Habían pasado un poco más de seis meses desde la propuesta de matrimonio de Min-Ho.
FLASH BACK
-¿Serias mi esposa?.-
Estaba sin palabras.
-Min-Ho...- Susurre, lo ayude a levantarse del piso.
-¿Necesitas tiempo?.- No podía leer la reacción de su rostro.
-Min-Ho, eres el hombre perfecto, eres honesto, un caballero y contigo mi corazón estaría protegido, pero...-
-Pero amas a ese tal Yoosung.- Dijo en un susurro.
Afirme con mi cabeza.
-Creí que lo había olvidado, pero hoy llegó un regalo de parte de él...- Uno de sus dedos calló mis labios.
Acercó su frente a la mía y una de mis manos la dirigió a su corazón.
-Escucha, ese hombre es tan afortunado, en estos momentos deseo ser él.- Mi corazón se rompía. -Pero tu corazón lo escogió y no puedo hacer nada.-
Mis lágrimas salieron y aunque Min-Ho trataba de detenerlas ellas no paraban ante su paso.
-Promete que serás feliz.-
El nudo en mi garganta crecía con cada palabra que escuchaban mis oídos.
-Te lo prometo.- Dije temblorosa.
Besó por última vez mis labios.
Fue una despedida dolorosa.
FIN FLASH BACK
-Yona ¿a dónde vamos?.-
-Ya te dije, es una sorpresa.-
Yona me estaba llevando al centro de la ciudad, según ella quería mostrarme un lugar.
-¿Dónde estamos?.- Pregunté finalmente cuando detuvo el taxi en frente de un pequeño edificio.
-Ya lo veras.-
Cuando entramos el edificio era una especie de clínica.
-¿Por qué estamos acá?, y sobre todo ¿cómo tienes llave de este lugar?.-
-Oh, pues verás.-
Su teléfono comenzó a sonar.
-Debo atender, ¿por qué no haces un recorrido?, sé que te gustará el lugar.-
Intenté detenerla, pero fue más rápida.
Suspiré, comencé a caminar por el lugar, por el tipo de decoración juraría que es una veterinaria.
Entre a cada oficina y efectivamente era una veterinaria.
-¿Por qué me trajo acá?.-
Llegué a la última puerta, mis ojos se dirigieron a las letras negras que estaban plasmadas en ella.
-Doctor Kim...-
Mi mundo comenzó a tambalearse bajo mis pies y mi corazón dejó de latir.
-¿Acaso?.-
Mis manos tomaron el pomo de la puerta y lentamente la abrieron.
No había nadie, solamente estaba el equipo veterinario, un escritorio y una silla.
Entre, pero me detuve en el escritorio, había una plaqueta dorada con letras negras. "Doctor Yoosung Kim".
Observé ese nombre por unos segundos cuando escuché la puerta cerrarse.
Me giré rápidamente y ahí estaba el hombre del cual seguía enamorada.
YOOSUNG
Mis ojos no podían dejar de mirarla, después de tanto tiempo nos volvemos a ver frente a frente.
Aunque su reacción me dejó helado.
-¿Qué haces acá?.- Su voz y ojos eran fríos.
-Es mi clínica.-
Sus ojos regresaron a la plaqueta que tenía grabado mi nombre.
-¿Por qué acá?, en Corea hay buenos lugares donde podrías establecerte.-
-Pero acá estás tú.- Dije un susurro.
-¿Yo?, que buen chiste.-
La miré, durante todo este tiempo había cambiado, ya no era la niña dulce que había conocido en la universidad.
-No es un chiste.- Dije seriamente.
-Jajaja ¿acaso ya te aburrieron las mujeres con las que te acuesta?.-
-¿De qué hablas?.- Mi corazón sentía que todo se iría al demonio por esa simple pregunta.
-¿Me crees idiota?, ¿creíste que no me enteraría de tu tipo de vida?.-
-Eso tiene una explicación...-
-¿Y CUÁL ES?, DESPUÉS DE ACOSTARTE CONMIGO TE GUSTÓ TANTO QUE NO PUDISTE PARAR DE HACERLO.-
Se había vuelto dura, no... simplemente se está protegiendo de mi.
-ERA MI MANERA DE ALIVIAR MI DOLOR, TE FUISTE Y LO ÚNICO QUE DEJASTE FUE ESTA MUGROSA CARTA.-
Saque la carta de su despedida de mi chaleco, a pesar de que la había roto no la había desechado a la basura, volví a unirla con cinta.
-Eso no lo justifica.- Evitó mirar su propia carta.
-Lo justifica porque cuando suplique como un imbécil tú decidiste romper la promesa. ¿Acaso no era motivo suficiente para olvidarte?.-
Su mirada se estaba empañando con sus lágrimas.
-No quiero oírte, es suficiente.-
Comenzó a caminar y cuando llegó a la puerta decidí hacer mi última jugada.
-Te seguí a ese restaurante.- Se detuvo, aproveche para acercarme a su espalda, inhale profundo su aroma de cerezos, decidí hablar en susurro -Vi como rechazaste a ese hombre y a su propuesta de matrimonio. Fue por mi Rei, sé que me amas todavía, aceptaste mi regalo de cumpleaños y estoy seguro que todavía tienes la tarjeta escrita por mi guardada en tu mesita de noche.-
-Yona...-
-Así es Yona, ella sabe todo y ha protegido lo que desde un principio ha sido mío, y aunque hubieras aceptado esa propuesta de matrimonio ahora mismo estaría raptado a la novia.-
Se giró para verme, iba a decir algo, pero no se lo permití, mi cuerpo aprisiono al suyo y mi boca se unió a la de ella.
Hola chicas, este es un final super largo, será partido en dos, espero les guste.
Muchas gracias por seguirla, por sus votos y comentarios (algunos me sacaron carcajadas), siempre agradezco a las personas que han estado desde el principio, espero sigan conmigo, ya que todavía tengo obras pendientes.
De verdad gracias, espero les guste este final, trataré de darle uno grandioso.
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BUSCÁNDOTE
Romance¿alguna vez te has enamorado a primera vista?, sí exacto, yo pensaba igual a ti, el amor a primera vista no existe, es algo que sólo pasa en las novelas. Qué escuchas a los pajaritos cantar, que las mariposas revolotean en tu estómago, la primavera...