Serendipty: -you kow... - I know [YOONMIN]

Capítulo VIII

JIMIN

Es miércoles por la mañana, acabo de terminar la planeación del mes para mi nuevo trabajo como maestro de danza contemporánea de la Universidad Metropolitana de Artes de Daegu.

Abro mi correo y lo envió. - Yes! – digo feliz. Alzo mis brazos y estiro mi espalda hacia atrás. – Iré por un café – tomo la sudadera de Yoongi ya limpia y me dispongo a salir de mi apartamento.

Entro al café, inevitable no entrar buscando a Yoongi, hay cuatro mesas ocupadas y nadie que atienda en la caja. Me espero un momento y veo salir a Yoongi de la cocina con varios platos en una charola.

-¡Hola! - dije muy contento, pero no hubo respuesta.

Una persona se pone atrás mío para ordenar. Pero Yoongi se pone a servir las bebidas y de espaldas nos dice a los dos que en seguida nos atendería.

Supongo no está Jin – pensé. Muerdo mi labio y me quedo viendo la caja de una forma tentadora. Sin pensarlo dos veces me pongo del otro lado del mostrador.

-Bienvenido, mi nombre es Jimin y yo tomaré su orden.

Yoongi voltea a verme sorprendido al escucharme. Yo también le dirigí la mirada y los dos asentimos. En las próximas tres horas ambos nos pusimos a trabajar y coordinamos como si fuéramos compañeros de hace tiempo.

A las 12:10 salió el último cliente. El peli rubio tomó una silla y se dejó caer, adoptó una postura encorvada y un semblante serio.

Solté una risa - ¿Cansado?

-Para nada. Es que Jin no ha contestado mis mensajes y no sé dónde está.

- mmm!- me dio pena preguntar.

Me acerqué a la mesa para levantar un vaso que había dejado un cliente.  Yoongi me toma del brazo y na pequeña electricidad me recorre hasta el pecho. Él tenía la cabeza abajo, yo me quedé inmóvil.

- Te ganaste una bebida, malteada o lo que tú quieras - Alzó su mirada y me regaló una sonrisa. Sus dientes son pequeños y graciosos. No pude evitar regresarle la sonrisa.

Jalé una silla y me senté cerca de él.

-Gracias – le di la sudadera. Hubo un silencio... – mido 1.74 – dije.

- ¿ah?

-La otra vez en tu interrogatorio preguntaste cuanto mido. – le recordé.

-Interrogatorio eh! – soltó una risa nasal. – Entonces, Park Jimin de Busan que mide 1.74. ¿Por qué me ayudaste?

-Pueees! Cuando era universitario trabajé en la cafetería de la escuela y... te vi algo atareado, asi que... solo quise ayudar.

- ¿Cuánto tiempo trabajaste ahí?

-Dos años seguidos.

-Yo he trabajado aquí desde que el papá de Jin abrió la cafetería. Hace 3 años.

-Entonces, Jin es como tu jefe.

-Jin es más que un jefe o un amigo común.

-Él cocina muy rico. Hasta ahorita me ha gustado todo lo que ha preparado.

-Quiere ser cheff o algo así, lee muchas revistas y libros de cocina.

-Debería estudiar gastronomía.

-No es tan fácil. Su padre enfermó hace como un año, Jin se hace cargo de todo y pues no tiene tiempo o dinero suficiente para estudiar.

-Es un buen chico – sonreí sutilmente.