Unexpected | Harry Styles

Cuatro.

Harry

Levanté la vista de mi celular y miré a Jeff, quien me observaba con diversión –¿Pasa algo? –pregunté y él negó.
–¿Tanto te interesa esa chica? –preguntó, mientras tecleaba algo en el iPad que sostenía–. Acabas de cambiar la grabación del video a otra playa, en el otro lado del mundo –me encogí de hombros, no quería darle detalles. 
Había instalado Tinder unas semanas atrás, y pagado para utilizar el Passport y ocultarme en la aplicación, me había encontrado a varias fans, pero ninguna lograba llamar mi atención del todo. Hasta que vi a Katherine, en sus fotos salía demasiado linda e irradiaba muchísima felicidad, deslice a la derecha y horas después recibí la notificación de que habíamos hecho match. Me encontraba a mí mismo viendo las fotos de su perfil de Tinder cada que demoraba en responder, y cuando menos me di cuenta, ya hablaba con ella en Instagram y miraba todas sus historias. La había stalkeado lo suficiente como para reconocer a sus mejores amigas, su hermano y su madre.
Me estaba enloqueciendo por una chica que solo había visto por fotos.
–Está todo listo –Jeff me miro y yo sonreí.
Agarré mi celular y miré de nuevo las Instagram storys de Katherine, al parecer estaba de fiesta, hace un rato me envió un vídeo, pero yo estaba intentando no parecer desesperado y había decidido verlo más tarde. Eran las 9 de la mañana, sabía que dónde Katherine estaba era de madrugada y probablemente ella estaba disfrutando de su fiesta.
Los chicos se encargaron de mantenerme ocupado el resto de la mañana, entre grabar las demás canciones del álbum, decidir cuáles iba a sacar y cuáles no, se fue el tiempo, cuando me di cuenta ya eran las 5 de la tarde. Decidí responder una de las historias de la morena que estaba robando mis pensamientos y luego ver el vídeo.
–¿Está cantando en español? –me encogí de hombros, no entendía muy bien lo que Katherine gritaba junto con sus amigas.
–Lo más probable es que sí, es latina –respondí y Thom se levantó del sillón donde nos encontramos dejándome solo.
Le respondí y esperé a que Kathe hiciera lo mismo, pero no lo hizo, allá serían poco más de las once de la mañana, y supuse que estaría dormida, la última historia que subió fue cerca de las seis de la mañana allá.
Fui a cenar con los muchachos y luego a un bar, Kathe seguía sin responder, le había enviado un par de mensajes después de mi respuesta a su vídeo y tampoco los había visto.

–¿Qué tanto piensas Harold? –miré a Olivia, la pianista de la banda ocupar un lugar a mí lado en la mesa.
–¿Cómo estás? –evadí su pregunta, y no pude evitar sonreír al ver cómo me reprochaba con la mirada.
–No me cambies el tema.
–Cosas sin importancia –le dije y ella me miró burlona–. Estoy conociendo a alguien.
–Ahora lo entiendo –pasó su mano por mi cabello–.¿Y cuál es el problema?
–No hay problema –musité y ella sonrió de nuevo.
–Entonces no pienses tanto –comentó y asentí.
La cena transcurrió normal, dentro de lo que cabe, porque con los chicos rara vez algo era normal, hablamos sobre los detalles que queríamos poner en el álbum, era demasiado emocionante estar trabajando en mi primer álbum como solista, era mi debut y debía sobrepasar toda expectativa.
–Tu vuelo es en dos días Harry, tendrás tres días con tu latina y luego nos encontraremos en la ciudad que elegiste para grabar –Jeff me estaba dando las indicaciones que necesitaba para la aventura de grabar Sing of the times–. No quiero escándalos, y tampoco quiero que llegues tarde a las grabaciones.
–Está bien Jeff –le respondí–. Nos vemos.
–No olvides imprimir tu pasaje –asentí y bajé del auto.
Jeff me había traído a casa, mi auto estaba en el taller y había tomado un Uber para llegar al estudio en la mañana. Ya iban a ser las doce de la noche, y le mandé otro mensaje a Kathe.

Harry Styles:
Quiero saber cómo despiertas, pero estoy un poco cansado, escríbeme. Ya leí la letra de la canción que cantabas en el video :)

En realidad, no había leído la letra, solo quería presionarla para que me respondiera.
Exactamente veinte minutos después recibí su respuesta, aunque no era suya directamente.

Katherine García D'leon:
Lamento muchísimo que hayas visto todo lo que hice anoche.
Si ya sabes qué dice la canción, debo aclararte que no te la dedico.

Solté una risita cuando leí lo último.

Katherine García D'leon:
Y por cierto, soy Caroline, amiga de Katherine, ella está un poco ocupada intentando no morir deshidratada, pero te manda un beso.

Harry Styles:
Hola linda,
Aprovechando que me respondiste tú, ¿Crees que podrías darme el número de Kathe?

¿Qué se supone que estaba haciendo?
No me dio tiempo de reprocharme más por qué recibí el mensaje con el número de Kathe, inmediatamente lo guardé y le escribí, luego caí rendido en mi cama.

**

En la mañana, en cuanto me desperté le escribí a Katherine, sin esperar ninguna respuesta me duché y bajé a la cocina para preparar mi desayuno/almuerzo, porque ya era bastante tarde.
Recibí varias llamadas, incluso participé en una entrevista virtual sobre el álbum y me dediqué a ver series en Netflix.
Cerca de las 7 de la noche llamé a Kathe, quería decirle que estaría allá.
No le dije que ya tenía todo planeado, solo le dije que iría y que quería verla; a lo que pude sentir cómo ella empezó a hiperventilar y pude escuchar cómo su respiración se pausaba en un intento por regularse.
Para la cena Liam había traído un par de pizzas. Él, Niall, Louis y yo, manteníamos una buena amistad, y de hecho ya era muy normal verlos en la puerta de mi casa sin siquiera avisar que llegarían.
–Lo siento amor, se me olvidó por completo –escuché al castaño hablar por celular mientras se llevaba una rebanada de pizza a la boca–. Ya te dije que lo sentía –volvió a poner la rebanada en la caja y frunció el ceño–. Iré cuando termine lo que estoy haciendo –lo vi rodar los ojos–. Cómo está Bear? –alejó el celular de su oreja–. Hablaremos después, te amo–. Colgó y yo lo miré con una sonrisa burlona. 
–¿Problemas en el paraíso? –cuestioné y el castaño negó.
–Cheryl está un poco ansiosa con la llegada del bebé, y me quiere a su lado todo el día, todos los días –dijo y engullo la pizza–. ¿Dónde está Niall? hace días no se de él –. Habló con la boca llena, sinceramente yo tampoco sabía nada del rubio y tampoco de Louis.
Continuamos hablando un rato más, hasta que Liam decide irse pasada la media noche.
Me quedo un rato organizando el desorden que dejó Liam. Cuando cualquiera de los chicos viene, casi nunca me ayudan a organizar y cuando vienen todos, es mucho peor. Siento mis parpados pesados y esa es mi señal para irme a dormir. Ya mañana terminaré lo que me falte, si es que no arrastro a Liam para que me ayude a recoger su desorden.