Mia

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Me desperté decidida a qué conquistaría a Leo Valdez, el chico más gracioso y popular de la escuela...ok, yo soy popular pero el se hizo popular por su sentido del humor y su sonrisa sarcástica. Con el como mi novio, yo sería más popular de lo que soy. Me puse mi mejor vestido y me maquille perfectamente. Cuando llegue a la escuela me dirigí a mi primera clase, que tenía con Leo, el todavía no estaba ahí así que me senté en un lugar donde hubiera varios lugares vacíos para tener más oportunidades de que el se sentará junto a mi. Lentamente el salón se fue llenando hasta que lo ví, con su sonrisa sarcástica...lamentablemente se sentó al otro lado del salón pero había un asiento frente a el, estaba a punto de cambiarme pero llegó el maestro y me tuve que quedar ahí. Habían pasado diez minutos cuando entro el director, el siempre estaba de mal humor.
- Tienen nueva compañera, les diría que sean amables pero la verdad no me interesa- dicho esto se marchó y una chica entro, tengo que admitir que era muy bonita, su pelo de caramelo estaba hábilmente trenzado de lado y sus ojos color ámbar recorrieron el salón y se detuvieron en ¡Leo! Ella le sonrió y el le devolvió la sonrisa ¡No,no,no! ¡Esa bruja no se acercará a mi novio! El maestro la sentó atrás pero Leo la seguía mirando y ella le hacía señas para que se volteara pero parecía feliz por la atención. Dediqué la clase para trazar mi plan para alejar a la bruja de mi novio. Cuando salí de clase los ví platicando, me acerque y los interrumpí
- Hola, ¿Te llamas Calypso, verdad?- dije en un tono amigable-  Soy Mía
Antes de que ella pudiera contestar sonó la campana y Leo hablo
-¿Que clase tienes solecito?
¿¡Solecito!? No lo podía creer
- Ummm, química
- Mi clase me queda cerca de la de ella, si quieres yo la llevo, Leo
El miró a Calypso y ella se encogió de hombros y asintió
- Bien, adiós Solecito. Mía, gracias
Empeze a caminar junto a Calypso y decidí que era mi oportunidad
- Deberías alejarte de Leo, querida. Se la pasa persiguiendo a todas la chicas de la escuela, sobre todo a mi.
- Ummm...¿Enserio?
- Si, alejate de el. Yo se lo que te digo. Llegamos- la dejé en su salón y yo me dirigí al mío.
Al fin termino el día, me dirigí a la salida y fue cuando la ví. Leo y la bruja se estaban besando, me acerque rápidamente y los separe
- ¡¡¡Te dije que te alejarlas de el!!!
- Yo hago lo que quiero y no creo nada de lo que me dijiste
-¿Por?
- Porque Leo y yo somos novios. Ahora lárgate hace varios meses que no lo veo y si piensas que me lo puedes robar pues te lo digo de una buena vez. Nosotros dos hemos pasado por muchísimas cosas, estuvimos separados y pensé que no lo volvería a ver pero el regreso así que no creo que me vaya a cambiar a mi por alguien como tú.- dicho esto se giró hacía Leo, quien tenía una sonrisa orgullosa, y lo beso. El la tenía abrazada por la cintura y ella rodeaba su cuello con sus brazos. Con eso se olvidaron totalmente de mi. Estubieron así por bastante tiempo, aún después de mis diez minutos de shock ellos seguían abrazados, como si no se hubieran visto en cien años.
Leo no me volvió a hablar y su novia me quito mi puesto como la más popular de la escuela pero ella no lo uso para aprovecharse de todos, en cambio, era amable y trataba bien a todos. Jamás olvidaré lo que me hizo esa bruja.

Caleo One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora