Ya pasó una semana desde que se fue, no he podido superarlo, mi mente no para de crear ideas sobre lo que sucedió.
¿Acaso nunca me amo?
¿No le guste?
¿Qué hice mal?
Me he metido al mundo de las drogas, al inicio todo tiene un aspecto de ser hermoso, pero cuando se pasa el efecto vuelvo a esta realidad de mierda.
Decidí ir a buscar un empleo, ya que terminé mi carrera y Eduardo no volverá, necesito ocuparme en algo así que voy a la ciudad en el carro de Susana, llegué al edificio que me recomendó mi papá, es un lugar muy grande y demasiado alto, cuando entro veo que las personas son de clase social alta, están muy bien vestidas ¡Que pena! Voy en fachas, todas están con trajes formales muy bonitos y yo estoy con mis jeans rotos y una sudadera algo formal.
La secretaría es una mujer muy atractiva.
-Señorita, venía por una solicitud de trabajo.-
-Si Claro, su nombre completo por favor.-
-Javier López.-
-En dos días puede venir y por favor trate de venir con un vestuario adecuado.-
Me muero de vergüenza, solo a mí se me ocurre ir vestido de forma informal a un edificio así, al salir me encuentro con un tipo muy guapo, ojos azules, pelo castaño, realmente bello.
De camino a casa, empiezo a recordar a Eduardo, todas las palabras dulces que uso conmigo, cada caricia, me entregué a él sin dudarlo, que idiota soy, realmente confíe en él.
SUENA EL TELÉFONO
(NÚMERO DESCONOCIDO)
-¿Quién eres?-
-....-
-Responda.-
Me cuelga la llamada, quizá se han equivocado de número. Llegue a casa de Susana para devolverle las llaves de su automóvil.
-Gracias Susana.-
-De nada Javier, cuéntame cómo te fue.-
-Pues pasé un momento vergonzoso, todos estaban muy formales y mírame a mí.-
-Te dije Javier, pero espero consigas una entrevista de trabajo.-
-Gracias, me voy a mi casa, debo descansar.-
Otra vez este número, está vez no responderé, no sé quién es y ya me dio miedo. Al entrar a mi casa vuelven esos momentos con Eduardo, la sala, mi habitación, todo me lo recuerda.
¡Tantos momentos bonitos se convirtieron en nada!.
Es mejor seguir sin él, olvidarlo, de verdad me enamoré hasta los huesos de Eduardo, pero si lo mejor es que me olvidé, eso haré, no quiero sufrir más y ahora tengo algo en que ocuparme espero poder conseguir ese empleo... Adiós Eduardo.
![](https://img.wattpad.com/cover/233624515-288-k862846.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Juventud: Amor, sexo y drogas
Teen FictionDeberíamos entender lo que ser joven significa; amor, alcohol, sexo, corazones rotos, sentirnos incomprendidos. Javier es un chico tímido pero en el transcurso de la historia encontrará etapas que aún no conocía de si mismo.