Luther acaba de romper su cuarto pincel. Suerte que tiene más control sobre su ira que Diego, o ya habría destrozado el lienzo y desperdigado la pintura por todos lados.
El encierro se está volviendo asfixiante y lo ha atrapado solo con sus pensamientos. La luna también era solitaria, pero al menos ahí tenía un propósito. Ahora, aquí, no puede ser un héroe o un astronauta, y no sabe si hay algo más en él en lo que pueda ser bueno.
—Creo que es la forma para los trazos —dice una voz, suave y tímida a sus espaldas.
Luther se tensa al oírla y voltea lentamente, aunque preferiría no hacerlo. Es Vanya.
—¿Qué? —pregunta suavemente.
Vanya y él no han hablado desde que se mudaron todos de vuelta a la casa. Tal vez “hola” ocasional o un “¿me pasas la sal?”, pero eso ha sido todo. La tensión entre ellos es palpable. Luther se disculpó por encerrarla, y sin embargo no siente que sea suficiente, no siente que merezca hablar con ella.
Vanya entra lentamente en la habitación.
—¿Puedo? —pregunta, estirando su mano para tomar uno de los dos pinceles que quedan. Luther asiente y ella lo toma—. Pienso... Pienso que pintar es como tocar el violín, se necesita delicadeza y firmeza a la vez para lograr el trazo o la melodía correcta.
Ella le muestra la forma en que está tomando el pincel, sosteniéndolo con tres dedos.
—Así. —dice. Luego baja la mirada casi avergonzada—. Digo, eso creo yo, no tienes que escucharme, yo no...
Luther posa suavemente su mano sobre el de Vanya y ella se estremece un poco por el contacto, pero no se aparta.
—Está bien, Vanya, tu eres la experta en esto, te seguiré.
Ella sonríe ligeramente. Luther toma el pincel de la forma en que ella le indica y...
—¡Hey! ¡No se rompió! —exclama, alegre, aunque al instante se cohibe.
—Eso es, creo que lo tienes —ella felicita y parece querer volver hacia la puerta para marcharse, así que Luther decide que, si va a hablar, debe ser ahora.
—Vanya yo... Lo siento.
—Lo sé —ella responde, sonrisa a medias.
—¿Crees... Quieres tocar el violín aquí? Es una habitación grande y podríamos...
Vanya lo mira sorprendida. Eso es una muestra de confianza enorme viniendo de Luther, sobretodo después de lo que pasó la última vez que tocó el violín y Luther estaba allí (casi fin del mundo).
—Eso me gustaría —responde finalmente, algo más relajada—. Traeré mi violín.
Luther sonríe comienza a untar su pincel en la pintura color plateado.
Les queda aún mucho camino por recorrer para aprender a ser buenos hermanos, pero éste es definitivamente un comienzo.
....
Klaus saca de la biblioteca todos los libros de cocina y pastelería que puede encontrar. Recuerda su tiempo en rehabilitación y la importancia de encontrar un pasatiempo, y ahora lo entiende.
Luther compró los ingredientes que le pidió en proporciones bastante más grandes de lo que pretendía, pero ¡hey! ¿más es mejor?
Todo éste tiempo, Ben lo ha seguido, mirando con curiosidad sus movimientos. Normalmente, cuando va a la biblioteca es por libros para Ben, o por libros de algún idioma que Klaus aún no sepa.
ESTÁS LEYENDO
Locked Up | TUA | PAUSADA.
Fanfiction«A veces quedarse en casa es la mejor manera de salvar el mundo» Los Hermanos Hargreeves están atrapados en la mansión, todos juntos, durante el cierre mundial después del estallido de COVID19 que estamos experimentando actualmente. ¿Cómo lo llevará...