Robin's book

Fanfic

Título: ¿Me engañaste?
Personaje: Jason Todd/ Red Hood.

La hora del té con las amigas. Algo que tanto me encanta hacer pues es relajante después del ajetreo del día a día. Una actividad en la cual puedo sentirme libre cuando chismorreo como cacatúa con ellas.
Esta vez estamos en casa de Lee porque buscamos obtener una nueva experiencia, es decir, su casa es linda, grande, fresca y con un bello jardín, ideal para todas. Además, su sirviente nos atenderá por lo que no debemos preocuparnos por la temperatura del té o el nivel de azúcar ya que él sabe prepararlos estupendamente exquisitos a parte de que nos cocinará galletas de chocolate.
Por fin llego a su gran casa, toco el timbre y la dueña de esta me abre.

- Hola, bienvenida amiga querida.
Puedo escuchar su amabilidad en su voz.
- Hola, Lee, ¿Lista para la seción de hoy?
- Sí, estamos listas.
- ¿Eh? ¿Ya llegaron las demás?
Pregunto confundida ante el "estamos".
- En absoluto, solo faltas tú. Pero pasa, vamos a comenzar. Hoy tengo algo muy, realmente muy interesante que contar.
Dice con una expresión facial distinta a las demás veces. Eso demuestra que está feliz.
- Parece que tienes un buen chisme que contarnos.
Digo cuando piso la entrada de su casa para pasar directamente al jardín.
- Solo espera, no quiero dar spoilers.
Agrega una mirada con un brillo especial y una amplia sonrisa al decir esto.
- ¿Por qué tan feliz, Lee?
Pregunta intrigada otra voz distinta. Es la de March, que al igual que yo logra captar la emoción y felicidad de mi mejor amiga.
Digo que es mi mejor amiga porque la conozco desde hace 4 años y nos hemos apoyado en todo; no sé por qué pero le tengo una extraña confianza, es decir, que no hay un hecho específico o fuerte que haga que confíe en ella tanto como confío en mis padres, hermanos o mi novio porque pues los primeros me dieron la vida, los segundos son mi seres más cercanos, cuidadosos y amorosos, y el último pues... Estoy en una relación con él y las relaciones se basan en mutua confianza para que funcionen además precisamente hoy cumplimos 1 año de noviazgo.
Pero ella, no lo sé... Parece que nuestra confianza se dio por espontaneidad, aunque pensándolo bien, quizá se dio por compromiso, o sea, solo por ser amigas. En fin, no hay una razón acertada, al no haberla mi familia desconfía de Lee pero yo no, hasta ahora.

- ¿________? ¿Está todo bien?
En eso salgo de mi trance con su pregunta.
- Sí Lee. Solo... Estaba sumergida en mis pensamientos.
Admito. Miro hacia mi derecha, allí viene su sirviente con las 5 tazas de té y un puñado de galletas recién horneadas. Llegó más rápido de lo que pensé.

- Gracias Joe.
Le agradece cariñosamente y le brinda una cálida sonrisa. Típico de mi amiga Lee. De hecho esa es una de sus cualidades más resaltadas, con todo mundo es así. Suertudo será su novio con una mujer como ella.
- Y bien, ¿Qué nos quieres contar?
Cuestiona Martha para después dar un sorbo a su taza.  Yo hago lo mismo, después de todo no está tan caliente la infusión.
- Bueno, ahora sí hay algo muy interesante que contar.
Menciona con una pícara sonrisa, a lo cual me atrevo a preguntar lo siguiente.
- Parece que pasaste una excelente noche, ¿No es así?.
Lo pregunto porque estoy muy segura de que es así. Por lo general la actitud de las chicas es la que delata lo que sucedió anteriormente. Todas, a excepción de mí, han hecho esto.
- Parece que mi amiga acertó.
- Pero Lee, no tienes novio con quién hacerlo.
Afirma Martha. Tiene razón, a menos que se haya atrevido a tener una aventura con alguien de solo una noche de duración o nos haya ocultado su relación.
- Bueno, sé que no soy la típica amiga zorra pero si soy bastante cariñosa y eso lo saben a la perfección... Así que decidí ir más allá, ustedes saben, me refiero a romper las reglas- hace una pequeña pausa para mantenernos intrigadas, lo cual siempre ha funcionado; típico de ella- Me atreví a tener una aventura... Con un chico,en un bar y una fuerte apuesta.
- ¿Cómo es eso? ¡Explica!
Exige Linda, la tercera amiga en unirsenos contando a mí y a Lee en aquellos entonces.
- Bueno, ayer fui con mis antiguas amigas de la preparatoria a un bar. Estábamos tan bien arregladas que decidimos coquetear con algunos chicos. Una de ellas me reto a que me acostara con un chico que estaba cerca de nosotras y yo acepté, después de todo dijo que me daría dinero por hacerlo.
- ¿ El chico estaba guapo?
Pregunta una Martha muy interesada.
- Guapísimo. Lo que más me gustó fue que era dos años más grande que yo. Pero lo mejor está por venir.
- ¡Cuéntanos ya como era él y qué hicieron!
- Ok, Lisa. Bien, empecemos- nos muestra una sonrisa de satisfacción- Me acerqué a él lenta y seductoramente. De hecho fui directa, le dije que quería una noche loca pero al principio él se negó. Dio la vuelta y se fue. Mis amigas me miraron apenadas por mí. Vi que él se alejó por un rato pero luego volvió, decidido a venir por mí. Nos dijimos cosas provocativas para ya saben, encender el ambiente.
Luego de unos minutos, rentamos una habitación en ese mismo bar. Caminamos a ella, cerramos la puerta con seguro y comenzamos a besarnos.