¿Destinados al fracaso?

Capítulo 2

En el momento que la puerta se abrió, nos quedamos petrificadas al igual que la persona que estaba cruzando el umbral de la puerta, era un chico muy robusto, es lo único que la luz tenue del ordenador nos dejaba apreciar.

Cuando él dio la luz pudimos verle mejor, era un hombre bastante alto y musculado,rubio, sus ojos eran de un verde muy intenso por lo que pude apreciar, tenía un par de tatuajes en los brazos y una pequeña venda en el tobillo, que pude ver gracias a que tenía un poco subido el pantalón.

-Supongo qué una de las dos será mi compañera de piso, porque está es mi habitación ya he probado la llave en varias habitaciones y esta es la única que coincide- dijo él con una voz varonil mientras se le escapaba una pequeña risa, supongo que por su confusión.

-Sí, yo soy la que habita esta maravillosa habitación, así que bienvenido- dije con seguridad y levantándome para estrecharle la mano y darle una buena imagen.

-Muchas gracias, pareces una chica maja supongo que nos llevaremos muy bien- me contestó con una sonrisa mientras le estrechaba la mano.

-Bueno te digo, esa sería tu parte de la habitación, el cuarto de baño es compartido pero las duchas son para todas las personas de mi residencia- le sañalé.

-Vaya, eres una buena guía, ¿me podrías ayudar también como guía en la universidad? no he podido venir hasta ahora pero tengo dos días, a mí con eso me sirve- me está dando muy buenas esperanzas en cuanto a la convivencia con él, espero que las cumpla.

-Por su puesto, es mi primer año pero tranquilo ya me sé todos los pasillos como la palma de mi mano.

-Bueno pues meteré mis maletas y me iré a dormir, mañana comenzamos con la guía turística-me dijo con una gran sonrisa.

Solo traía dos maletas,aunque eran bastante grandes, las dejó a un lado y se metió al cuarto de baño, entonces me giré y vi a Lucía  con cara de sorprendida.

-Tú me vas a acompañar ahora mismo a mi habitación-me cojió del brazo con tanta rapidez que casi me como el suelo, por suerte me estabilicé antes de caer.

-Pero bueno, ¿me puedes explicar que te está pasando?-la pregunté agitada por su comportamiento.

-¿Sabes que tienes una promesa contigo misma verdad?-me recordó.

-Si te hubieses fijado en su muñeca habrías visto que lleva una pulsera de la bandera LGTBIQ+, no digo que sea gay pero creo que podría serlo, además que sea amable con un chico no significa que vaya a enamorarme de él a la primera- la aseguré.

-Buen punto- dijo

Cuando volví a mi habitación después de acompañar a mi mejor amiga, el chico estaba entrando en su cama con un pijama de rayas, de pronto me di cuenta que no sabía su nombre así que le pregunté antes  que se durmiera.

-Una cosa,¿cuál es tú nombre?

-Me llamo Armin Beldelk, ¿y usted señorita?-me preguntó.

-Mi nombre es Juliette Marcille-le informé.

-Bueno pues ahora que ya sabes mi nombre y mi apellido te voy a empezar a informar que vas a escucharle varias veces, pero no le relaciones conmigo, mi hermano Dylan es el que mancha el nombre de mi familia, bueno más bien solo el mío pero bueno, yo no soy como él-dijo con tono de preocupación.

-Tranquilo, no suelo juzgar a las personas sin antes comprobar que ellos mismos han hecho algo mal, pero bueno, gracias por informarme- le dije.

-Gracias, con eso ya me voy más relajado a la cama, no quiero que tengas una mala impresión por mi parte, es más prefiero ser tu amigo, pero para eso tenemos que conocernos un poco más-

-Estaría encantada de ser tu amiga-le aseguré.

-Me alegra mucho oír eso. Buenas noches Juliette Marcille.

-Buenas noches Armin Beldelk.

Y con eso cerré los ojos pensando en la suerte que he tenido al tener este compañero de habitación.

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Durante toda la mañana estuve guiando a Armin por toda la universidad buscando sus clase y hablando un poco de las asignaturas que habíamos cogido.

Poco tiempo después quedamos con Lucía para ir a comer con ella y su compañera de habitación, ambas habíamos tenido suerte en ese sentido, es lo que más nos aterraba desde el momento en el que supimos que no nos tocaría juntas en la habitación.

Su compañera era una chica alta y delgada, con el pelo negro y una cara que parecía de modelo, había hablado bastante con ella y por lo que pude apreciar era una mujer con mucha energía y una alegría que se repartía por el ambiente.

-Bueno chicas, vosotras que habéis venido antes espero que sepáis buenas zonas para ir de fiesta y sobre todo que haya buenos hombres por allí y si no es pedir mucho que sea una zona por donde no vaya mucha gente de la universidad, paso de encontrarme con el asqueroso de mi hermano-nos dijo Armin, asegurando así mi teoría. 

-Pues la verdad que nosotras no somos mucho de salir de fiesta y además que Juliette es la que más tiempo ha estado por estos lugares, pero sinceramente no creo que sepa mucho de esas zonas- informó a todos Lucía

-Para que lo sepas, si se de algunas zonas de fiesta, me gusta dar paseos nocturnos, me extraña que no lo sepas, el problema es que no está muy lejos de aquí y supongo que habrá bastantes universitarios- les dije.

-En la zona del centro supongo que no haya mucha gente de por aquí, así que esos sitios pueden ser buenos y pueden estar llenos de gente arreglada y con buen estilos y eso es lo que yo busco-nos dijo Rachel, la compañera de piso de Lucía.

-Lo mismo digo- dijimos los demás al unísono y nos empezamos a reír.

Después de decidir que mañana iríamos todos juntos a tomar unas copas nocturnas, para relajarnos antes de empezar la universidad, nos despedimos y cada uno fuimos a nuestra habitación, por el camino Armin y yo hablamos un poco de nuestros  gustos y de los horarios que podíamos coincidir para ir juntos a las clases.

Cuando llegamos a la habitación abrimos la puerta y nos encontramos una pequeña sorpresa.

-Muy buenas hermanito.

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Y otro capítulo más para llegar a el desastre jijiji.

 Espero que os haya gustado y no olvidéis votar si así es.

Hasta la próxima ;3