Privé

Capitulo 1: Marie

Abrí la carta, Jackson me miraba atento a cada movimiento, el crujir de las papitas de McDonald 's me molestaba, me quitaba la intriga, era como ver una película de suspenso contada por un comediante.

Con paciencia pude ver las hojas de tamaño carta, eran bastantes, y habían muchas cosas para un sobre pequeño.

La cuarta era una copia de la escritura de una propiedad, unas llaves y un boleto de avión.

Partí leyendo la carta, que básicamente decía que mi padre, era un tal tipo Doxiadis o yo que sé, que mi padre biológico y que me crió hasta los dos años fue el señor y básicamente me cuenta una historia de infidelidad de mi madre con él y bla bla bla, obviamente no me lo creí.

Luego había otro sobre adentro, ¿Pero qué le pasa a este señor?, Lo abro y me encuentro que es una prueba de paternidad de él hacia mi.

¿Pero qué está pasando en este mundo?

¿Es de esos programas que les hacen bromas a la gente o que?, por que si es así que salga luego el conductor, que me va dar un ataque de pánico.

Había unas hojas con un corchete en la esquina, tenía varios párrafos subrayados con destacador amarillo.

Era un testamento, tenía mi nombre y cuatro nombres más (el testamento está en inglés), Básicamente tenía 15.9 millones de dólares que me hacía beneficiaria cuando "mi padre" muera, pero a estos se les sumaría dos casas en Estados Unidos y una en Grecia.

Está impactada, casi se me salen los hijos de la cara, estaba blanca como papel.

-¿Qué te pasa?-me pregunta con voz demandante mientras el crujir de las papitas se escuchaba de fondo.

-Toma- le respondo pasándole el papel, este deja de comer las papitas, se limpia los dedos con la servilleta y empieza a leer, cuando termina este se empieza a reír de una forma bastante grotesca.

-Es falso- dice riendo a carcajadas y moviendo la cabeza en negación- ¿Tu?, ¿dueña de una fortuna?, pero si con suerte tienes para ir en taxi.

Me molesté por la reacción de Jackson, así que tomé mis cosas y me fui caminando, no tenía dinero para el microbus.

Llegué a mi casa, subí las escaleras y preparé mis maletas, no empaqué mucho, ya que tenía 87.9 millones de dólares que con eso, me puedo comprar muchas cosas.

Solo falta una sola cosa, la carta de despedida, estoy tan enojada con mi madre por embarazarse y formar una nueva vida con alguien que es tan egocéntrico, si ella quiere una nueva vida, yo no voy a estar allí para hacerle mal.

Deje una carta en mi escritorio y me fui llorando, era una relación bastante tóxica que tenía con mi madre.

No es fácil dejar todo atrás, se que es muy fría esta despedida, pero no se como despedirme, me puse un suéter, abrí la ventana y puse mi maleta en el techo y la deslice para que cayera en el pasto, no hizo ruido, eso me sorprendió.

Pedí un taxi hasta la casa de Jackson, esto va a ser difícil, pero no imposible.

Me bajo del taxi llegando a una casa que conozco de memoria, me habré la señora black, con su cabello afro bien peinado.

Me sonríe de lado, ella sabe que me voy, me conoce mejor que mi madre.

Ella me abraza, a lo cual me tengo que agachar para corresponder el afectuoso abrazo.

Camino por la casa en la sala de estar y veo que Jackson baja la escalera, comiendo una manzana.

Este me mira y se queda atónito parado, la expresión en su cara es de intriga profunda, me observa y luego ve la pequeña maleta, su rostro refleja una enorme tristeza.

-¿Te vas a ir donde esos malditos ricos?-dice furioso al borde del llanto-¿Por qué?-me dice con una furia y pena enorme, me corre una lágrima al borde de la mejilla.

-Jackson, yo- intento explicar pero sus profundos ojos verdes llorosos me observan.

-Tu nada, íbamos a trabajar juntos para ahorrar y salir de este maldito pueblo, estudiar en la misma universidad- dice recordando nuestro juramento del meñique que hicimos a los 11.

-Lo recuerdo bien, pero no sabía nada de esto, no sabía que era trabajar, no sabía que tendría que hacer para salir de de este pueblo-dije tratando de explicar llorando a mares.

-Estas muy jodida si te vas a ir- me contesta en un tono amenazante.

-No le grites a Marie, ella tiene el derecho y puede hacer lo que ella quiera- dice la señora Black regañando a Jackson.

-Es que, yo te amo Marie, desde tu despeinado cabello en las mañanas, hasta cuando estás borracha, te amo de una y mil maneras posibles, y no te quiero perder- dice rogando

-Yo también, pero no puedo quedarme-camine y le robé un beso a sus carnosos labios, los que claramente fue respondido.

Pare y lo mire a los ojos -¿novios a distancia?- le pregunté mirándolo a los ojos- novios a distancia- dijo y me volvió a besar.

Tomo mi maleta y pasó su brazo por mi hombro, pidió un uber y nos fuimos al aeropuerto todo el camino nos fuimos abrazados y mirándonos mutuamente.

Recordaba cada momento de nuestra infancia juntos, desde el primer día de primaria hasta ahora.

Nos bajamos, el atardecer era maravilloso se podía ver las luna y el sol, la brisa de término del verano chocaba con mi cuerpo, siento que vibra mi celular en el voc

+30 21 849 77620 Unknown number

Dos opciones, una con un botón verde que se desliza y otro botón rojo, tenía miedo de contestar, ya que el código de área no era el mismo de francia.

Me digne a contestar, esperé escuchar alguna voz, mire mi teléfono para ver, llevaba 13 segundos de llamada y nadie hablaba.

Iba a presionar el botón de cortar la llamada, pero escuché una voz ronca y rasposa.

-Hello?- me estremezco y me demoré en darme cuenta que me hablaban en inglés.

Un lazo -Hello who am i talking to?- pregunté con la voz temblorosa.

Siempre he sido buena con los idiomas y con todo lo que es letras, siempre tenía buenas calificaciones en la secundaria, todos los años tenía el premio a mejor estudiante.

-With your real father- la voz se escuchaba cerca del micrófono, me quede paralizada, sentí como que se me cortaba la respiración.

-Hello? Is there someone?Marie?- tenía el acento de que no era su lengua materna.

-Yes with she-mi inglés era rápido y torpe, miraba a Jackson que me hacía señas de que iba a ir a comprar comida a una tienda pequeña que estaba dentro del aeropuerto.

-Hello, my name is Bemus Doxiadis, i'm your biology father, you are thinking what are hell want this man, and i say now, i want you-con un tono dulce parental me contestó

Respiraba pesado, se produjo un silencio incómodo, padre, él podrá ser mi padre biológico, pero un padre es el que cría y educa, no el que te da la vida.

-Escuchadme, vas a tomar un avión a la capital, nos encontraremos en el hotel en 2 días y vas a hacer todo lo que te diga-me asuste, ¿estaba hablando francés?

-¿Por qué debo hacerlo?, yo no te conozco-dije disgustada

-¿Quieres perder a tu mamá?, ya perdiste a Cole- respire fuerte me dolía recordar el nombre de mi padre

-Si no quieres eso, nos vemos en la capital, tu ticket de avión te va a llegar al correo-me informa amenazantemente.

Apreté fuertemente la manija de la maleta mire el celular y corté, París allá voy.

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Nota de la Autora:

París, la ciudad de las luces y del amor...

Besos