Dulce venganza

"Parecía un imán de problemas"

-¡¿Estás loca?! ¡¿En qué mierda estabas pensando?! ¡En toalla, Sam, en toalla! -Me gritó Julie exasperada.

¿Les doy un consejo? Nunca combinen rabia, semi-desnudez y chicos con las hormonas alborotadas en un camarín, nada saldrá bien de eso.

-Cálmate, Julie, aquí yo soy la única que salió perjudicada, ahora todos conocen hasta mi alma. 

-¡Y en toalla! -Y seguía... Estaba loca. 

-Ya vámonos de aquí, no quiero toparme con alguno de esos chicos. -Le dije arrastrándola del brazo hasta la salida. Definitivamente, éste no era mi día.

-Hola, bonita. -¡Joder! !Los planetas se alinearon para que este día se pusiera peor! 

-Aléjate, me traes mala suerte. -Le dije haciendo una cruz con mis dedos, que horror, por su culpa yo parecía un imán de problemas. Saqué la camisa que me había prestado de mi mochila y se la arrojé en la cara. -Adiós. 

-Le dije para luego pasar por su lado y percinarme, no quería más problemas.

{...}

Me encontraba camino hacia mi casa en compañía de Julie, se quedaría a dormir y ella era perfecta para que me ayudara a planear mi venganza hacia Luke.

 15 minutos más tarde...

-¡Esto no se va a quedar así, Julie! -Le grité paseandome por toda mi habitación, Julie se encontraba sentada en mi cama con su cabeza apoyada en su mano mirándome con expresión aburrida.

-¡Tengo una idea! -Dijo saltando de la cama.

-Sí, yo también, mira, primero tenermos que ir a la tienda y comprar cloroformo, vamos a su casa y mientras está desprevenido le ponemos el paño en la boca, luego lo tiramos por una zanja y que se lo coman los perros, y claro después de nuestro exitoso homicidio vamos a celebrar y a hacer la danza de la lluvia para que su cuerpo se haga humus y no puedan allar el cuerpo. -Le conté mi espectacular plan. Ella me miró alzando una ceja, como preguntándose a si misma el por qué de mi rareza.

-Yo iba a decir que le podríamos poner una araña en su casillero, es menos... -La interrumpí bufando.

-Ay por Dios, Julie, no seas tan sádica por Dios, a lo mejor el pobre es alérgico a las arañas o qué se yo. -Le dije, era verdad, yo prefería mi plan. -Hagamos votación. -Sonreí. -¡¿Quién vota por el plan de Julie?! -Grité como si hubiera más gente en mi habitación. Esperé unos segundos y luego volví a gritar. -¡¿Quién vota por el plan de Sam?! -Pregunté alto. -¡Yo! -Grité como respuesta. 

-¡Eso no es...! -La volví a interrumpir.

-Gané. -Sonreí maliciosamente.

{...}

-Gracias. -Le dijo Julie a la cajera de la tienda regalandole una sonrisa. Ambas salimos de ahí y yo la miré seria, no habíamos ido a comprar cloroformo, habíamos ido a comprar una jodida araña para el jodido casillero del jodido Luke.

-Éste, definitivamente, es el plan más aburrido en la historia de los planes aburridos. -Le dije, era la verdad, prefería mi plan, era hermosamente perfecto.

-Samantha, querías que lo asesinaramos. -Dijo como si fuera lo más estúpido del mundo.

-No exageres, Julie, yo solo quería... Matarlo y hacer que su cuerpo se convirtiera en humus. -Le respondí pasandome una mano por mi pelo. -Además, si lo dices de esa forma, con la palabra "asesinaramos" suena mal.

-Estás loca. -Negó con la cabeza.

Al día siguiente...

-¡AAH! -Escuchamos el grito de Luke (muy masculino, por cierto) al abirir su casillero, esta mañana le había puesto la araña suelta en su casillero, supongo que le tenía fobia o algo así, por la forma en la que chilló. Fuimos corriendo con Julie, moría de ganas por ver su expresión en la cara. 

-No eres tan rudo ahora. -Le dije divertida.

-No me asusté...sólo recordé que había...olvidado mi tarea. -Dijo algo nervioso, observando como todos se acercaban a reír. 

{...}

Trataba de prestar atención a la clase de biología de la señorita Thomilson cuando noté que alguien me observaba a lo lejos del salón, no pude evitar ponerme nerviosa, así que simplemente lo ignoré, está más que claro qué cerdo, psicópata y acosador era.

 -Muy bien chicos, formaremos parejas. -Rayos, la única clase que no compartía con Julie y nos hacían hacer parejas. Observaba como todos formaban parejas y yo seguía sin tener una. 

-¿No está la opción de trabajar solo?. -Le pregunté a la profesora Thomilson.

-Perdón Samantha, pero se necesita ser de a dos para este trabajo, ¿No tienes pareja aún?

-No.

-¿Alguien más no tiene pareja? -Se dirigió mirando a mis compañeros. Cuando una mano al fondo de la sala se alzó. 

-No, no, por favor no. -Hablé por lo bajo.

-Yo señorita. -Maldito, lo miré y el me observó con una gran sonrisa en su rostro mientras yo lo fulminaba con la mirada. Se acercó a mi, con la sonrisa de oreja a oreja que aún no se le quitaba.

-Aún no me has dicho tu nombre, bonita.

-No lo sabes y nunca lo sabrás. -Lo miré con una falsa sonrisa. -Y te aseguro que no es ni "bonita", ni "preciosa" y menos "pálido trasero". 

-¡Guau! además de bonita, ruda.

-Sí, y si no dejas de molestarme en este mismo instante mi pie pateará tu bello cu...-Iba a terminar la frase cuando la profesora nos hizo callar.

-Esto no acaba aquí. -Le dije molesta.

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