Bienvenidas y bienvenidos a un nuevo reto semanal de Ciencia Ficción. En esta ocasión queremos explorar el universo de las utopías, que falta nos hacen en 2020. Como siempre, dejaremos unos disparadores entre los cuales tendréis que seleccionar uno, el que os servirá para desarrollar vuestro relato. Para quienes lo necesiten, las bases generales de participación de estos retos se encuentran en el primer capítulo (Introducción y bases generales).
Para participar, ya sabéis que debéis dejar el link de vuestro relato en un comentario. Para este reto, vuestro relato no debe superar las mil palabras. Ahora sí, os dejamos los tres disparadores sobre la temática de esta semana.
Disparador 1: La línea entre la utopía y la distopía es prácticamente inexistente. En sólo un segundo las cosas cambian. Lo que estaba bien puede arruinarse y lo que estaba arruinado puede resurgir de sus cenizas. En la Ciudad Refulgente eso no ocurre. Todo es maravilloso, no hay enfermedad ni envejecimiento, sólo una vida larga y próspera, justa e igualitaria. En un punto como ese puede parecer difícil prosperar, pero la Ciudad Refulgente nunca será suficientemente perfecta. En una utopía como ésta, ¿qué puede seguir siendo necesario para la Humanidad? Tú tienes la respuesta y esperas que gracias a eso, la Ciudad Refulgente te convierta en una leyenda.
Disparador 2: Un mundo aparentemente perfecto fue finalmente erigido. Cada persona actuaba según las normas, las obligaciones, la predilecta perfección. Todos parecían cortados por la misma tijera, como si fueran dueños de un alma clonada de forma masiva. Portaban distintas caras, distintos gustos y distintos sueños; seguían siendo personas distintas la una de la otra, sin embargo, apuntaban hacia una misma dirección. Sin conflictos, el mundo conoce la paz por primera vez. ¿Será esta paz una mentira o una genuina muestra de la evolución humana? ¿Será posible que algo falle en una sociedad tan perfecta?
Disparador 3: Finalmente, lo logramos. Un fármaco revolucionario parece ser el fin para todo el dolor y la miseria humana. El sueño de los médicos, el deseo imposible de todos los que, por tantos años, lucharon por erradicar el hambre. Amanecer, un fármaco con la milagrosa capacidad de erradicar las enfermedades, el hambre y detener el envegecimiento. Claramente, tiene una limitación, sólo dura 24 horas. El mundo ahora gira alrededor del "Amanecer". Las fábricas de comida rápida cerraron para producirlo, la tierra finalmente descansa tras años de ser explotada para alimentar a una población desmedida. La comida se volvió innecesaria, las cremas antiage superfluos y la obesidad, junto con otras enfermedades relacionadas a la alimentación, fueron erradicadas del planeta gracias al milagro del amanecer. Finalmente, la humanidad venció a su propio enemigo, la mortalidad. ¿Qué depara el futuro para una inmortal y aparentemente perfecta humanidad?
Mucha suerte a todas las personas que participen. Esperamos sus relatos.