Drabbles Sakura

ShisuSaku

"Hasta que la muerte nos separe"

Siempre fué catalogada por los demás como una joven bella, decidida, intrépida o en pocas palabras mujer ideal. La que nunca sufre, la que nunca carece, la que nunca falla.

Sin embargo aquí se encontraba, años después casada y con la certeza de no ser nada de aquello una vez proclamaron.
Ella llorando con el corazón apunto de estallarle del pecho, o era que su caja torácica se comprimía bajo su piel y sentía la falta de aliento. En realidad no lo sabía y en estos momento sería lo último en lo que estuviese pensando. Lloraba amargamente deslizándose contra la pared de aquella habitación, sentía los dedos de sus manos fríos y temblorosos bajo sus guantes de cuero.

Se arrastro hasta la cama y se acercó a su esposo que parecía completamente dormido, sollozando se aferró a su cuello y besó sus carnosos labios que se sentían ligeramente tibios eh inevitablemente recordó como fue que empezó todo lo que hoy la traía hasta aquí
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- ¡No tienes idea de con quién te están comprometiendo Sakura! ¡Te puedo apostar la fortuna de mi familia a qué Shisui Uchiha nunca cambiara!-. Fué el comentario que Ino le dió al enterarse del compromiso que los Uchiha/Haruno habían acordado para sus hijos.

- El amor puede cambiar a cualquiera-. Susurró apenada.

- ¡Ja!...como si eso fuera a suceder-. Refunfuño achicando los ojos ante la defensiva de su amiga- Sakura. ¿¡Acaso tú lo quieres!?.

Shisui. El perfecto play boy, un salvaje semental azabache que toda mujer deseaba domar. Sakura lo sabía, sabía de su larga lista de conquistas, de su exagerada extravagancia a la hora de andar, esa fiereza de ojos onix y pestañas apantallantes que lo hacían embriagante mente prohibido. Y aún con todo aquello le amaba hasta los huesos...una lastima que para él no fuese así.

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Se sintió la mujer más importante del mundo cuando ambos dijeron "si" frente al altar, su corazón se regocijó cuando el palpo con sus manos su cintura y degusto el sabor de sus labios, aquellas cosas que eran tan insignificante para él para ella eran una adicción en procesó.

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Te miro incrédulo cuando le confesaste tu virginidad y te sentiste estúpida por ello, tus mejillas se tomaron de rosa, él jadeó de impaciencia y se acercó a tí.

- Eres demasiado ingenua-. Beso tu cuello haciendo a tu cuerpo tiritar por su toqué- Pero a mí me gusta follar duro!.

Saco a tirones aquel pequeño vestido de seda, te tiro en la cama mientras se sacaba la ropa, tocó tu cuerpo con descaro, querías que tu primera vez fuese especial; que fuese como en aquellas novelas románticas en dónde él hombre le habla de amor y poesía al oído a su mujer. Pero tú solo recibiste una embestida burda que te hizo llorar y aferrarte a su espalda, de su boca solo salieron jadeos y maldiciones en cuanto te embestía.

- ...Te amo-. salió más como un sollozó, pero lo dijiste. Por qué en el fondo tratabas de convencerte de que sentía lo mismo pero no le era fácil expresarlo.

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Shisui jamás te respondió ni con un diminutivo de aquello, solo gozó de tu cuerpo y alma, hizo y deshizo lo que le vino en gana no solo el día de tu boda.
Durante todo el tiempo que le vino fué tan igual a escepcion tuya claro, tú te enamorabas cada día más desde que salió de su boca.

- Te quiero Sakura.

Para ti fué la clara señal de amor, creíste que te necesitaba tanto como tú a él, por qué aúnque la gente dijera que era un infiel, mujeriego, egoísta tu le amabas. Defenderias su amor a capa y espada. Se ha dicho desde tiempos inmemorables que no hay peor ciego que él no quiere ver...

¿Por qué? Porque en el fondo de tu alma lo sabías. Sabías que te engañaba, se acostaba con otra mujer ala que le daba lo que tú casi implorabas, otra que no te dejaba entrar en su mente, mucho menos en su corazón...le daba su amor.

