¿Quieres Saber Si Te Sigo Amando?

4

Al día siguiente, estaba cayendo la noche, Peter estaba barriendo las hojas del césped. Estaban en otoño y caían demasiadas de color café naranja.

Finalmente llenó dos bolsas de basura y las dejó en la acera. Escucha que alguien se acerca, ve que es Wade.

  --Hola.-Dice suavemente.

  --Hola.-Dice suspirando.

  --¿Me preguntaba si te gustaría hablar un minuto?.-Dice con sus manos metidas en su suéter, mostrando indicios de nervios.

  --¿Ahora? Es que iba...-Señalo detrás suyo pero termino accediendo ante la mirada de Wade.

Suspiro y camino a su lado. --¿Querias... preguntarme algo?

  --Hmm, como has estado, Pet?.-Dio una ligera sonrisa.

  --Pues físicamente estoy bien, ja.-Dio una pequeña risa.---¿Nunca conociste a mis padres, cierto?.-Wade nego. --Son muy difíciles.

  --¿A que te refieres?

  --No puedes hablar bien con ellos. Me refiero a que no te escuchan.-Wilson notaba rencor en su voz, junto a su ceño fruncido.

  --Lamento eso. ¿Y porque no vinieron a ver a tu tío?

  --Mi mamá está enferma y mi padre se quedó a cuidarla. No me gusta nada la idea de que él se quede allá y no venga a ver a su hermano.

  --Debo ser grave para que él no viniera.-Murmuro.

  --Si, bastante.-Dijo bajando el tono de su voz.

  --¿Y... cuanto tiempo te quedarás?

  --Espero mucho tiempo. La ultima vez discutí con mi padre y decidi... irme de la casa. Me quedaré aquí.-Lo mira sonriendo de felicidad.

  --Me gusta verte feliz. Se nota que amas mucho a tus tíos.

  --Siempre los amé sobre cualquier cosa, eso no cambió ni cuando conoci a mis padres biológicos. Por ahora tengo unos cuantos miles de dólares que guarde en mi cuenta bancaria. Eso hasta que consiga un empleo fijo y pueda ayudar a mis tíos con los gastos.

  --Entiendo.-Ambos callaron unos segundos, incómodos de no saber que decir. --Oye. ¿Te puedo contar algo, pero quiero que me seas sincero?

Peter asintió con curiosidad.

  --No se si recuerdes una casita del árbol.

Peter desvió la mirada haciendo memoria de sus palabras. Recordaba estar en un lugar cerrado hecho de madera, él sobre una sábana con una almohada roja. Estaba mirando la película de Dumbo en una vieja televisión. 

  --Algo asi recuerdo. Pero eso fue hace años, dudo mucho que aún siga de pie.

  --Aunque no lo creas, aún sigue ahí.

Ríe incrédulo. --No te creo. Seguro ya es comida de termitas.

--¿Estas seguro?.-Wade sonrio por su forma tan segura de hablar.

  --Completamente.

--¿Quieres apostar?

Parker sonrió divertido. --Muy bien. Apuesto lo que quieras.

  --Conste. Pero... tendrás que acompañarme para demostrártelo.

Peter asintió sonriendo. --Esta bien.

Froto sus brazos sintiendo una ráfaga de viento, le dio frío así que cruzó sus brazos. El rubio lo miró y de inmediato le entregó su suéter tejido de color rojo.