Un Juego de a Dos

Capitulo 28

Terminamos de cenar y todos hicimos un brindis en agradecimiento a esta cena para que se vuelva a repetir.
Rossi brindó por la felicidad de todos nosotros, recordando el deseo de mamá y Papá le dio la bienvenida a Peter.
Después Rosa sirvió el postre, yo hablaba con Euge como si nunca hubiera pasado nada entre nosotras. Papá, Peter, o "Pedrito" y Nico, estaban hablando de autos, de empresas y bla. Rosa nos explicaba lentamente la receta de mi torta preferida... y asi la noche pasaba.
Ya casi a las cuatro de la mañana cada uno estaba de la mano de su pareja entre un silencio relajante, solo se escuchaba el ruido de la pileta actualizando el agua y los pequeños grillitos de esta noche espectacular que se dibujaba arriba de nosotros.
Papá fue el segundo que se fue a dormir y se despidió de Euge y Nico. Rosa se había ido un rato antes, ya que ella estaba de vacaciones, pero como era parte de la familia tenia que estar en el asado. Así que después de tanto tiempo, quedamos nosotros cuatro, Euge, Nico, Pitt y yo.

- Nico: qué genio tu viejo, eh

- Lali: si...

- Euge: es un capo, la verdad que no se a ustedes pero a mí me hizo abrir los ojos, y por eso quería pedirles perdón a los dos por todo lo que paso.

- Nico: si yo también pido perdon, a los dos, me enamore de Euge y bueno, no sé, se fue dando todo así...

- Lali: por mi parte está todo bien, y yo también pido perdon por todo esto...

- Peter: esta todo bien, yo también pido perdón... las cosas se fueron dando así.

Todos sonreímos... fue una noche totalmente inesperada pero perfecta.

- Euge: ¿ustedes están viviendo juntos?

- Lali: mas o menos, vamos y venimos, pero se podría decir que si (mire a Peter con una gran sonrisa)

- Peter: ¿ustedes?

- Euge: yo me mude a lo de Nico la semana pasada, porque a mi me quedaba lejísimo mi casa, así que ahora vivo acá

- Lali: genial! Vamos a estar mas cerca!!

- Euge: sí! (con una gran sonrisa)

- Nico: ahora no nos van a dar ni bola (le dijo a Peter)

- Peter: es verdad (negó con la cabeza para que Euge y yo empecemos con la risa)

La cena llegó a su fin cuando vimos que estaba amaneciendo. Euge y yo despidiéndonos con un gran abrazo, realmente necesitaba una amiga, alguien a quien contarle todo! Me hace feliz haberla recuperado.

Así pasaron meses, seis en total, Peter estaba viviendo con nosotros prácticamente, aunque cada tanto recurríamos al departamento de él, por obvios motivos.
Papá seguía en casa, pero no por mucho tiempo más. Cada día se llevaba mejor con Peter, amaba esa relación. Rossi ya estaba en casa con nosotros hacia cuatro meses cuando volvió de sus merecidas vacaciones, y nos ayudaba demasiado, como siempre lo hizo.
Euge venia casi todos los días a casa, nos juntábamos a desayunar, en la casa de ella, o en la mía, emprendiendo distintos cursos a distancia de diseño e indumentaria, como siempre soñamos. Pero en estos momentos, Nico pudo salir de vacaciones así que se fueron a Miami, a pasar unos merecidos días de descanso.
Papá me había dicho que se iba en la semana en la que estábamos viviendo, y el viernes de la misma nos citó en un restaurante para que almorcemos y hablemos. Llegamos, pedimos algo de menú, y empezamos a almorzar...

- Papá de Lali: chicos mañana tempranito me voy. No me fui antes porque quería dejar preparado todo

- Peter: ¿qué cosa?

- Papá de Lali: a vos la empresa, confío plenamente en vos, ¿sí?

- Peter: la empresa es tuya, yo solamente voy a cumplir con lo que me pediste y te agradezco por confiar en mí... espero estar a la altura