「23」

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La noria terminó su recorrido a los pocos minutos. Jungkook y Taehyung no podían creer la forma en que el tiempo había pasado tan rápido dentro de ese cubículo, simplemente se perdió junto con la conversación que lograron crear en ese momento; el tiempo sin dudas pasa volando cuando mantienes tu mente enfocada en algo que realmente llama tu atención.

En resumen, Jungkook siguió hablando sobre cómo estaba planeando los preparativos (para pulir algunos detalles que no mencionó antes), afortunadamente esta vez Taehyung realmente se aseguró de escuchar, uniendo palabra tras palabra para conectar sus ideas y, poco a poco, descubrir cómo las cosas tenían más sentido.

Tras bajarse de la atracción fue otra historia. Seokjin esperó con Yoongi a los otros dos, con los nervios devorando el tiempo, cuales aumentaron (especialmente en Seokjin) cuando Taehyung le dio una mirada asesina. Por otro lado, Jungkook solo se limitó reír con lástima.

El resto es historia, terminaron despidiéndose, Jungkook siguió su camino y los demás el otro. Es así de simple, sin discusiones ni nada similar.

Ahora, luego de un viaje sin palabras y con gran malestar, finalmente lograron llegar al respectivo hogar de los novios. Los tres yacen en la sala de estar, sentados en los sofás, uno frente al otro. 

Intercambian miradas, ninguno se atreve a hablar, ninguno sabe muy bien por dónde empezar.

 — ¿Y bien? ¿No piensan decir nada? ¿Desde cuándo se supone que sabían toda la verdad? — No hay respuesta. — ¿En serio sufrí tanto por crearme ideas erróneas en mi cabeza y ninguno de ustedes fue capaz de decirme la verdad? Genial, quizás deba comprar mi disfraz de payaso. 

Quizás la actitud del castaño no sea la más conveniente luego de todo lo discutido y aclarado con Jungkook, pero hay que entender que luego de enterarse de que sus amigos de alguna manera estaban involucrados en el problema, terminó un poco decepcionado. Muy decepcionado.

— Lo siento mucho, Taehyung. — Ahora es Yoongi quien rompe el silencio. — Si debes estar molesto con alguien, ese alguien debo ser yo, porque Seokjin no estuvo involucrado en nada de esto, él apenas se enteró de todo hace unos días. Solo quería ayudar en la sorpresa...

— Se les fue un poco de las manos la sorpresa, ¿verdad? — Contraataca el castaño. — Hyung, ¿de verdad me dirás que no notaste todo el daño que todo me estaba generando? Me entristece pensar que cuando me caí no ayudaste con total honestidad.

— No seas tan duro con Yoongi — Seokjin interrumpe, pero Taehyung solo niega como respuesta. —, debes entender su situación, Taehyung.

— ¿Y él no fue duro conmigo? ¡No pidas igualdad donde nunca la hubo!

Mantener la calma nunca fue una opción.

— ¡Solo estoy pidiendo que intentes ponerte en su lugar!

— ¿Y quién se pone en mi lugar? ¿Eh, hyung? — Eleva más el tono de voz, sintiéndose saturado por todo. 

— ¡Taehyung! ¿Puedes tranquilizarte? 

— Joder... ¡Basta! — Min detiene el inicio del caos. No puede creer cómo está acabando lo que en un principio debía ser una charla pacífica. Los otros dos solo quedan callados en sus sitios, pero dentro de una guerra de miradas. — ¿Podemos dejar de discutir por lo menos un minuto? ¡Ya estoy cansado de elevar la voz! Sé que todos estamos cansados de esta situación. Pero, ¿cómo quieren que las cosas cambien si ustedes no cambian? — No hay respuesta, nuevamente. — Ahora, vamos a quedarnos acá sentados y cuando quieran aclarar las cosas como adultos, hablamos. ¿Quedó claro?

Otra vez no hay respuesta, las palabras del Min solo sentencian un incómodo silencio en la sala. Se repite la misma situación del principio, ninguno quiere volver a hablar ni siquiera una letra, sienten que todo puede empeorar hasta con la mínima acción. 

¡CONTRASEÑA INCORRECTA! © kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora