Vigésima septima molestia

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Estaba sentado en el rincon, encorvado y tratando de no sobresalir en la multitud. La ultima vez que estuvo en Golden Rose por alguna razón lo atacaron... como si supieran quien era él. Lo cual era extraño, mantuvo su chakra oculto todo el tiempo, no se comportó de manera diferente, mucho menos hizo algo que diera el hecho de que en realidad, si es un ninja. Escucha a un par de jóvenes quejarse, hablaron de como la bailarina más bonita se había ido, sin siquiera anunciar nada. Tal parece que Akayume no es el único club con bailarinas desapareciendo, lo cual lo lleva a una conclusión: trata de blancas. Tiene que ser.

No quiere darle la noticia a Sakura, la posibilidad de que cosas horribles le estén pasando a Shoga es muy grande y sabe que eso afligiría a la médico. Su vista capta un par de hombres señalandolo. Entonces saben que le han atrapado. El más fortachon se acerca a largas zancadas, en cuanto llega a él lo toma por el hombro y levanta de su silla con fuerza bruta.

"Ehhh ehhh ¿cual es su problema?" Exclama con enojo a medida que lo empujan fuera de la puerta.

"No eres bienvenido aquí." Dice el bouncer empujándolo fuera del establecimiento. Un hombre, Shikamaru asume un cliente, sale por la puerta después de él. Sus mejillas están completamente rojas y sus pasos son torpes.

"Tengo dinero, vine a ver a las chicas."  Se defiende el Nara sacando un rollo de billetes que Sakura le había dado previamente.

"Largo." Sentencia el fortachon, Shikamaru chasquea la lengua y se da la media vuelta comenzando a alejarse del lugar. En cuanto ha doblado en la cuadra alguien le llama.

"Ehh chico, esperad un momento." Es el hombre ebrio, el ninja se detiene y lo estudia con la mirada. Viste ropas caras y el hecho de que acababa de salir de Golden Rose es un incentivo para escuchar lo que tiene que decir.

"Que idiota ¿no crees? Se pierden de mi dinero." Se queja sacando la cajetilla de cigarros de su bolsillo trasero.

"Lo vi, menudo inútil. Si buscabas una chica, yo puedo ayudarte." Dice acercandose a él, le toma del hombro y se acerca como si estuviera a punto de contar el chisme del año.

"Conozco este hombre... su nombre es Keto. Lo puedes encontar en la bodega 7 siete del puerto este. Por un millón de llenes, puedes escoger la chica que quieras." Shikamaru lo sabe, acaba de ganar la lotería con aquella información. Esta ansioso, impotente y molesto pero decide jugar el juego.

"¿Un millón de yenes por una chica? Ha, no lo creo." Ataca el ninja

"De verdad, cualquier chica. Ve al club que sea, dile a Keto quien y donde se encuentra y ¡Bam! Una semana después estarán a tus pies haciendo todo lo que les dices." La sangre de Shikamaru abandona su cuerpo. Tenía razón, estos no son secuestros cualquiera pero una red de prostitución forzada. La posibilidad de que haya ninjas involucrados es alta ¿de que otra manera hacen a las chicas obedecer ciegamente?

"¡Vaya! Toda una ganga. Gracias por el dato. En definitiva le pagaré a Keto una visita pronto." Exclama fingiendo emoción, pero no está mintiendo. De verdad se enfrentaría a aquel hombre.

"No es nada chico, hoy por ti mañana por ti." El hombre palmea su hombro dos veces y sigue con su camino como si hubiera hecho la caridad del día.

Sakura. Tiene que hablar con ella y decirle lo que acaba de descubrir por lo que comienza a correr a Akayume, cuidando sus espaldas. Ella estaba en peligro de cierta manera, lo peor era no saber de quien cuidarse.

Cuando llega a Akayume, el letrero rojo está apagado a pesar de que apenas son las tres de la mañana. Eso se le hace extraño por lo que va al callejón y cuidando de que nadie lo está viendo, sube por la pared y se cuela por la ventana de la habitación de Sakura. No hay nadie lo cual se le hace extraño. Activa su chakra para sentir las energías en el piso... y nada. Solo una y no es de Sakura.

Él decide salir y pasa por alto la única presencia. Baja las escaleras al segundo piso y va directo a la oficina de Ueno. El hombre está detrás de su escritorio contando una gran suma de dinero, demasiado incluso para el dueño de un club. El hombre se exalta  dando un brinco sobre su silla, le mira una mirada llena de enojo y abre un cajón tan solo para dejar caer el dinero dentro.

"¿Donde está mi compañera?" Pregunta seco, lleno de seriedad.

"Que bien que vienes, quiero un reembolso. Aquella incompetente kunoichi me llevó a la quiebra." Exclama gritando, juntando ambas cejas.

"¿A que se refiere?" Cuestiona él alzando una ceja no entendiendo lo que está pasando.

"Perdí a todas mis bailarinas. Solo queda Sora. La maldita se marchó y no cumplió su parte del trato." Un dolor de estómago comienza a molestarlo, ¿Sakura se fue?

"¿Sabe a donde se fue?"

"¿Crees que estaría aquí si lo supiera? Quiero mi dinero de vuelta." Espeta golpeando la mesa con ambas manos. Shikamaru le lanza una mala mirada.

"Encontraré a Sakura, luego discutiremos la misión." Promete dándose la media vuelta.

"Ha, Konoha está lleno de ninjas inútiles." Escupe sacando una botella de ron, el Nara no se molesta en pelear con él. Tan solo sale del edificio lleno de confusión y preocupación. ¿Donde estaba Sakura? ¿algo salió mal y se fue sin él? No puede concentrarse de camino a su hotel, no sin saber que ha sido de Sakura.
Al entrar a su habitación, todo luce igual. Ve la bolsa sobre su cama y se acerca a tomarla, dejando escapar una sonrisa al ver el vestido que a Sakura le había gustado dentro. Entonces la mira, la nota sobre su cama. A medida que la lee sabe que algo anda muy mal.

Keiko trabajó en Akayume. Ella era una bailarina en el club y sea lo que sea que la dejó así... podría ser culpa de los ninjas raptando a las trabajadoras. La nota confirma que hay ninjas involucrados pero hay algo que le deja mal sabor de boca.

Sakura dice que lo verá esta noche... pero Ueno dijo que se había marchado.

Algo no cuadra, une los puntos pero por primera vez no quiere estar en lo correcto respecto a sus cálculos. Sus rodillas tiemblan junto con sus manos, su respiración se vuelve pesada y tragar saliva se vuelve doloroso. Pero de una cosa está seguro...Sakura estaba en peligro.

¡Que molestia! ♡Shikasaku♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora