10 pasos para enamorarte [H.S]

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Por si acaso, he subido un capítulo antes (dos en un día), por si wattpad los salta directo a este.

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''Mirarlo a los ojos y seducir''

Y aquí iba, pensando en mi torpes tácticas de seducción, porque sí, eran muy ridículas y no sabía cómo en verdad hacerlo. La tonta lista decía ''mirarlo a los ojos y seducir'', pero yo no podía mirarlo a los ojos por tantos segundos. ¡Era Harry!, yo no podía. Sus ojos me derretían en solo segundos. 

Caminé con inseguridad hasta su puerta, tocando levemente, pensando en que aún tenía oportunidad para correr de ahí. Harry ni siquiera se daría cuenta, estaba a poca distancia de la entrada de su jardín, podía correr aún, pero me delataría su portero. 

Dios, ya no podía hacerlo. 

—Hola pequeña —saludó al abrir su puerta—. No sabía que vendrías... —miró sobre mi hombro, como si hubiera estado esperando a alguien más. 

Parecía que Harry en verdad no me esperaba porque aún se mantenía sosteniendo la puerta. Me sentía algo desconcertada. Sabía de ante mano que cada vez que nos veíamos, avisábamos un par de días antes, pero no esperaba que él se mantuviera mirándome, esperando a que diera un explicación certera de lo que en verdad hacía ahí. 

—Oh, mm... —hinqué mis hombros pareciendo normal—. Venía a verte, ya que luego viajarás —sonreí algo incómoda—. ¿Estás ocupado?, puedo irme. 

Él despabiló en ese minuto, dándome acceso a su casa. 

—No, adelante. Disculpa —sonrió.

Ingresé sin quitar mi abrigo, ya que estaba sintiendo que era una intrusa en su hogar y que debía en verdad irme de ahí. Esto no estaba saliendo como esperaba, de como lo había planeado. Quizá esa ropa que llevaba debajo tampoco funcionaría. 

Oí como la puerta se cerraba y yo aún continuaba de espaldas a él viendo la sala, sin querer avanzar más allá. 

—¿Cómo estás? —preguntó pasando por mi lado—. ¿Quieres beber algo? —me miró mientras se detenía a medio camino de la sala—. ¿Y por qué estás parada ahí?

—Yo... —caminé hasta él—. Lo siento, creo que es mejor irme. 

Enarcó una ceja. 

—¿Por qué? ¿ocurre algo?

Froté mi brazo mirando su pecho. No quería ver su rostro. Estaba nerviosa. 

—No seas tonta Corina, vamos a la sala. Además, tienes razón, pronto me marcharé y no nos veremos por un buen tiempo —dijo retomando el camino hacia la sala—. ¿Quieres vino? —preguntó a la vez que llegaba a un pequeño bar que tenía en una esquina, tomando un par de copas. 

—Está bien. 

Después de todo, creo que necesitaría más de una copa para hacer lo que pretendía. Y, no quería estar tan sobria para cuando él me rechazara. La idea de este paso era ver si Harry sentía algo de atracción, y si era así, tal vez pronto podría gustarle y... quizá enamorarse de mí. 

—Toma. 

Vi la copa de vino y luego su mano. Tragué saliva recibiéndola mientras sentía como pasaba rozar sus dedos largos y anillados. Sabía que él no había tomado importancia de esto, pero yo sí, ya que podía percibir un revoloteo en mi estómago.