7.- Rompamos las reglas

5 0 0
                                    

3 años antes
19 años


al fin terminamos la secundaria, vamos derechito a la universidad, esto si que es una locura, hace una semana fue la graduación, me divertí como nunca marco asistió ya que su fiesta será este fin de semana, aun no me invita a su fiesta pero tengo la esperanza, espero me invite pronto porque no tengo nada que ponerme y no pienso comprar algo si no asistiré, Gaby por otra parte está emocionada con la idea de ir a la universidad aunque no estaremos juntas puesto que nuestras carreras son distintas, pero llegamos al acuerdo de vernos siempre que tengamos un hueco, marco lo logro, irá a la universidad que siempre soñó con una beca completa, si es que no arruina su camino, pablo se irá a otro estado con la promesa de volver los fines de semana con nosotras, esperemos todo salga como queremos.

-ava... —escuche a mi madre gritar desde abajo.

me dispuse a ir y marco estaba con ella, solo le sonreí antes de correr y lanzarme a su cuerpo.

-bueno los dejo, pórtense bien —cuando marco me bajo mire a mamá y se le veía feliz, le encantaba marco.

-hola, como has estado? —pregunto atrayéndome y olfateándome como cachorrito.

-umm.. —dijo oliendome como siempre— coco, me encanta. —nos carcajeamos y luego nos fuimos al sillón.

-estoy bien, que haremos? —nos estábamos acurrucando mientras el me pasaba la mano por el cabello esperando su respuesta.

-quieres helado? —lo miré y asentí me encanta el helado. -pues vamos, mamá me prestó el auto. —giro las llaves en sus dedos, pero ahora sí que era normal y legal, después de que pasara su examen se fue el miedo a que nos atrapará la policía.

le grite a mi madre que saldríamos y nos fuimos a una pequeña heladería cerca, no era muy grande pero los helados eran los mejores, aunque claro ningún helado era malo para mí.

nos bajamos del auto y para mí sorpresa me tomo de la mano, se había hecho costumbre una que no me molestaba, entramos y me senté junto a la ventana esperando que el terminará de pedir y se me uniera, no pasó mucho tiempo el local estaba casi solo a esta hora de la tarde.

-volví —sonrió dejando mi helado mediano en la mesa.

-eso veo —le guiñe un ojo y comencé a devorar esta delicia divina, solté un suspiro y cerré los ojos con el primer bocado —pero que es esto tan delicioso que me has traído, acaso quieres enamorarme de este sabor? —lo deje que se riera a sus anchas y seguí devorando mi helado como loca.

-es de frambuesa con galletas, no enloquezcas que tiene algo de alcohol. —me guiño y siguió con su helado de coco, en serio tenía una adicción al coco.

-entonces quieres emborracharme eres un mal amigo, ahora debes pagar —le arranqué su helado y le di el mío.

-ey es mi coco. —alcé mis hombros sin importarme, pero luego sentí algo frío en la cara dejándome en shock, cuando solté el helado estiró su mano y me lo arrebato devolviendo el mío a su antiguo lugar.
-te dije que era mío —ahora fue el quien alzó los hombros restando importancia a lo que me había hecho, pero antes muerta que dejarlo regodear en su victoria, llené mi cuchara a tope y se la pase por la cara a él también.

-que divertida verdad —solté antes de carcajearme en su cara, viendo cómo se intentaba quitar todo.

se levantó llegó a mi lado y restregó su cara con la mía
-ya por favor... —me hacía cosquillas, estábamos haciendo un show todos nos miraban —marco para, por fis por fis —le rogué y el paro y me pasó una servilleta por algunas partes de la cara.

-espero no te queden más ganas. —me dio un beso en la mejilla, en este punto no me podía enojar solo me quedaba ir a limpiarme.
-voy al baño has arruinado mi hermosa cara —le dije mientras me iba sonriendo como tonta.



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 16, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Siempre TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora