¡ 𝖑𝖆 𝖌𝖆𝖓𝖆𝖉𝖔𝖗𝖆 !

[ 7 ; viaje 3/3 🔥]

《Yoobin's p.o.v》

Mis piernas me llevaron hasta el ascensor en torpes tambaleos, estaba completa de nervios y ansias.

¿Cómo pude creer que me podría estar engañando? Estuvo preparando lo que me prometió y yo con mis estupidas inseguridades.

Aún así no dejaba de sonreír, ya habría tiempo para regañarme a mí misma.

Al llegar al piso tomé aire para tranquilizarme, busqué la habitación con más paciencia para poder controlarme y no hacer el ridículo.

Llegué. Mis piernas se rozaban entre ellas impacientes hasta que oí el permiso para pasar.
Tomé aire luego de cerrar la puerta y me dirigí hacia el centro del cuarto.

Mis sentidos se derritieron al ver un pequeño oso de peluche en medio de las almohadas, y un globo de corazón transparente con confites dentro atado a la cabecera de la cama. Por último, oí la música sonar en un tono ambiental a mi alrededor.
Mi poco autocontrol me ganó y no dude en sentarme en la cama para tomar el oso entre mis brazos.
Me volteé hasta la otra punta para acercar el globo hasta mí. Al ser transparente pude notar unas letras del otro lado. Lo volteé.

¡dios dios dios dios!

¡¿Quiere que sea su novia?!

¡Sí, sí, mil veces sí!

- Veo que te han gustado los regalos. -oí por detrás y sonreí aún más.

- Eres increíble, Ha-

Me detuve.

¿Me he confundido? ¿Es posible que sea tan idiota para confundirla con ella? No puede ser.

- ¿Te sientes bien? -se acercó a mí.

- S-sí, solo, solo me ha tomado de sorpresa. -sonreí lo menos forzado posible.- ¿Tú me has citado aquí? -pregunté torpemente, queriendo que sea un malentendido, sabiendo que no sería así.

- Em, sí...

- ¿Esta es tu letra? -insistí enseñándole la nota que había guardado en mi bolsillo.

Ella se acercó a observarla.

- Oh, sí. La he copiado de internet para que quede más bonita. -rió nerviosa. Que extraño.

Juraba que era la misma que la otra nota que había dejado debajo de mis donas. Que era ella. Pero claramente no era así.

- Creí que estarías en el centro con las demás. -cambié de tema y dolorosamente dejé el oso devuelta en la cama.

- Oh sí, solo que cuando Handong apareció con esa extraña chica preferí volverme, era incómodo verlas juntas cerca nuestro. -se acercó a mí y se sentó a mi lado.- Recordé que estabas aquí y aproveché en hacer esto para disculparme por lo de ésta tarde.

Oh, qué dulce... ¡¿ESPEREN QUÉ?! ¡¿Chica?! ¡¿Con Handong?!

- ¿De qué chica hablas?

- Ninguna la conocíamos, tal vez la conoció hoy y planea pasar la noche. -se encogió de hombros.- Un paparazzi las encontró y ya andan rondando fotos de ellas. -finalizó luego de desbloquear su teléfono y mostrarme la foto de la que hablaba.

Handong la estaba abrazando muy sonriente.
Fue suficiente para que una ola caliente llegara a mi cuerpo, mi rostro mezclado entre el disgusto y la decepción.