Capitulo 11

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Sola en su alcoba, en su nueva vida, que no hay mucha diferencia, en sus días como esposa del canciller, paso mucho tiempo en soledad en una situación similar, solo que ahora ya no espera a que regrese nadie; vuelve a la labor que dejo pendiente, guardar sus pertenencias en los armarios, tiene todavía maletas que vaciar, abre la siguiente donde contiene sus artículos de aseo, maquillaje, perfumes, joyería, con mimo las deja sobre el bello tocador, frente al gran espejo de madera tallada, coloca en orden cada pieza; le sigue otra maleta, la abre y encuentra varias cajas pequeñas y algunas de tamaño mayor, cada caja es una alegoría de lo cursi, son de color rosa pálido con un moño de color vivo, dentro un delicado papel igual de rosa que envuelve y protege bellos conjuntos de lencería, sin usar; Rey recuerda cuando fue a una tienda a comprarlos, hace algunos años, para ser exactos cinco, en su empeño en recuperar su matrimonio, leyó en un artículo sobre la importancia de usar ropa linda para impresionar a su pareja, mensaje engañoso, a su ver, abre las primera cajas que contiene conjuntos de bra y pantys, tan bellos que es un desperdicio enviarlos a la basura, y nada baratos, se pudo dar ese lujo como esposa del canciller, en una idea espontanea Rey se desviste frente al espejo, túnica, pantalones, todo se va, dejando su cuerpo al natural... se observa un buen tiempo, cada imperfección, cada línea que antes no estaba, suelta su cabello, ciertamente sigue siendo joven, y aunque su cuerpo delata la maternidad de manera muy discreta, en su vientre persiste neciamente un poco de flacidez, a pesar de las rutinas que se impuso para desaparecerlo, sus senos más grandes, pero no ven al frente, están levemente mirando abajo, esa es la muestra de la vida que creo, también ve lo bueno, su piel en casi todo el cuerpo es tersa, piernas firmes, se gira para ver sus caderas, que son un poco, tan solo un poco más amplias que cuando no era madre, tiene más curvas ahora, ella respira afortunadamente sus pequeños signos de la edad son discretos, pero no puede evitar compararse con Tanya o con la última acompañante de Poe, más jóvenes, con senos altivos y desafiantes, abdomen duro y cintura muy estrecha "igual que su mente" se convence a sí misma, se viste con el primer conjunto, de color rosa pálido delicado y transparente con flores bordadas, parece un trozo de pastel, que evoca a inocencia, es un poco infantil, ahora que lo ve mejor; se prueba el siguiente de color negro, un cambio fuerte en comparación del anterior, es transparente pero no revela todo, es provocador y mucho más adecuado para ella, se siente bien con él, toma su labial y entinta sus labios de rojo, sonríe para ella misma en el espejo, si ese es el efecto que buscaba; prueba otro conjunto uno delicado y bonito pero está en un punto medio, no es de femme fatale, ni de colegiala precoz, decide conservar todos; abre las cajas medianas y encuentra los camisones y batas que compro ese mismo día, se viste con el primero que encuentra, es de seda brillante de un color neutro con encajes negros, largo y con su bata a juego es práctico y bonito, nada especial, lo compro porque lo necesitaba; la siguiente caja deja ver un pequeño camisón negro con su bata igual de seda con encajes negros, es corto cubre solo lo necesario, con un profundo escote frontal y de espalda descubierta, un recuerdo amargo la invade; la noche siguiente a esta magnífica compra, vistió ese mismo camisón que deja ver sus largas y delgadas piernas, para esperar a Poe, solo para recibir una crítica feroz y destructiva, ella con ánimo de una gran noche y atraer su atención, ¿Cuánto tiempo él no la tocaba? Ya contaba años, la idea de esa sugerente prenda creyó que tendría efecto en él, grande fue su decepción cuando su esposo le dijo "esta bonito... pero debes buscar algo más adecuado para ti... eso usaría una chica más joven y con un cuerpo de infarto" desde aquella ocasión solo usa pijamas poco sensuales; él la dejo de nueva cuenta sola en su habitación para pasar la noche en otra cama, Rey descubre que no se trataba de su edad, sino más bien de que a su esposo le gustaban más jóvenes, a pesar de que él es poco más de diez años mayor que ella, se observa detenidamente, es joven y bella, su único pesar es ese hombre que fue buen amigo, se hizo responsable de una paternidad que creyó suya, pero a la larga fue el mayor error para los dos; se prueba los dos últimos conjuntos, el que más le gusta es uno de encaje negro con una sutil transparencia total, parece que los dibujos florales del tejido están tatuados a su piel, con una bata a juego que cubre con decencia el anterior; lo decide ya no tienen el objetivo de satisfacer la vista de un hombre indiferente, los usara para sí misma, se siente femenina y saber que debajo de su ropa lleva esos bellos conjuntos, la hacen sentir atrevida, ya no es la chica de veinte que se casó con su amigo por un embarazo no planeado de un padre supuestamente muerto; tiene treintaicinco quiere sentirse atractiva y deseada, si nunca su esposo fijo su atención de esa forma en ella, tal vez otro sí; tiene años que desea que su piel vuelva a encenderse como una vez lo hizo, que unas manos de hombre exploren cada rincón de su cuerpo; solo una vez se entregó así, pero era inexperta y de alguna forma lo es todavía, después del nacimiento de su hijo, su esposo escasamente llego a tocarla, y todo fue muy frio, demasiado impersonal, sin correspondencia emocional, ni carnal, tal vez solo porque creyó cumplir un requisito y por eso desea volver a vivir la experiencia de complacer a su carne; regresa a vestir la bata más discreta, para terminar de guardar su ropa, este momento tan suyo lo disfruto, se da cuenta de que necesita más ropa, que sea funcional con su nueva vida, definida en un limbo de madre- invitada no deseada- mujer, el insomnio desde hace mucho la tiene atrapada, así que le sobra el tiempo para terminar su labor y planear su siguiente día; en la nave de Kylo maneja el sistema horario del planeta núcleo, así que es poco más de media noche, se toma un baño, seca su cabello frente al espejo lo alborota un poco, viste nuevamente su bata que estreno y va a la cama, poco más de las dos de la madrugada ella logra dormir.

DESDE LAS SOMBRASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora