Tras la muerte de su padre Lysa vuelve a su hogar para reencontrarse con su familia. A partir de ese día sorpresas inesperadas llegaran a su vida, incluyendo el amor.
Esta basada en la serie, por lo que la recomiendo ver primero.
Ninguno de los pers...
Abrí la puerta lentamente y quede totalmente sorprendida al ver mi habitación. Estaba todo en orden y como nueva, estoy segura de que mamá la aseo. Todos mis libros, mis revistas y esas pequeñas cosas estaban en su lugar. Me acerque a mi tocador y mire que todos mis pequeños maquillajes, anillos y collares aun seguían ahí.
Levante la mirada y me mire fijamente en el espejo analizando detenidamente cada facción de mi cara y no pude evitar que lagrimas salieran de mis ojos, me resultaba algo decepcionante el hecho de estar asi, por que a diferencia de los demás seguía siendo la misma persona que cuando me marche de aquí, mis hermanos ahora habían realizado su propia vida, habían cambiado y yo aun seguía igual. En cambio yo a consecuencia de esto no había podido hacer algo importante con mi vida.
La nostalgia aterrizo en mi mente y era muy difícil sacarla de ahí. Me recosté en mi cama para relajarme poco a poco, cerré mis ojos y deje que todo fluyera para que la tranquilidad se apoderara de mi.
El sonido de una canción se comenzó a escuchar muy fuerte por toda la casa, era una canción que hace años no escuchaba pero que era muy pegajosa, asi que solo me relaje más disfrutando de la canción.
De repente un fuerte ruido interrumpió la música, provocando que me cayera de la cama. No era algo normal que sucedía asi de la nada y no era cosa de una tormenta, asi que me levante baje con todos mis hermanos y salimos al patio que era donde provenían todo ese alboroto. Era muy sorprendente lo que teníamos frente a nosotros por que parecía una especie de anomalía o portal de color azul que causaba viento y fuertes sonidos. Me acerque a todos y grite:
—¡¿Que diablos es eso?! —tome mi cabello que cubría mi cara y lo sostuve fuertemente. Todos observábamos aquello que había en el aire.
—Parece una especie de anomalía temporal, eso o un mini agujero negro —respondió Luther
—¡A un lado! —exclamo Klaus para que todos retrocediéramos y enseguida lanzo un extintor a aquel fenómeno que estaba ocurriendo —pero fue un intento en vano.
—¿Y eso para que? —grito Alison ante la acción de Klaus
—Yo que se, ¿tienes una mejor idea? —respondió.
Aquello que mirábamos era algo extraño, no dejaba de pensar que tal vez y esa cosa lanzaría un rayo contra nosotros. Poco a poco se lograba divisar a una persona que cada vez mas se iba acercando y que al parecer intentaba entrar en nuestro mundo. Hasta que este sujeto cayo en breve en nuestro patio, Y toda esa anomalía desapareció asi de la nada, y el clima volvió a ser normal; pero este no era cualquier persona, se trataba de Numero Cinco.
—¿Alguien mas ve al pequeño Numero Cinco o es idea mía? —agrego Klaus, mientras todos observábamos a nuestro hermano que lucia un traje que le quedaba bastante grande.
Realmente estaba sorprendida y emocionada a la vez, no era cosa de que lo extrañara, si no que por fin había alguien en la academia que lucia físicamente igual a mi. Numero Cinco se veía igual que cuando se marcho.
—Carajo —respondió este, viéndose a si mismo y mirándonos a nosotros con una cara decepcionada.
Después de esta situación, todos nos dirigimos a la cocina donde al parecer hablaríamos. Era un poco extraña la cosa por que al fin estábamos todos reunidos. No dejábamos de mirar a Cinco quien se preparaba un sándwich de mantequilla de maní y malvaviscos, pero este no nos dirigía la palabra ni la mirada. Y nadie decía nada.
—¿Que día es hoy?, la fecha exacta —pregunto Cinco; al fin se atrevió a hablar
—24..... de Marzo —respondió Vanya al chico, pero este seguía sin dirigirnos la mirada
—¿Y hablaremos de lo que paso? —cuestiono Luther pero Five no respondió, todos nos mirábamos unos a otros ante la situación— han pasado 17 años
—Paso mucho mas tiempo que eso —Fueron las palabras cortantes que contesto el chico
—¿A donde fuiste? —le pregunte yo, me preguntaba que había hecho todo este tiempo que desapareció
—Al futuro y es una mierda por cierto —creo que todos nos sorprendimos ante esa respuesta—Linda falda —menciono esto mirando a Klaus y después dirigió su mirada hacia mi con el ceño fruncido, tal vez y le parecía extraño verme de esta edad, puesto que cuando sufrí el golpe fue tiempo después de que el se fuera.
—Espera, ¿como volviste? —interrogo Vanya
Empezó a explicarnos con sus cosas de nerds como fue que pudo volver. Dijo que paso 45 años en el futuro y que ahora su conciencia tenia 58 años, pero que hizo mal su ecuación y que termino en el cuerpo de un adolescente de 13 años. Parecía un chiflado, bueno, no prácticamente un chiflado, por que su caso era similar al mio, excepto que yo soy una chica con mentalidad 30 años en el cuerpo de una adolescente de 15 años; pero con todo lo que decía no dudaría en que se volvió loco.
Después de esa interesante charla se marcho, no dijo nada mas y nos dejo a todos con muchas dudas sin resolver.
...
Llame a mi jefa y le pedí unos días de descanso más y ella como buena persona que es, acepto, me dijo que ella sabia lo que era perder a un ser querido y que me tomara el tiempo que necesite. Así que no podía negarme.
Observaba lentamente todas aquellas revistas y artículos que se encontraban en la sala sobre la academia Umbrella. Y ahí estaba, era muy fácil de identificar, era aquel libro que había escrito Vanya que llevaba de nombre Extraordinaria: mi vida como numero siete, lo tome y empece a hojearlo.
—Joven Lysa —me sorprendió Pogo detrás de mi
—¿Sabes si papá algún día leyó esto? —le enseñe aquel libro que traía en mano.
—No que yo sepa
—Pues esa fue una buena decisión —le respondí, no hubiera imaginado si el habría leído esto. Seguramente se hubiera enfadado mucho. Me gire hacia el cuadro de la foto de Cinco y lo observe durante segundos— ¿Es bueno no? que haya regresado. Al fin esta en casa.
—Tu padre siempre creyó que numero Cinco aun estaba allá afuera. No perdió la fé
—Pues qui esta el resultado —ahora ambos veíamos la foto de cinco, duramos unos segundos en silencio— Oye Pogo, ¿Crees que pueda quedarme unos días aquí?, ya sabes, vivo al otro lado de la ciudad y no podr......
—Lysa, esta es tu casa, siempre eres bienvenida —me contesto con amabilidad como suele hacerlo siempre.
—Gracias, de verdad —le respondí con un abrazo que en verdad necesitaba.
Gracias por haber llegado hasta aquí una vez mas, tal vez no sean capítulos muy largos pero tratare de publicar varias veces por semana. No te olvides de comentar y votar.
Gracias. Los quiero mucho:3
Cuídense
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