--Ya casi llegan por nosotros ¿seguro que no olvidas nada?
De nuevo el mismo comentario por quinta vez de parte de mi madre
--Si estoy segura
--Vale, si estas nerviosa dinos, seguro aun podemos hacer algo respecto y quedarnos otro dia mas
Le mire divertida
--¿Seguro que yo soy la que esta nerviosa?
Alce los hombros
--Estoy bien, no me causa emocion pero voy a extrañar este lugar sonreí un poco repasando la casa donde había pasado mi infancia, incluso en un muro de pared que dividían la sala y cocina se veía las marcas que mi padre ponía conforme estiraba
--Tranquila, quizás puedas volver después ya que esta casa esta a tu nombre ahora
Mire a mi padre en cuanto dijo aquello
--Nunca lo había dicho hasta ahora por que hasta solo casi un mes desconocía el hecho que era adoptada y una princesa pero sin importar eso ustedes siempre serán mis primeros padres, gracias por cuidar de mi todos estos años los quiero
Recibí su abrazo de ambos sintiendo la calidez que siempre me daban, debido a ellos cedi al hecho que era la princesa de Hannover y estaba dispuesta a ganarme el corazon del pueblo a fin de ayudarles a ellos y mis padres adoptivos, cuando al fin partimos de la casa pude voltear a ver aquella casa por última vez aunque sencilla y sin lujos me había hecho pasar muchas experiencias inolvidables, había cierto aire de nostalgia pero ahora sabia que habria nuevas cosas que me harían ver mis inicios de forma mas especial
El trayecto fue bastante tranquilo, además que como casi nunca solíamos salir de la provincia por primera vez pude admirar mas de Hannover, recordaba que en todo el reino había una población de casi 550.000 habitantes, así que aunque no era especialmente grande aparentemente tanto en la cuidad y en los 33 provincias del reino crecían favorablemente, claro que había ciertas diferencias con la distribución de alimentos y medicina pero a pesar de ello no se veía tan mal
Después de casi ocho horas de viaje por fin llegamos a la capital, había un mercado bastante grande que casi cruzaba la mitad del pueblo, a lo lejos admire el palacio pero en vez de este había otra cosa que me importaba mas mire a la señorita Percy
--¿Por donde queda la casa de mis padres?
--Queda a unos treinta minutos del palacio
Asentí y mientras nos acercábamos convencí a la señorita Percy que me dejara ir a ver la casa donde vivirían al llegar vi una casa mediana con un gran patio y un hermoso jardín
--Será ideal para sembrar algunas verduras y plantas
Le dije a mi padre quien me abrazo sonriendo
--Así será...Elisa para nosotros ya eres nuestra princesa
Mi madre tambien se nos unio
--Siempre lo serás ten cuidado al llegar al palacio, puede que sea como el hielo y sino tienes cuidado puedes caer y hundirte
Mi padre asintió sonriendo
--Recuerda que basta con un acto de bondad puede hacer mas la diferencia
Luego de un par de minutos mas me despedí de ellos para volver al carruaje que me llevaría al palacio el trayecto esta vez realmente muy corto como había dicho la señorita Percy la casa sólo quedaba a 30 minutos, los muros del palacio cada vez se hacian mas grandes conforme nos acercábamos dejándome ver la magnitud de estos
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atrapada entre la espada y la pared
Dla nastolatkówMe llamo Eliza Van Truswell, tengo 17 años y vivo en el pequeño reino Hannover tengo una vida sencilla pero feliz al lado de mis padres en el pradero, el cual queda solo a unas horas del reino, todo en mi vida era bastante comun para mi, en solo...