Lloraste por tu desdicha. cómo todos aquellos que al igual que tú nunca serán amados de la misma manera en que quisieran, ¿por qué? ¿Qué eh hecho mal? ¿Porque no puedo puede amarme?
Una y mil preguntas del ¿Por qué?.

Aquello te llevo ala depresión, tus ojos y piel perdieron el brillo, solo tenías dolores y falta de apetito, claro que jamás te abandonaban las ganas de romper a llorar cada vez que el se iba.
Porque sabías que ese viaje de negocios alas afueras de la ciudad tenían nombre y apellido, uno de aquellos episodios te llevo al hospital y nuevamente allí lloraste.

- Tiene que cuidar de usted señora Uchiha, su salud y la de su bebé están de por medio.

- ¿B-Bebé?.

- Si. Tiene usted tres semanas de gestación, felicidades!.

El paroxismo en tí cambio, querías que Shisui lo supiera cuánto antes, tendrian un hijo. Le marcaste pero jamás te levanto la llamada, lo pensaste durante horas y llegaste a la conclusión de decirle en persona que sería papá. Además era tiempo de atar cabos sueltos.

Eran días fríos, te decidiste por apaciguarle con una gabardina y guantes de cuero negros sobre tu ropa. Con ayuda del GPS de sus autos pudiste saber dónde estaba. Un departamento en una zona turística de aquella ciudad vecina, el lugar era justo como lo esperabas viniendo que alguien como el, alejado de los demás sin tener que pasar por algún tipo de resepcion.
Quizá fue obra de Dios verles a él y a su amante asomarse por aquel balcón, tu mentalidad fue endeble y tú corazón lóbrego por tanto sufrir. Subiste a él apartamento número ocho y tocaste a la puerta, te miro estupefacto y tú solo pasaste de él adentrandote en el sitio solo para ver aquella mujer de cabellera negra que usurpaba tu lugar en su cama, en su mente, alma y vida.

- Shisui, ¿Qué hace ella aquí?-.cuestiono aquella tipa.

- La pregunta es estúpida-. Respondiste- Sabes creí que por lo menos la mujersuela está era mejor que yo...

Le viste y el no te sostuvo la mirada, ni siquiera tú sabías porque todavía no rompiar a llorar, estabas inmutable.

- Eres mi esposa pero no la única-. Se metió en la cama junto aquella mujer frente a ti.

- Tres semanas-. Hablaste fuerte y claro, solo te miro confundido- Soy única por qué soy tu mujer y llevo a tu hijo en mí...tres semanas de embarazo, es una lastima que no estarás ahí para conocerlo.

Un arma salio de tu cartera, la primera bala dió en su pecho junto a otras dos en su estómago, se desangraba ante tus ojos. lo mataste por qué para ti si fue real el "hasta que la muerte los separe" sin dar tiempo a gritos disparaste a esa arpía en la cabeza matandole instantáneamente.

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Y aquí estabas llorando por qué ya no había marcha atrás, besaste sus labios con desesperó, te levantaste y pusiste el arma en las manos de aquella mujer. El arma no estaba registrada, no podrian conectarla contigo, limpiaste tus lágrimas y saliste de aquel lugar con un vacío en el pecho que después era sustituido por la calma. Ya no sufrírias por amor...

Ahora solo debías llegar a casa y esperar a que la policía llamase diciendo que tú esposo había Sido asesinado por la suicida de su amante.

Llorarias en su funeral y te sería dado todo lo suyo, dinero, acciones, propiedades para el hijo en tu vientre.

"𝐸𝑠𝑎 𝑒𝑠 𝑡𝑢 𝑣𝑖𝑑𝑎...𝑆𝑎𝑘𝑢𝑟𝑎 𝐻𝑎𝑟𝑢𝑛𝑜 𝑣𝑖𝑢𝑑𝑎 𝑑𝑒 𝑈𝑐ℎ𝑖ℎ𝑎..."

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Correjida√

Espero les guste