ᶜᵒʳᵃᶻᵒ́ᶰ ᵈᵘʳᵒ ² ⁻ ᴹᶤᶰ ᵞᵒᵒᶰᵍᶤ

Solo se huir

Todo había terminado, los diseños, retoques, fotos, todo, ya no tenía que trabajar más, solo nos quedaríamos un par de días más y de vuelta a Japón.

- tengo que recoger algunas cosas - tome una caja pequeña

- bien, te espero afuera - sonrió - amm Ginebra, hablemos cuando lleguemos a casa

- claro que sí, ahora ve abajo a esperarme

Narra Yoongi

Tome mi maletín y fui directo abajo para esperarla, aunque se me ocurrió una buena idea, tenemos que festejar que al fin terminamos todo esto.

Entre a un mini súper frente a la empresa, tome bebidas, algunos dulces, frituras, souju no podría faltar.

Los últimos días habían sido mejor de lo habitual, Jimin no causó más problemas, Ginebra regreso cada día a casa junto conmigo. Hablar de infinidad de cosas, verla despertar y mirar sus ojitos brillosos.

Ya saben, una de esas veces en que nos quedamos dormidos viendo una película y al amanecer estar a su lado.

Los mejores días de mi jodida vida habían vuelto, porque ella es quien me da vida. Di las gracias y antes de retirarme logre verla hablando con su primo, parece que discuten.

...

- ¿qué? - no pude entenderlo de verdad que no

- tienes que volver y casarte con Jimin

- ¿vas a seguir manipulando mi vida? Realmente eres - me limpie las lágrimas

- él te ama de verdad - me tomo de la mano - tienes que volver

- suéltame - traté de soltarme pero puso más presión

- ¡tienes que volver a tu vida! ¡todo esto es una fantasía! ¿Qué quieres conseguir? El tonto amorío que no te deje tener con ese inútil, ¿por eso haces esto? Ya no eres una adolescente para seguir con tus estupideces

- ya no soy una adolescente, es verdad - mis lágrimas corrieron una vez más por mis mejillas - pero yo soy la que toma sus decisiones, es mi vida

- suéltala - Min llegó y lo alejó - mejor lárgate de aquí, ¿no te ha sido suficiente todo el daño que le hiciste?

- ese no es tu problema

- si lo es, largo de aquí - le dio un empujón

- si de verdad amas a Jimin volverías con él, pero también fue un juego para ti ¿no? - comenzó a reír y Yoongi no dudo en golpearlo

En cambio yo solo huí como la cobarde que siempre he sido, y es lo único que se me ocurrió en ese momento. Correr, correr a un lugar donde nadie pueda encontrarme, en el camino mi celular cayó de mi bolsillo, traté de volver por el pero solo pude correr más cuando miré a Yoongi tras de mi.

- ¡Ginebra!