-Te quiero hija.- dijo mi padre dándome un beso en la frente.
Se abren mis ojos por el estúpido despertador. Me levanto, ducho, visto, desayuno.
-Que te vaya bien- dijo mi mamá al ver que cerraba la puerta de la casa.
No tengo papá. Mi papá murió hace un año salvando mi vida, por mi culpa está muerto.
Mi mamá tiene una enfermedad llamada trastorno bipolar y es incurable, así que toma determinados medicamentos formulados a su respectivo horario, de no ser así; puede tener una crisis, y adivinen con quien se desquita.
-señorita- dijo el profesor mirándome y trayéndome a la realidad -¿puede presentarse por favor?-
Soy nueva en esta escuela y por si no se dieron cuenta es mi primer día, ¿Por qué mi abuela me había pasado a esta escuela? Sí. Mi abuela. Porque a mi mamá yo le valía mierda. Mi abuela me paso ya que en la que estaba anteriormente no paraban de hablar de la muerte de mi papá y de echarme la culpa, en realidad, yo me culpo todos los días de mi puta vida y no era necesario pero bueno; mi abuela se dio cuenta porque un día que había ido a visitar a mi abuela ella vio una nota pegada a mi mochila que decía: “Soy puta y tras del hecho maté a mi padre”. Mi abuela hablo con el rector pero él no podía hacer nada porque por encima estaba el dinero que le pagaban los padres de ellos. Obvio. Y aquí me encuentro.
-me llamo Elizabeth Midnight- dije mirando a los ojos al profesor –y tengo 16 años- baje mi vista hacia mi cuaderno.
-gracias señorita Elizabeth. ¿Y. por qué se cambió de escuela?- dijo buscando un papeleo en su escritorio.
-problemas personales que no me gustaría comentar ahora- dije dada por terminada la conversación.
Así paso todo el día. Lleno de las mismas preguntas con las mismas respuestas. Lleno de miradas y murmullos; me encontraba saliendo de la escuela.
-miren que tenemos acá- dijo una chica que tenía sus dos clones, que llevaban puesto unos tacones altos, tejanos pegados a sus piernas y una blusa que apenas les tapaba el estómago y con un escote pronunciado en la parte de sus tetas. La otra, que era la del medio, que supongo que era la que les decía que hacer, llevaba también unos tacones altos, pero a diferencia de sus clones llevaba una falda (si es que se podía llamar así) y una blusa pegada al cuerpo de encaje que dejaba ver su sostén.
-carne fresca- respondió una de sus clones con una sonrisa exagerada.
- oh. Gracias por darme una bienvenida tan hospitalaria, ahora, si me disculpan, tengo que atender asuntos más importantes que esto- Dije pasando por delante de ellas y dejándolas con la boca cerrada pensando en un insulto final, Pero me dejaron ir.
Me fui para la casa de mi abuela por parte de mi mamá, ya que ella era la única que me quedaba ya que mis otros abuelos habían muerto, no quedaba tan lejos de mi casa.
-hola mamá Chela- dije agachando la cabeza para que me diera un beso en la frente y me senté al lado de ella en el sofá.
Le decía mamá Chela porque era como una mamá para mí y aunque se llamaba Graciela a mayoría de gente le decía Chela o Chelita y bueno yo ya le decía así desde pequeña.
-hola mi amor- dijo después de darme el beso -¿quieres comer algo?- dijo intentándose levantar del asiento.
- no mamá Chela, gracias- dije evitando que se levantara ya que ella estaba muy mal de las rodillas y tenía un problema de resequedad en la piel, por lo tanto era muy delicada y para cocinar o algo parecido le tocaba ponerse guantes quirúrgicos transparentes.
-bueno- dijo acomodándose en su asiento -¿Cómo te fue en tu primer día?
-bien, estuve presentándome y eso- de repente me entro una duda -¿abuela?
-dime mi amor
-que… ¿Qué pasa si a mi mamá le da una crisis?- dije mirándola –no puedo llevarla, soy menor de edad, y tú no estás en condiciones de viajar.
Si a mi mamá le daba una crisis, tocaba llevarla a la clínica de la capital que quedaba aproximadamente a dos horas de esta ciudad, sin contar el tráfico. Allá la tenían internada y le hacían pasar por exámenes, le proporcionaban más medicamentos y la hacían entrar en actividades lúdicas y tocaba visitarla constantemente para llevarle ropa y comida que no le proporcionaban en el hospital.
-si eso pasara, no dudes en decírselo a tu tío, él te ayudara en eso- dijo mirándome con amor.
Si mi abuela se va, lo perderé todo.
Me encontraba abriendo la puerta de mi casa, cuando la abrí, fui directo a mi cuarto. No había arreglado mi cuarto y mi mamá se pondría furiosa. Trate de que no se diera cuenta, pero no pude.
-le dije que dejara su habitación arreglada- dijo mi mamá entrando a mi cuarto.
-ya la estoy arreglando- dije fastidiada –no tuve tiempo por la mañana.
-cuando yo le digo que haga una cosa, ¡TIENE QUE HACERLA CARAJO!- camino rápido hasta mí y me dio un fuerte empujón que me dejo en el piso. Ya no la soportaba… ya no la quería.
-¡NO SIRVE PARA NADA, ES UNA ESTÚPIDA! ¡USTED TIENE TODA LA CULPA DE QUE SU PAPÁ SE HAYA MUERTO!-
-¡PUES USTED SE QUERÍA SEPARAR DE ÉL!- grite en el suelo -¿NO LO RECUERDA? – me pare rápidamente y me encerré en el baño de mi habitación.
En el cajón de mi baño, había escondido una pequeña cuchilla, me senté en el piso y… sé que dicen que la mejor manera de desahogarse es llorando, pero yo no soy así. A mí no me salen las lágrimas, aunque quiera. Me quede solo en ropa interior y mis ojos se posaron en mi pierna derecha, habían cicatrices, unas recientes y otras viejas. No me gustaba cortarme en las muñecas, cualquiera las podría ver… en cambio en las piernas nadie las podía ver porque siempre llevaba tejanos y shorts lo suficientemente largos para taparlas. Pase la cuchilla por mi pierna. Ardía, pero no tanto.
-¿Cuántos años tienes Elizabeth?- dijo la doctora de la clínica
-9 años- dije nerviosa
-cuéntame Elizabeth ¿Qué te hace tu mamá cuando está en crisis?-dijo sosteniendo un papel y esperando a escribir.
Mire nerviosa. Hay estaban mis papas esperando que dijera algo. Esto es muy feo.-ella me regaña por no hacer las cosas, me grita…- mi voz se quebró –y me pega.- rompí en llanto y mire a mi mamá como lloraba al igual que yo. Yo no la quería. Le tenía miedo.
-ya puedes salir Elizabeth espera a tus padres afuera- me pare y salí de la habitación secándome las lágrimas de mi cara con las manos.
Ese día habían dejado internada a mi mamá.
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Hola esta es mi primera novela subida por Wattpad y me encantaría que opinaran como va y si les gusta, que la agregaran a sus favoritos.
Cualquier pregunta que tengan me la pueden hacer y con gusto respondo.
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ALONE
Teen FictionAyúdame. Ayúdame a salir de esto; porque estoy cansada. No tengo un gato, no me eh caído, no tengo frío todo el tiempo... No estoy bien. Soy Elizabeth Midnight y necesito de tu ayuda. Estoy sola.