baños y los tres cuartos, recuerdas que era algo que no te llamaba la atención, sin mentiras, el suplicio que implicaba el limpiar, trapear y organizarlo todo para dejar la casa reluciente es algo que de verdad preferías evitar a toda costa por el aburrimiento que te otorgaba, sin embargo; después del más de medio año que llevas con Nat te cambia ese sentimiento a felicidad y diversión cada vez que cumples ese trato, pues era obligatorio hacerlo para vivir en casa de tus padres y nunca faltas a tu palabra.

  (Tú): Oye Natsuki, ¿Cómo vas por allá arriba?

  Natsuki: ¡Sí! He terminado de barrer.

  (Tú): De maravilla, baja ya, tengo que pulir el suelo. – Dices caminando hacia las escaleras mirando a la pequeña pelirrosa de ahora cabello más largo.

  Natsuki: Ahm... Bueno... - Dice algo afligida

 Luego de dos días intensivos para eliminar los malos pensamientos de Natsuki de aquel incidente que pasaron con Dai, volvió todo relativamente a la normalidad. No era como si no hubiera pasado nada pero, tampoco estaba como la primera vez, podía hablar de una manera normal y darte pequeñas muestras de afecto como abrazos cortos.

  Natsuki: Bajo en seguida, tengo que hacer algo.

  (Tú): Lo que sea pero no entres a los cuartos, el suelo debe seguir mojado y sin pisadas – Dices viendo a Natsuki que se dirigía hacia el cuarto de ambos.

  Natsuki: Solo será un segundo.

  (Tú): No no, por favor, ni se te ocurra. Además conoces las reglas.

 Con una preocupación notoria en la mirada baja las escaleras y en seguida se coloca en el otro extremo de la casa para comenzar a trapear. Tú subes y tan dicho como hecho comienzas a pulir el suelo del baño. Mientras piensas, comienzas levemente a recordar lo que ocurrió entre antier y ayer.

 E inicia la memoria...

 Luego de que todos se fueran y cerraras la puerta con llave, caminas hacia el cuarto salteando escalones de dos en dos para poder subir más rápido y acceder. Natsuki estaba verdaderamente triste, desde la puerta podías escuchar sus sollozos y llantos.

  (Tú): Natsuki, no es tu culpa. – Dices del otro extremo de la puerta.

  Natsuki: Es mentira... Él... Mentiroso... Tú... No lo harías...

  (Tú): Me conoces mejor que él a estas alturas. Por favor, necesito que te calmes, hablemos.

  Natsuki: No puedo... Soy... Una malagradecida... Perdón...

  (Tú): No te eches la culpa de algo que no la tienes, todo el mundo duda, y ante la duda la reacción es diferente.

 Y tras un silencio corto la puerta se abre para mostrarse mirando al suelo.

  Natsuki: ¿Es cierto que te causo problemas...? ¿De verdad merezco que tengas tanta hospitalidad conmigo...?

 Tras un silencio abrupto y cierta tensión en el aire, Natsuki solo comienza a temblar, quizá por estar reprimiendo las ganas de llorar.

  (Tú): Natsuki, dime una sola vez en la que me hayas puesto incomodo realmente o una en la que te haya dejado sola.

 Notas que levanto un poco la mirada.

  (Tú): No puedes molestarme y no puedes hacerme sentir como que tú eres una carga para mí.

  Natsuki: ¿Por qué lo haces...?

El Bucle | [DDLC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora