Teclado

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Me desperté en la madrugada sin poder quitarle las preguntas de la cabeza y no se porque mi tonto cerebro me hizo salir al patio y llamar a Yoongi como el día anterior.

- ¿hola?

- ¿estabas dormido Yoongi?

- no, en realidad estaba tocando mi teclado

- bien, al menos no estabas dormido

- ¿pasa algo?, ¿no puedes dormir de nuevo?

- no, tuve una discusión con Jimin

- uhm, pareciera que no discuten mucho

- pues si lo hacemos y hoy pasó eso, no sé, desde que llegó Tae siento algo extraño y hoy Jimin dijo algo que no coincide

- mmm bueno, yo no sé sus asuntos así que no se que opinar, que tal si escuchas un poco de mi música

- claro, eso puede relajarme

- bien, entonces escucha atenta

Me acosté en el borde de madera y escuché su melodía suave, hasta que quedé dormida ahí mismo.

Narra Yoongi

- ¿y qué tal?, ¿te gusto la canción? - no escuche nada del otro lado - ¿Ginebra? ¡Ginebra!

Grite pero solo escuche un suspiro como si estuviera profundamente dormida, después a lo lejos unas pisadas.

- ¿como puedes dormir aquí Ginebra? - claro, la voz de su prometido - no puedo creerlo, cuelga ahora Min

- si pero ¿no tiene dudas de porque su prometida me llamó a esta hora? 

- no, supongo que es porque está enojada

A continuación solo se escuchó que colgó la llamada y una vez más me quedé en silencio pensando en el día en que al fin la pierda, cuando vaya de blanco al altar.

Narra Jimin

Tome a Ginebra del piso y la lleve hasta la cama para que pueda descansar mejor.

Me sentí muy inútil, ella tiene que recurrir a Yoongi para relajarse y poder dormir, creí que yo sería el que la protegeria y la consolaria en sus malos momentos.

Y lo peor es que le he mentido sobre todo esto, no solo le mentí, sino le juré algo a los ojos sin ser así. ¿Me perdonara si le digo la verdad?

ᶜᵒʳᵃᶻᵒ́ᶰ ᵈᵘʳᵒ ² ⁻ ᴹᶤᶰ ᵞᵒᵒᶰᵍᶤ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora