008.

43 7 3
                                    


PROV SunYon

Había podido dormir, y aunque no quiera reconocerlo, fue gracias a JaeBum. Me sentía mucho más segura con él cerca, no tenía esa extraña, pero reconfortante sensación, desde hacia muchos años, me relaje unos minutos aún estando entre mis tibias sábanas, la verdad es que me sentía exhausta mentalmente, todo esto era demasiado para mí, pero tenía que seguir, no tenía a nadie y debía reponerme e ir a la universidad.

Me levanté de la cama aún con los ojos cerrados y como de costumbre empece a estirar mis brazos, hice una coleta con mi cabello y para caer en cuenta de que seguía viva cogí mi teléfono y reproduci una de mis canciones favoritas.

Cuando me dispuse a salir de mi habitación un acurrucado JaeBum me lo impidió, se encontraba dormido en el sofá igual que la noche anterior.

-¿JaeBum?.- Dije casi susurrando pasando mi mano por su cabello.-

Seré sincera, quedé sorprendida, no por el hecho de que haya pasado la noche en el sofá, sino porque se veía un poco tierno así, era una imagen distinta de lo acostumbrado, no sabía que podía verse tan lindo dormido.

-Jae.- Hable una vez más un poco más cerca moviendolo un poco.- Despierta.-

Empezó a estirar sus brazos y a bostezar, de a pocos abrió sus ojos, encontrándose con los míos, me separé de él y aún parecía un poco desorientado.

-¿Por qué te quedaste?.- Pregunté viéndolo.-

-Yo no te quería dejar sola.- Me respondió pasando sus manos por su cuello.- Ademas ya era un poco tarde.-

No se dejaba de mover, parecía un pequeño koala, bostezaba y entrecerraba sus pequeños ojitos cada vez que decía una palabra.

-Gracias.- Le dije sonriendo.- Pero creo que llegarás tarde a clases si no sales ahora para tu casa.-

-Oh, está bien.- Me respondió con voz ronca.- Hoy no tengo clases por la mañana, me preguntaba sí puedes hacerme un favor.- Dijo levantándose yendo hacía mí.-

-¿Qu- qué cosa?.- Tenerlo cerca de esa forma me hacia sentir inquieta.- 

-¿Me la prestas?.- Hablo sin dejarme de ver señalando la cama.- ¡En serio tu sofá es muy incómodo!.- Gritó como un niñito pequeño.-

-Es tuya.- Hable riendo imitando su acción.-

Sin decir nada más, camino sonriendo hasta dentro de la habitación y se arrojó sobre la cama.

-Oh es confortable, ah en serio lo es.- Hablaba mientras abrazaba una de mis almohadas.- 

-Yo tengo que ir a la universidad.- Hable mientras me adentre en la habitación.- Puedes quedarte.-

Abrí uno de los pequeños cajones del mueble dentro de mi habitación y sustraje mi ropa interior, de vez en cuando volteaba a verlo, pero seguía en la misma posición, con la almohada entre sus piernas y la otra debajo de su cabeza, abrí otro de los cajones y saque la ropa que iba a usar, y fui hacia el baño.

Lave mis dientes y como técnicamente no tenía tiempo, me adentre en la ducha, tome mi shampoo y lo esparcí por todo mi cabello dando pequeños masajes, lo enjuague y pase a verter un poco de acondicionador sobre las palmas de mis manos y lo aplique en las puntas de mi cabello, lo poco que sobró lo agregue en la parte de arriba para que no se torne grasoso. 

Lave mi rostro con un poco de jabón especial para este y lo deje por unos minutos, luego jabone cada parte de mi cuerpo, abrí la llave y deje caer el agua, eso en especial me relajaba. Al salir, envolví mi cabello en una toalla y procedí a cambiarme, ya que JaeBum se encontraba en mi habitación no podía solo ir y esperar a que no despertara mientras me vestía, así que tome mi ropa interior y luego uno de mis  jeans favoritos y un suéter de rayas horizontales blancas y azules, nunca fue una de mis prioridades vestir de manera exagerada, no me gusta ser el centro de atención, es decir ¿quién puede ser totalmente libre con todas las miradas encima?, salí del pequeño baño, y fui hacia mi habitación.

