Mi nuevo comienzo

cap 7

Hoy cumplia seis, el tiempo paso muy rápido, me habia vuelto amigo del principe ya que mi presencia era muy solicitada al parecer tenerme cerca era muy emocionante, según sus palabras. En cuanto me tuvo completa confianza comencé a llevar a mi hermano ya que el se acercaba mas a su edad me parecio buena idea.

Mar- Rei debes darte prisa - grito desde afuera tocando la puerta, Haru me ayudaba a vestirme

Rei- solo ve y dile que la traigan aqui

Mar- no soy tu mensajera - suspire en cuanto escuche sus pasos alejarse

Maria y Jack vinieron por mi cumpleaños, aunque la primera vino a ver más que nada a mi hermano. Me sorprendio un poco cuando me entere de que a ella le gustaba, fue un accidente asi que nadie más lo sabía.

Ha- esta listo - se alejo juntando todos mis libros esparcidos por el suelo

Ku- asi que disfruté la visita de su madre - imito la accion de Haru dedicandome una sonrisa antes de salir

Habia tardado meses en controlar el poder del anillo, aunque Kuro lo sello para que mantuviera bajo control mas de la mitad, entendia que mi cuerpo aun no soportaria tanto poder y es por eso que me centre en mejorar mi resistencia.

Algo que no me agrado fue mi delicadeza, no espere que estar encerrado desde que naci fuera tan perjudicial para mi resistencia. En la academia me saltaba esas clases ya que tenia otras pero ahora que queria levantar mi resistencia me di cuenta de que no tengo. Me canso con facilidad al correr, despues de hacer mis tipicos ejercicios de mi antiguo mundo quedó exausto cuando en realidad solo deberia ser algo que deberia hacerme sudar como mucho.

Recordar eso me ponia de malhumor pero debi recordar que el cuerpo de un noble es muy diferente al de un chico normal en especial el mio al parecer todos los nobles cuando somos pequeños sufrimos de una enfermedad que nos debilita, segun una leyenda es un castigo de la diosa de este lugar debido a un pecado que cometimos, el mio al rebosar de poder era peor simplemente yo no me habia dado cuenta hasta hace poco.

- Rei

En cuanto mi madre entro a abrazarme deje de lado mis conflictos interiores y correspondi a su muestra de cariño hablamos mucho tiempo y una hora antes de que se fuera le regale un vestido al principio no me respondio.

Rei- mamá ¿no te gusta? - aprete el vestido contra mi pense que le gustaria pero al parecer me equivoque

- no cariño, me encanta - tomo el vestido en brazos observandolo detenidamente - ¿como lo conseguiste? - la mire con confusión

Rei- ordene a mi sirviente que comprara uno que habia visto en una de las tiendas - le di una suave sonrisa esperando que eso la calmara

- ¿tu saliste? - asenti - pero creí que

Rei- fue una ocasión especial - me acerque lentamente tratando de tomar sus manos lo cual me costo - te vi pero no los queria interrumpir por eso di media vuelta y volvi pero el vestido me gusto asi que te lo compre

- Rei - su rostro mostraba una expresion triste y su vos era baja - lo lamento tanto cariño

Rei- no, yo lo lamento - mostró confusión - por ser tu primer hijo y no estar a tu lado - solte sus manos alejandome y tomando rumbo hacia mi cama - por hacerte venir aqui por que yo se que mi padre te engaño con mentiras y que yo fui fruto de eso pero - tome los zapatos que estaban debajo de la almohada - tambien lo lamento por que siento felicidad al hacer que tu vengas aqui

- cariño - tomo los zapato dejandolos delicadamente sobre mi cama - mirame - dude un momento pero la mire me asuste cuando la vi llorar - mi primer hijo - posó su mano en mi mejilla dando leves caricias - mi adorado hijo me alegra que aun con todas estas personas seas alguien tan bondadoso