Él seguía dormido y solo había cambiado ligeramente de posición, sin hacer ruido cogí mi cepillo y peine mi cabello, apliqué crema en mi rostro y un poco de bálsamo hidratante en mis labios, ya que tienden a estar secos, tomé mis tenis y el bolso que estaba junto a la cama y salí de ahí cerrando la puerta.

(...)

PROV JaeBum

Desperté y todo se encontraba en silencio, ¿ella no estaba?, me quede viendo el techo de la habitación por unos segundos, minutos tal vez, ese sofá en verdad había sido incómodo, realmente pensé en irme en cuanto se durmiera, pero no lo hice, aunque sepa defenderse sola, si esas personas regresaban no iba a poder con ellos,  así que le envié un mensaje Hanna, explicándole, suena tonto lo sé, ella tan solo tiene 17, pero es muy madura para su edad, o tal vez yo soy muy imprudente y en algunas ocasiones infantil, pero estaba seguro de que mi hermanita le explicaría a mamá, además tengo 26 años, que duerma una noche fuera de casa no es algo tan sorpresivo.

Me puse de pie y ordené su cama, coloque las dos almohadas una a cada lado y salí de la habitación. ¿En verdad no estaba? Solo recuerdo haberle dicho que me dejara usar su cama, sentía mi cuerpo adormecido en ese momento, solo quería poder dormir plácidamente y poder estirarme del todo.

Nadie respondía, toque la puerta de lo que supuse era el baño, pero nadie contesto. Entre al lugar y en verdad era un completo desorden, los productos que tenía, aunque eran pocos, estaban regados por todo el lavamanos, baje mi mirada a la cesta de ropa encontrándome con unas bragas, diría del mismo tono de su piel, ordene un poco y lave mi cara, salí de ahí y cerré la puerta detrás de mí.

Entre a la cocina y vi que todo estaba tal y como anoche ¿acaso no desayuna? Fui hacia la mesa y recogí los platos que estaban en ella, en el otro extremo había un pequeño papel color rosa, lo tomé y no pude evitar sonreír.

"Gracias una ves más por quedarte Im, me ayudó mucho. No eres tan imbécil como supuse, ósea si lo eres pero no en la magnitud que creí, después de todo no fue tan malo conocerte. ¡Por favor ve a la universidad y hazle caso a tu hermanita, nos vemos!"

Deje el pequeño trozo de papel en su lugar y lleve los platos a la cocina, ¿en verdad puede ser tan desordenada? Lave todo lo que se encontraba sucio y lo ordené,  preparare un poco de comida con lo que ella tenía en casa, supuse que si no desayuna, lo único que comerá al llegar será ramen, decidí volver a prepararle bibimbap y mientras el arroz se cocinaba, cogí unos cuantos huevos para hacer gyeranmari, que es básicamente omelette de huevo, pero enrollado, agregue los huevos, un poco de leche, vinagre, sal y pimienta en un bowl, lo mezcle bien hasta que se incorporen los ingredientes, agregue también unas verduras, y vertí la mezcla en el sartén el cual ya estaba en la estufa, el secreto es que las orillas estén bien cocinadas para así poder doblar de a pocos, en total lo hice cinco veces y deje que se fría hasta que quede dorado.

Mientras esperé que el arroz y la mezcla en la sartén se cocinen, busque un bolígrafo y papel para indicarle que había comida, busque en las gavetas del mueble que estaba en la sala de estar pero no encontré lo que buscaba, entre a la habitación y busque hasta encontrar una pequeña libreta color azul, la cual tenía un lápiz al lado, los tomé y volví a la cocina.

Apague la estufa y deje que el gyeranmari se enfrié, cogí nuevamente la libreta y escribí sobre una de las hojas, junto al mensaje en la parte inferior, agregué mi número, rasgue el papel blanco y lo dejé donde ella había dejado la notita.

Una vez cocido el arroz, dejé que se enfriase y pase a mezclar los ingredientes para el bibimbap, al fiel estilo de mi abuela, pues no conocía otro, vertí el arroz en un recipiente y coloque la mezcla de vegetales sobre el, coloque el gyeranmari  ya cortado en otro recipiente y los guarde en la nevera. Lave todo lo que había ensuciado y ahora si el lugar se veía como una cocina.

Cogí su notita, la guarde en el bolsillo trasero de mi pantalón y salí de su casa. Espero que SunYon coma bien cuando vuelva.

-------------

Hola Bubus!

Espero les guste, muchos besitos!

INSENSIBLE; IM JAEBUMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora